El Hallazgo Secreto

Capítulo 9: La primera emboscada

*** A la mañana siguiente se pudo percibir los vientos de una fría y despejada mañana y los rayos del sol que apenas se levantaba por el extremo de Berk, Chimuelo había vuelto poco después que ambos jóvenes se habían quedado dormidos y por ello Hipo fue el primero en despertarse abriendo los ojos lentamente encontrándose con Astrid que aún dormía entre sus brazos. Un par de minutos después ella también comenzó a levantarse, al principio con dolor de cabeza, pero poco a poco se fue incorporando hasta que por fin había despertado por completo, pero muy sorprendida a la vez al ver a Hipo a su lado, EN LA MISMA CAMA ***

Astrid: ¡¡¡AAAHHH!!! ¡Hipo, pero que...!

Hipo (tratando de detenerla): solo te quiero aclarar antes de que me golpes...

Astrid: ¡¡Hipo!! NONONO TRANQUILO ¿SÍ?

*** Hipo estaba tan metido en el miedo que no quiso escucharla y no tuvo otra opción que alejarse un poco de ella, no dispuesto a arriesgarse a molestar a la recién despertada y muy furiosa Astrid por la razón que él y ella habían dormido juntos. Hipo sabía con qué clase de chica estaba tratando pues no era cualquier chica, ni siquiera era una chica común y cualquiera, era una vikinga y para ser sincero era una vikinga fuerte y ruda, además de guapa.

Astrid se acercó a Hipo con la intención de calmarlo y este estaba considerando en llamar a Chimuelo para evitar que Astrid lo matase a golpes, pero este solo se quedó observado, debido a ya estar tan acostumbrado a ver a Astrid maltratando a Hipo ya no le importaba mucho que lo golpeara. No obstante, los golpes tampoco llegaron, Astrid se sentía avergonzada por su falta de consideración y algo de delicadeza en esta situación, ante todo. Entre el conflicto ambos vikingos y dragón habían escuchado algo raro que provenía de afuera...***

¿? (Gritos desde afuera): ¡¿OIGAN, SERÁ QUE PODRÍAN GUADAR SUS DISCUCIONES PARA OTRO MOMENTO Y BAJAR?! (Inmediatamente ambos reconocieron aquella voz tras la ventiluz, al parecer la joven Miriam se había levantado mucho antes y para su probable mala suerte, Miriam podría haber alcanzó a oír gran parte de la discusión)

Astrid: lo siento de verdad Hipo, no quise asustarte, aprecio el gesto por haberme acompañado pero no la idea no era... ya sabes (desvió la mirada un poco avergonzada)

Hipo (sujetándose el cuello): bueno, también perdóname a mí por...ya sabes

Astrid: claro (lo golpea en el brazo izquierdo) esto es por la burla de anoche (lo besa en la mejilla) y esto...por todo lo demás (así que se adelanta en bajar dejando a Hipo completamente aturdido tardando unos minutos en volver a la realidad)

*** Abajo***

Miriam: ¡Hipo! ¿Se puede saber el motivo de la tardanza? Mejor dicho ¿El motivo de tanto alboroto y discusiones?

Hipo: pues...

Astrid: yo... nosotros

Miriam: no importa, para que pregunto chicos (se pellizcó el puente de la nariz), como sea, vine a informarles que hay un barco aproximándose

Astrid: el Mercader Johann

Hipo: que bueno, justo a tiempo

Miriam: bueno mejor me adelanto, le prometí a Patán que lo acompañaría a noche y si hablas de Tormenta está en tu casa, ayer nos siguió por el pollo que traía y...

Astrid: OUCH, lo siento, olvide decirte ese detalle

Miriam: no te preocupes, mejor me voy, tengo cosas que intercambiar, nos vemos (se va corriendo del lugar)

*** En la orilla ***

M. Johann: OH Berk, mi pueblo favorito de todos, la perla, la joya y...

Miriam: ¡ya está aquí!