El plan de Josh había comenzado y aunque no era el más elaborado, por un lugar se empezaba. El plan era simple, sacarlo a comer y conquistarlo con sus encantos inexistentes.... estaba perdido...
Un bufido salió inesperadamente alto y Tyler lo miraba alzando la ceja.
-¿Sucede algo?, ¿no te gustó la comida?- el castaño comio de su comida y realmente no le encontraba lo malo, no era de chefs pero era algo.
- No, no, está bien, solo... ¿quieres ir a una cita conmigo?-
- Claro pero... ¿eso te hizo bufar así?- se levantó recogiendo su plato yendo al sink.
- Es más complicado que eso pero ahora estoy feliz de que dijiste que sí, hoy a las tres ¿te parece?, a la hora de tu comida te mando la dirección- lo abrazo por atrás y le dejo un pequeño beso en la mejilla dejando su plato ahí para que lo lavara.
- lava tus cosas- le aventó el trapo arrugando su nariz y se río negando mientras seguía lavando.
Sus horarios habían sido tan complicados eran las cuatro de la mañana su pequeño ni siquiera estaba despierto y el ya se tenía que ir, Josh había llegado a las tres de la mañana de su trabajo y Tyler se despertó a hacerle de comer antes de que durmiera, sabía lo descuidado que era con su alimentación.
Finalmente terminó de limpiar y entro al cuarto de Josh quien estaba sentado sin camisa en la cama mirando fijamente a la pared.
- Hey, no te quedes dormido hasta que dejes a Johnny en la escuela no me gusta que me interrumpan en el trabajo porque no te despiertas ni con una bomba-
-Mhm...- Josh volteo a verlo pero realmente no lo había escuchado estaba tan cansado que su mente no procesaba la información.
- Adiós Joshua- cerró la puerta y finalmente se fue a trabajar donde su paga era la misma que la de un cajero del mercado apenas si le alcanzaba para vivir pero claro para eso estaba Josh a quien le devolvería cada centavo.
Mientras iba manejando de camino a su trabajo un cursi pensamiento lo hizo sonrojarse un poco recordando esa cita planeada, no quería hacerse expectativas y probablemente tendría que empezar a planear su vida después de las citas y no exactamente en el mejor sentido, el sabía que había cambiado demasiado, todo en el era diferente, antes era más rebelde, aventado dispuesto a la aventura ahora... ahora era un chico aburrido que tiene que revisar el clima diez veces antes de salir para saber que tan pesada debe de ser su chaqueta.
Josh en cambio es incluso mejor, dejo de lado su lado narcisista y su búsqueda por ser incluido, cosa que hacía mucho en la prepa, acostarse con todos solo para tener una reputación, ir a fiestas por la popularidad incluso Tyler le subió la fama pues tenía un amigo con beneficios sin la responsabilidad de una relación, claro todo cambió de un día para otro para Tyler pero para Josh... de seguro su vida incluso mejoró cuando se fue pues sabía que tenía muchas personas detrás de él.
Tyler se hizo el rarito de la escuela pues se alejó de todos y de ahí no volvió a salir, no sabía que había pasado con Josh pero definitivamente debió de haber sido algo malo como para que ahora no salga de su casa más que para comer y solo porque no sabe cocinar otra cosa que no sea un desayuno.
Todos estos pensamientos estuvieron invadiendo a Tyler y tuvo que esforzarse realmente en centrarse en su trabajo y más ya que exactamente a la una le llegó un paciente en estado crítico, al parecer lo habían arrollado.
La cirugía duró cinco horas y las cinco horas estuvo dentro del quirófano operando pensando en como ayudar a salvar a ese hombre en la mesa olvidando completamente a la comida que tenía con Josh quien le había dejado varios mensajes los cuales apenas había tenido la oportunidad de leer.