BLIND LOVE [Changlix]

[06]

Changbin llevaba ya unos años enseñando a
personas con discapacidades.

Pero realmente nunca había tenido con
ninguno de ellos, esa especie de vinculo que
tenia con Felix.

Al principio fue todo un desafío tratar con él,
pero eso sólo lo motivo más.

Y sobre todo, nunca había sentido nada más
que un simple cariño de profesor-alumno
hacia nadie más.

Pero todo cambió en cuanto lo conoció más
en profundidad.

La confianza, y ese simple cariño, se convirtió
en algo más, mucho más.

Pasaba la mayor parte de sus clases, tratando
de entablar una conversación con Felix, en lugar de enseñarle algo, cosa por la cual le
estaban pagando sus padres.

Pero esa tarde, cuando Changbin lo beso en el
parque, todo cambio.

En primer lugar no sabía por qué razón lo
había hecho, ni por qué estaba huyendo.

Quizá sólo tenia miedo.

Miedo de que nada vuelva a ser como antes,
de que Felix dejara de tratarlo como siempre,
e incluso que tal vez le haya contado a sus
padres sobre lo ocurrido, y que estos lo
despidieran y como consecuencia, no pudiera
volver a verlo.

– Si Felix les hubiera contado, ellos ya me
habrían despedido, ¿Por que soy tan
paranoico? — Se cuestionó a si mismo,
mientras se preparaba un café.

- ¿Otra vez hablando sólo? — Le preguntó su
amigo y compañero de departamento,
mientras se acercaba hacia él y le quitaba la
taza de café de las manos.

–¡Hyunjin! Deberías dejar de quitarme el
café cada vez que me hago uno. — Le pidió
frunciendo el ceño, recuperando de nuevo su
bebida.

– Lo siento. — Se disculpo cabizbajo. — Pero,
¿Que te pasa? ¿Ese niño al que le enseñas te
esta causando problemas?

– No es un niño. Y problemas no es
precisamente lo que me causa.

– ¿Entonces qué?

– Lo llevé a un parque, la estábamos pasando
bien, pero... Lo besé. — Le contó, tirándose en
el sofá.

– ¿!Lo besaste!? ¿Por que? ¿Acaso te gusta?

– Esas son demasiadas preguntas, Hyunjinnie.

– Responde, entonces. — Le dijo, acercándose a él.

– No sé por qué lo hice, lo tenía tan cerca de
mi rostro, y por alguna razón sentí que no
debía dejar ir esa oportunidad. Sin embargo,
huí, por miedo.

— ¿Acaso nuestro gran Changbin, el galán de
la secundaria, quien tiene a todos a sus pies,
tiene miedo al rechazo de su alumno?

– No te burles de mi, ¿O te tengo que
recordar sobre el incidente con el chico del
delivery del otro día?

– Una cosa no tiene nada que ver con la otra.

– iTe gusto el repartidor de pizza y te pusiste
tan nervioso que se te cayo la caja abierta al
suelo! Y él solo se rió en tu cara.

Hyunjin se sonrojo cubriéndose el rostro
con sus palmas.

- ¡Y a ti te gusta tu alumno de dieciocho
años! Lo besaste y escapaste sin darle la
oportunidad a aclarar las cosas contigo, ¿Que
es peor?

Changbin suspiró profundamente.

– Yo que tú, dejo de escapar, y aclaro como
son las cosas.