Catherine
Ares me abrió las puertas de una hermosa y pequeña cafetería. Ambos nos sentamos en una mesa.— Nunca había venido aquí.— le digo observando el lugar.
—Para mi es la mejor cafetería de los Ángeles.— me sonríe.
Un joven se nos acerca.— Hola, mi nombre en Steve. ¿Qué desean ordenar?— nos pregunta antes de guiñarme un ojo.
¿Todos los hombres tienen que ser igual de mujeriego?— Un frapuccino.— pide Ares.
—¿Y usted, hermosa?
Sus palabras me sorprenden, veo a Ares apretar los puños.— ¿Qué me recomiendas, amor?— le pregunto a Ares sorprendiendolo bastante.
—Como te dije, pequeña, el café es su especialidad.— me responde algo más tranquilo.
—Bueno, entonces un café con leche.— pido.
—¿Eso es todo?— nos pregunta Steve de mala gana.
—Sí, es todo.— contesta Ares.
Steve se retira y Ares me da una mirada sexy.— ¿Qué?— le pregunto.
—Puedo hacerte el amor en tu cama, hobit.
Siento mis mejillas arder.— ¡Ares!— exclamo causando que él suelte una risita.
Steve trae nuestros pedidos. Ambos bebemos mientras nos sonreimos y conversamos de cualquier cosa. Ares llama a un mesero con la mano ignorando a Steve pero él es quien viene.— La cuenta.— pide Ares.
Steve le da una boleta soltando un pesado suspiro.— Son quince dólares.
—Tenga.— Ares le paga.
—Para usted, hermosa.— Steve me da una tarjeta.
Caminamos a la puerta del restaurante y me fijo en su tarjeta. Ignoro su celular pero me fijo en la frase después de este.
A su servicio, hermosa.
—¿Todos los chicos tienen que darte su número?— se queja Ares.
—Sí, pero no me importan.— digo.
Ares me sonríe de lado y entramos a su auto. Él conduce a mi casa, nos despedimos con un beso, abro la puerta y ¡Oh, mierda! Dereck esta encima de Maddie mientras se besan apasionadamente.— ¡Mierda, consiganse un cuarto!— exclamo antes de dejar las llaves en la isla de la cocina.
—¡C-cat!— exclama Dereck cuando se levantó del sofá.— Pensé que vendrías más tarde...
—Pensaste, Dereck. Dije que saldría un rato con Ares ¡Un rato!— le recuerdo.
—Hola, Cat.— me saluda Mad.
—Hola, Maddie.— le sonrío.
Dereck ya le ha dicho la verdad a Claudia, ella en verdad estaba dolida. Camino a la lavandería buscando hablar con ella y la encuentro doblando la ropa de mis padres.— Hola, Clau.— la saludo.
—Hola, Cat.— me devuelve el saludo.
—¿Cómo estas?— le pregunto sentándome en un pequeño banco a su lado.
Detiene su trabajo un momento para mirarme.— Si te dijera bien, te estaría mintiendo.— confiesa.— Me dolió mucho lo que hizo tu hermano.
—Lo sé, a mi me decepcionó bastante. Enserio creí que le pasaba algo contigo ¡Incluso llegué a aceptarlo! Pero, siento decírtelo así, solo te uso.
—No te disculpes, Cat.— me da una sonrisa triste.— Lo sé e intento aceptarlo, pero creo que hasta llegué a enamorarme de él.— una lágrima baja por su mejilla.
—No llores, Clau, me harás llorar.— bromeo y ella se ríe.
—Está bien.— se calma un poco.— ¿Quieres comer algo?
—¿Ensalada de frutas?
—Te la haré.— sonríe. Claudia camina a la cocina y ve de reojo a Dereck quien está abrazando la espalda de Mad mientras ven una serie. Una expresión triste se forma en su rostro.
—Es un idiota por haber jugado contigo.— susurro.
—Es raro que le digas idiota a tu propio hermano.— murmulla sacando la fruta.
Levanto los hombros sin saber que decir. Veo a Claudia cortar la fruta, ponerla en un tazón y servir yogurt en este. Me da el tazón y empiezo a comer en silencio. Al terminar, lavo mi plato y subo a mi habitación.
Paro en seco cuando mi celular vibra.
Dos mensajes nuevos de Desconocido
¿Quién es desconocido?Desconocido: Si estuviera en tu lugar terminaría con Ares,
Desconocido: CatherineDesconocido a enviado un mensaje de multimedia
Dios
Dios
Dios
En esa foto, Ares se está besando con Camila una porrista. Una amarga lágrima baja por mi ojo derecho. Fui tan ingenua, Dereck tenía razón, Ares es un imbécil. Creí tantas cosas, pensé que enserio me quería, que me amaba y respetaba.
Flash back
—No digas nada, me lo has dejado bien claro, soy tu juego, tu peón. Gracias por hacerme sentir tanto.— me mira completamente dolido. Se da media vuelta y gira su cara hacia mí.— Me enamoraste, Catherine y no voy a negarlo.
Fin del flash back
Aquí, el juego y el peón fui yo. Me hizo sentir tanto, tanta magia, me hizo sentir que lo amaba... Yo fui la ingenua que se enamoró, él no, yo fui.
Yo gané, perras.
Fue mi frase hace unas horas. Ahora, sería:
Yo perdí, perras.
Más lágrimas caen de mis ojos, mis labios tiemblan y mi vista se nubla. Pongo a cargar mi dispositivo, me pongo una sudadera larga y me tiro a mi cama para poder dormir.
Yo perdí.
Nota de la autora: ¡Good morning! ¿Qué creen que haya sucedido con Ares y es tal Camila?
YouOnIce2
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Eres mía, solo mía | Glacies (P #1) ✔️
Ficção Adolescente-¿Qué soy para ti? -Tú eres mía, solo mía, no le perteneces a nadie más. Eres mi chica, eres mía, mi Catherine Morgan. -Idiota. -Y yo soy tuyo, todo tuyo, no le pertenezco a nadie más. Soy tu chico, soy tu idiota, tu Ares Smith. Historia original cr...