¡Hey, Maki! ⋆⁺˖ NicoMaki ⋆⁺˖ Omegarvese #2

➜ ᎒ 01.

      —¿Por qué estás tan molesta, Maki-chan? —Pregunta Rin, mirando a su mejor amiga con curiosidad, que tomó asiento frente a ella y dio un pequeño sorbo de su bebida.

      —Nico-chan, ese es el problema. —Responde con un tono claramente molesto. —Es tan... irritante.

      La alfa de menor estatura pudo comprender finalmente de qué hablaba exactamente; ciertamente Yazawa Nico ya no le agradaba como antes al ya saber los hechos del pasado, mas tampoco la dejaba de querer y ver como una pequeña amiga. Muy al contrario por parte de la pelirroja, quien deseaba que aquella omega tan molesta desapareciera de su vida y por fin llevar una rutina llena de tranquilidad.

      —Nico-chan no es tan mala. Sí, ella causó ese daño entre ambas, pero debes entender que ella desea que le correspondas sus sentimientos. —intentó hacerla ver que sus palabras estaban mal, porque Maki quería deshacerse de la peli-negra sin importar qué.

      —No, a ella no le interesó lo que yo sentiría, simplemente pensó en ella misma y nada más. — espetó, cruzándose de brazos —. Se supone que llegó para mejorar mi relación con Nozomi, pero de repente trae a la Centinela Ayase y desde ese momento todo comenzó a cambiar, Rin.

      Rin estaba por decirle algo, de no ser porque recibió una llamada repentina por parte de su esposa. Suelta un corto suspiro y termina por levantarse de la silla color negro que hacía juego con la mesa.

      —Kayocchin necesita verme, después terminaremos de hablar, Maki-chan. —concluyó, terminando por ponerse su suéter color amarillo, y dejó una parte de dinero para pagar lo que comieron y bebieron —. Adiós, Maki-chan, nya.

      —Adiós, Rin. —responde cortante e imita la acción de la alfa de cabellos anaranjados.

      Finalmente, termina saliendo del restaurante y pasa sus largos dedos por sus rojizos cabellos, comienza a caminar por las ya oscuras y frías calles de Akihabara. Sintiéndose sola de repente al ver a los demás alfas con sus omegas, todas las parejas tomadas de las manos y con un leve rubor sobre sus mejillas.

      Nishikino Maki corrió para alejarse de ahí lo más pronto posible, queriendo nuevamente alejar todos los momentos que pasó junto a su amada omega hace ya varios años.

      —No entiendo, ¿qué es lo que tiene el destino en contra mía? —susurró, soltando un bufido al encontrarse con demás personas, entre ellas, parejas destinadas.

      La pelirroja ya no lo soportó más y simplemente dejó salir las lágrimas; era cierto que los alfas eran considerados los más fuertes de la jerarquía, pero también poseían aquel lado sentimental.

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