Eres mía, solo mía | Glacies (P #1) ✔️

7: ¿Yo?

Ares

Doy un paso, dos, y hasta tres pasos doy para llegar hasta ella. Mis ojos se fijan en sus rosados labios que forman una sonrisa. Ella voltea hacia mí y me sonríe aún más.

—El atardecer en California es hermoso, idiota.— me dice.

—Ya me lo has dicho.— le recuerdo.

—Bueno, pero es tan relajante.

—Sí que lo es.— digo.

Ambos caminamos un poco más hasta que nuestros pies rozan las diminutas olas que llegan. Todo esto es hermoso, el mar, la arena, ella... ¡Digo, digo! La vista.

Claro, claro, engáñate, Smith, pero verás que algo en ti nacerá y no lo podrás ocultar.

Ignoro a la voz en mi cabeza y me concentro en lo que está nuestro alrededor. Niños haciendo castillos de arena, adolescentes y adultos saliendo del mar, personas nadando y divirtiéndose. Qué bonito lugar.

—¡Tenemos que irnos!— nos grita Dereck al oído.

—¿¡Qué demonios, Dereck!?— grita Cat.

—Hay que ir a comprar las cosas para la despensa.— dice.— Caminen.

Dereck nos empuja a donde dejamos las cosas, agarro mi playera y mi toalla correspondiente. Los seis nos dirigimos a la casa club para poder devolver las toallas.

Volvemos a la casa, me dirijo junto a Dilan a nuestra habitación. Agarro rápidamente ropa limpia y me dirijo al baño. Tomo una corta ducha, me seco, me visto, seco un poco mi cabello y lo peino como siempre. Bajo a la sala y me tiro al sillón. Como sé que los demás se van a tardar bastante, cojo el control y pongo Netflix. Me decido por ver el capitán América civil war.

Mis ojos pegados a la pantalla no se dan cuenta de la persona que acaba de llegar pero siento la presencia de alguien. Un delicioso aroma invade mis fosas nasales, giro mi mirada y la encuentro. Cat esta vestida con un short de jean negro, un polo de manga corta negro y unas vans también negras.

—¿Qué película ves?— me pregunta mirándome a los ojos.

—Capitán América, Civil war.— respondo.

—Adoro Marvel.— dice.

—Yo también.

Apoya su cabeza en mi hombro sorprendiéndome, mis ojos vuelven a la pantalla por sólo dos segundos por querer ver a la chica a mi izquierda. Ella está revisando Instagram, mejor dicho publicaciones de perritos Golden.

—¡Awww! Es tan tierno.— dice y me muestra una foto de un perrito sacando la lengua.

—Como tú.— suelto. ¡Mierda! ¡Mierda!

—¿Crees que soy tierna?— Se levanta de mi hombro y conecta sus ojos con los míos.

—Cuando quieres serlo.— respondo.

—¿Así?

—Sí...— respondo.

Nuestros labios se acercan lentamente, nuestros ojos no dejan de mirarse, se enciende una chispa en los de ella. Una luz. Nuestros labios posicionados, nuestros ojos cerrados, la película sonando, todo es perfecto...

—¡Listas!— gritan dos chicas detrás. Cat y yo no separamos rápidamente y hacemos como si viéramos la película.— ¿Interrumpimos algo?

—Nada, chicas.— dice Cat y yo asiento.

—Claro, claro, beso, beso. Vamos, chicos, se aman y no pueden negarlo.— dice Maddie.

—¿Qué? ¿Amarnos nosotros?— intento sonar incrédulo.

—Claro, vemos como se miran.— habla Chloe.

—Sólo somos amigos.— dice Cat.

—Amigos que se gustan.— dice Maddie.

—¡Solo amigos!— digo.

—Cómo digan, tortolos, ya llegará el día en que sean novios.— dice Chloe.

Ruedo los ojos por el fastidio y sigo viendo la película. ¿Yo? ¿Enamorado de Cat? Pfff... para nada. Sólo somos amigos. Veo al Capitán América, su mirada, algo en el refleja seguridad, una chispa, veo la seguridad y la valentía que posee. Me gustaría ser como él, seguro y valiente. Pero soy un maldito cobarde.

Un maldito cobarde que no ayuda a sus padres, que es un estorbo para ellos. Un inseguro cobarde.

—¿Nos vamos?— dice Dereck sacándome de mis pensamientos.

¿Cuándo llegó?— Oh, claro.— digo. Me paro del sillón junto a Cat, apago la televisión y sigo a mi mejor amigo a la camioneta. Me siento en la fila de al fondo, Dereck como el conductor, Dilan como copiloto, Maddie, Chloe y Cat en la fila de adelante ya que no tenemos maletas.

Solo, me dedico a observar las calles por la ventana, a ver a niños felices con sus padres, una que otra pareja feliz, personas caminando solas pero seguras de sí mismas. Me gustaría ser como todo lo que veo, alguien seguro y feliz.

Siento a alguien sentarse a mi lado ¿A medio camino? Giro la mirada para encontrarme a Cat con una cara preocupada. Ella acababa de pasarse atrás trepando por su asiento. —¿Estás bien?— me pregunta.

—Sí ¿Por qué la pregunta?

—No lo sé, te veo muy pensativo.— dice.

—No es nada.

—Ares...

—Algún día te lo contaré.— digo.

—¿Algún día?

—Algún día.

Nota de la autora: ¡Hola! ¿Les gustó el capítulo? Pues yo lo amé. Se que es algo cliché pero me gusta.

YouOnIce2