Pequeñas tentaciones.

Gerente general.

Han pasado seis meses de la muerte de mi padre, y resulta que ahora soy la dueña de la empresa familiar, he resivido muchos mensajes y llamadas de Augusto que no he respondido, aún me duele la muerte de mi papá esta muy fresca en mi aún no me repongo a la idea de que ahora si estoy sola, sola en el mundo, paso la mayor parte del dia en la empresa y la otra parte que queda en la universidad,  Sasha mi asistente personal trae mis reuniones de hoy y para mi mala suerte solo es una y  es con Augusto, me dispongo a salir y llego al restaurante donde mi padre hacia cada una de sus reuniones,  hoy visto con un jeans negro y una blusa de transparencia negra, no me he sacado el luto y no pienso hacerlo, pasan los minutos y aparece Augusto con un hermoso traje azul impresionante, se vee sexy y enciende esa llama en mi que hace que lo desee desesperadamente, terminamos firmando los acuerdos y Augusto me ofrece ir a su casa, me pilla desprevenida y acepto, como siempre Isaac me debora con la mirada el me pone nerviosa, Augusto se da cuenta y lo fulmina con la mirada, llegamos a casa de Augusto y comenzamos a charlar.

-como has estado kate- me pregunta cauteloso.

-como crees tu?-le digo sarcástica

Me mira de reojo y sonríe.

-siempre tan insolente- me dice

-discul..- antes de terminar la frase me besa para callarme,  respondo a su beso eufórica no sabe cuanta falta me hizo, me coje en brazos y me tira sobre su cama,  me saca la blisa y el pantalón dejandome solo en ropa interior.

Luego se aleja y busca algo en uno de sus muebles, es una venda.

-vendare tus ojos y amarrare tus manos- susurra en mi oido mintras venda mis ojos, con tan solo escucharlo me excitó y gimo de placer, me venda los ojos y me siento mucho mas expuesta, me amarra a la cama y comienza a rozarme la piel con la yema de sus dedos, me estremesco con su delicioso contacto, gimo de placer y luego comienza a besarme y se desace de mi ropa interior, shupa y muerde mis pesones lo que me hace gemir muy fuerte y de pronto tira muy fuerte de mi cabello, lo que hace que intete soltar de mis amarras, sigue torturandome con su lengua hasta que llega a mi clitoris y lo subciona haciendo que casi llegue a mi culminación,  sigue torturandome por un largo momento.

-Augusto por favor- ruego por el lo nesecito en mi.

-espera querida- me susurra con una voz cargada de erotismo, y de pronto me azota fuerte que me hace gritar de dolor pero extrañamente me excita, y de pronto siento el peso de su exquisito cuerpo sobre mi y de pronto me penetra fuerte y duro, me hace gritar, gemir de placer, sigue su ritmo bruto fuerte por un largo lapso de tiempo,  comienzo a temblar y no puedo aguantar mas y termino con un sonoro y exquisito orgasmo, y siento como Augusto termina en mi susurrando en mi oido mi nombre.