¡Capitán Lee! - ♯݊hyunho/hyunknow

Capítul๑ 7.

Incómodo.

Era la única palabra que podría representar el estado del más alto en ese momento.

Su mirada daba vueltas alrededor de su cuerpo, las escandalosas carcajadas y botellas rotas se hacían cada vez más presentes mediante avanzaba entre esas casas de madera, y hospedajes también.

Tanto él como Lia estaban detrás del capitán, quien caminaba a paso tranquilo entre todo ese escándalo, incluso saludando a algunos con una sonrisa que HyunJin deseó muchas veces arrancar.

—Parece que quisieras matarlo —se burló Lia, dándole un empujón para que no le cayera una botella encima—, al menos disimula hombre.

—Si pudiera lo haría, créeme —suspiró tomando su espada en mano por si algo ocurría.

Un tipo a su costado bebía de forma vulgar una botella de alcohol, incluso chorros caían sobre su rostro y larga barba.

HyunJin hizo una mueca.

—Por aquí.

Los llamó el mayor y ellos tan solo lo siguieron entrando en una de las tantas construcciones de madera, era incluso peor que allí fuera: señores apostando por otros dos que estaban luchando a espada para ver quien caía primero.

Definitivamente, HyunJin no podía creer ni comprender que valoraran tan poco su vida. Cabía destacar que él era creyente de Dios por parte de su padre y aunque no fuera fiel a ese "rasgo familiar" (aunque no sabía si era uno) tal acto le parecía despreciable.

MinHo paró a ambos en cuanto llegaron a unas especies de mesas que eran protegidas por cuatro paredes. Parecía un simple bar como los había también en el puerto en el que solían vivir.

—Bien, se quedarán por aquí —el mayor asintió a sus propias palabras volteando hacia ambos—, y no debería decirlo, pero no hagan nada estúpido —vió a Lía—. Cuida de él ¿si? —, la menor divertida por el tono de éste oprimió una risa y HyunJin bufó bajo volteándose y apoyándose en la madera que rodeaba la entrada a esa pequeña cabina, Lia se puso a su lado.

—Ésto es incómodo, ésta situación ya lo es de por sí —se susurró a sí mismo cuando el mayor ya había entrado.

—¿De qué crees que estén hablando? —cambió el tema la de cabello largo.

—¿Había alguien allí?

—No creo que haya ido a hablar con las paredes, aunque sólo se escuchen murmullos—hizo un mohín insatisfecha—, me gustaría saber de qué hablan.

—A mí no.

—¿No te da curiosidad ni en lo más mínimo?

—Ni en lo más mínimo.

Lia bufó cruzándose de brazos— Aburrido.

HyunJin rodó los ojos volteando su vista y atención hacia una pareja que cantaba una extraña canción, le parecía haberla escuchado antes, la letra era sobre el mar; le parecería más hermosa, si no fuera porque las carcajadas le acompañaran y las voces de ambos eran nada melodiosas.

—HyunJin —cuando el menor hizo un sonido gutural para que continuara, siguió—, ¿crees en las sirenas?

—¿A que viene esa pregunta? —pregunta de forma tranquila aún con la atención a la letra de la canción.

—Esa canción... —el contrario la miró confundido—, trata sobre sirenas, una vez uno de los comodoros la cantó diciendo que la escuchó en uno de sus viajes, diciendo que eran voces como de sirenas.