Eres mía, solo mía | Glacies (P #1) ✔️

21: En secreto, por favor

Catherine

Mis ojos se llenan de la luz solar que atraviesa mi ventana. Me maldigo a mi misma por no haber cerrado la persiana. Mis ojos se sienten pesados, no quiero abrirlos pero necesito comer algo.

Estiro mi cuerpo soltando un bostezo.
Miro la hora en mi celular, las siete y once. ¡Mierda! Se me hizo tarde para correr. Rápidamente me levanto de la cama, me visto con ropa deportiva, cojo mis airpods y mi celular, bajo a la cocina para comerme una fruta e irme.—Buenos días, Cat.— me saluda alguien detrás mío haciendo que me sobresalte.

—Maldita sea, Ares, no lo vuelvas a hacer.— digo dándole el primer mordisco a mi manzana.

Me sonríe victorioso. Me fijo por primera ves en su ropa, una playera de ejercicio, unos shorts igual de ejercicio y unas zapatillas de correr.—¿Saldrás a correr?— le pregunto antes de tirar el corazón de la manzana a la basura.

—Sí ¿Vamos juntos?— me pregunta acomodandose el cabello.

—Sí.— respondo y empiezo a caminar al ventanal.

—Hey, alto ahí.— agarra mi mano, me acerca a él y me planta un beso en los labios.— Ahora si vámonos.

Sonrío como idiota y empezamos a correr. El poco aire de la mañana nos pega, la música en mis audífonos me distrae pego mi mirada en Ares...— ¿Qué? ¿Tengo algo en la cara?

Me sonrojo y miro para otro lado.— No, nada.

Por el rabillo del ojo veo como sonríe y continuamos corriendo.

Luego de media hora, llegamos de nuevo a casa. El cansancio es mutuo, Ares me pasa un Gatorate mientras toma el suyo. Le sonrío.— Somos los únicos que salimos a correr.— digo al ver la casa vacía.

—Sí, los demás son unos flojos.— se burla Ares.

Termino mi bebida, tiro la botella a la basura y me acerco a Ares.— Subiré a cambiarme.— le aviso. El asiente y me plasma un beso. Sigo el beso con sabor a frutilla. Nuestros labios parecen estar echos uno para el otro...

—¿Qué chingados?— exclama alguien desde las escaleras. Ares y yo por instinto nos separamos rápidamente, giramos nuestra mirada a las escaleras y vemos a Dilan.

—¡Dilan!— exclamo.— ¿Qué haces despierto?

—La mayor pregunta es ¿Qué se hacen besando?— pregunta levantando una ceja.

Ares y yo nos miramos.— Somos... novios..— dice.

Dilan nos mira picardio.— ¡Por favor, mantenlo en secreto! Al menos hasta que sepa como decírselo a Dereck.— pido.

—Está bien, pero tarde o temprano la va a descubrir.— acepta y va a servirse Corn Flakes como de costumbre.

—¿Qué mierda tienes con los Corn Flakes?— pregunto antes de subir las escaleras.

—No lo sé.— responde.— Nunca lo había pensado.

Ares

Subo en silencio las escaleras, me encamino a mi habitación para poder darme una ducha. Abro el fregadero y dejo que el agua me relaje.

Me visto con un short de baño, una sencilla playera y me coloco unas sandalias. Bajo de nuevo las escaleras con mi estómago rogando alimento. Me preparo unas tostadas con mermelada, me las como en completo silencio.

Me decido por salir y me encuentro a Dilan mirando el camino a la playa.— Hola.— lo saludo.

—Oh, Hola. No había sentido que llegaste.— me dijo.

—¿Qué tienes?— le pregunto al ver su expresión seria.

Suelta un suspiro.— Tú lograste todo lo que yo quería con Cat en una semana y yo no pude hacerlo en un maldito año.— dice y aprieta los puños.— Me siento tan decepcionado de mi mismo.

—¿No te molesta?— le pregunto esperando un "no" como respuesta.

—¿Qué cosa?

—Que este con Cat.

Veo como se tensa.— No. Sólo, ya sabes, no me lo imaginaba.— dice.— Entraré.

—Yo igual.— ambos entramos a la casa.

Veo a Cat bajar por las escaleras con un clásico short de jean, la parte de arriba del bikini, unas sandalias y su celular. Camina hacia nosotros, me da un beso en la mejilla, choca los puños con Dilan y sale a la terraza.— ¿Qué mierda le pasa?— pregunta Dilan.

Levanto los hombros sin saber que responderle.— ¡Mierda! ¿Qué te hizo?— exclama Cat desde afuera.— Ahora mismo voy para allá.

Cat sale corriendo y una expresión de confusión invade mi rostro.

Catherine

A paso rápido me dirijo a la casa de Cinthya, su llamada me preocupó bastante. A través del ventanal, veo a los padres de Cinthya conversando en la cocina animadamente.— ¡Hola!— saludo.

Ambos giran su mirada a mi y alegría cubre sus rostros. Los dos se acercan al ventanal y Louis es el que lo abre.— Cat, que alegría verte.— me saluda Cris.

—Me alegro mucho que hayan vuelto a Los Ángeles.— confieso.

—A nosotros también.— sonríen.

—Vine a ver a Cinthya ¿Está en su habitación?— les pregunto.

—Sí, no a querido salir desde hace rato después de encontrarse con Brick.— me informa Cris.

—Subiré de todas formas.— les dedico una sonrisa y me dejan pasar.— ¿La misma de siempre?

—La misma de siempre.

Nota de la autora: ¡Hola! ¿Cómo están? Yo muy bien. ¿Qué creen que haya pasado con Cinthya?

YouOnIce2