Pequeñas tentaciones.

La sumisa?

-animal? Yo?- sonrie

-si tu, eres un estupido- le grito, como se atreve a besarme, pienso.

-bueno, katherine no te enojes, dime algo- me dice con esa media sonrisa que me derite.

-que!?- le digo cortante.

-te gusto?- me pregunta sonriendo.

-no, claro que no - le digo, pero en realidad me encanto, oh por dios el mordisco que me dio me causo un gran placer.

-si te gusto, lo sentí- rie

Que como? No creo que sea brujo.

-que? Acaso eres brujo? - le pregunto.

El rie - oh claro que no soy brujo, soy hombre-

Por dios que tiene que ver eso pienso. -Kate, quisiera conversar contigo por tu contrato- me dice serio.

- sabes algo augusto tus cambios de humor me asustan- le digo, y el se rie de mi.

-oh que bueno que te divierto- le digo algo molesta.

-kate, pense que serias perfecta para lo que te quería, pero veo que eres muy rebelde y extrañamente me gusta- me dice con un tono sexy.

Por dios a que se refiere??, Pienso.

-entonces, hoy te paso a recojer a tu casa, para llegar a un acuerdo- me sonrie tan tierno, que hace que le devuelva la sonrisa y sus lindos ojos brillan, pero de pronto se pone serio, tendra un problema mental? Me pregunto a mi misma. - esta bien Augusto, a las 7:30 te parece bien?- le pregunto, pues, con el no se sabe es tan controlador.

-claro, ahi estare- me dice.

-bueno Kate, ya que arruinaste mi almuerzo vamos a trabajar- me dice serio nuevamente.

-oh, claro- le digo, arruinar su almuerzo, el arruino el mio,

Por dios es tan, tonto, no encuentro la mala palabra para describirlo.

Llegamos al holding y me dirijo a mi oficina, Leslie me mira de pies a cabeza con cara de asco u odio, no le e echo nada no lo entiendo.