Capítulo 7.

395 34 9
                                    

Lucero se quedó impresionada al ver que Melendi y Carlos se encontraban presisamente ahí, Melendi dando un grito mexicano con mariachis y los dos con sombreros de charro...

-¿Pasa algo mi amor?- Preguntó Kuri.

-Eh, no... es que acabo de ver a unos amigos- Respondió Lucero con asombro.

-¿En serio, a quiénes?-

-Ven, mejor te los presento- Lucero agarro del brazo a Kuri y caminaron hacia donde estaban Carlos y Melendi.

Melendi alzó la vista y al ver a Lucero, sintió que el mundo se frenó al ver a aquella mujer que tanto le quitaba el sueño, se perdió entre la luz que irradiaban sus ojos color marrones, como la miel, su cabello suave como la seda y esa sonrisa angelical que a el le daban mil años de vida, ahí estaba ella sonriendo y el sentía como si solo estuvieran ellos dos, flotando en su universo.

Kuri y Lucero se encontraban frente a Carlos y Melendi, Carlos de quedó pasmado al ver a Lucero ahí y con su novio Kuri.

- ¡Holaa! Nunca imaginé encontrarlos aquí- Dijo Lucero y saludo de beso en la mejilla a Carlos.

-Yo menos, que coincidencia- Respondió Carlos un poco nervioso.

-Mi amor, te quiero presentar a mis amigos-

Carlos volteó a mirar a Melendi y se dió cuenta de que el estaba perdido y algo ido viendo a Lucero, disimulanda mente le dió un codazo para que reaccionara.

-Ellos son Carlos Rivera y Melendi, mis amigos y rivales en La Voz Kids-  Rieron.

-Carlos, Melen... el es mi novio Michael Kuri-

-Mucho gusto- Dijo Carlos a Kuri y le dió la mano para estrecharla.

-El gusto es mío, te ubico perfectamente y a mi hija le gustan mucho tus canciones- Sonrió.

-No me digas, que alegría saberlo- Respondí Carlos sonriente.

Melendi se acercó a Lucero y le plantó dos besos muy tiernos en la mejilla, seguido de un abrazo muy cariñoso.

Kuri se percató de eso y le pareció un tanto extraño. A Lucero le pareció muy normal, por el cariño mutuo que sienten el uno por el otro.

-Hola, qué tal... soy Melendi- Respondió secamente.

-Un gusto- Respondió Kuri con frialdad y estrecho su mano con la de Melendi.

La incomodidad de ese momento se sentía a flor de piel, tanto que Carlos comenzó a toser, para ropero el hielo.

-¿Te encuentras bien Carlos?- Preguntó Lucero.

-Cof... Cof- Seguía tosiendo Carlos. -Si, todo muy bien mi Lu-

-Oye, eres un hombre muy afortunado- Le dijo Melendi a Kuri.

-Gracias, y por qué lo dices?-

- Por la novia tan hermosa que tienes-

-Gracias, yo lo sé, ella es el mayor tesoro que tengo en mi vida, es lo mejor que me pudo pasar, estamos muy enamorados también- Kuri marcando territorio.🤣

-Pues... los felicito- Respondió un tanto irónico. - Y te repito eres muy afortunado, así que cuídala porque cualquier hombre caería rendido a sus pies-

- Lo sé, pero descuida, eso no pasará- Respondió Kuri y guiñó el ojo.

Lucero se puso nerviosa ante esa situación un tanto incómoda, Carlos se dió cuenta y para

-Bueno, les gustaría pedir una canción, aprovechando que está aquí el mariachi, les puedo invitar algo de tomar?-

-Ayy que lindo, gracias mi Carlos, oye esos sombreros de charro que bien se les ven a los dos- Sonrió.

-Gracias, ya solo falta mi traje de charro- Respondió Melendi.

-Oye pues estaría increíble que en un programa de “La Voz Kids” lo llevaras-

-Qué buena idea- Respondió Melendi.

-MESERO- Gritó Carlos.

-¿Qué quieren de tomar?-

-Bueno, yo con una limonada estoy bien- Respondió Lucero.

- Mi Lu, Micho... acompáñanenos con un tequila-  Dijo Carlos.

-Bueno, esta bien- Respondió Lucero.

-Claro que sí- Dijo Kuri.

-Enseguida traigo sus bebidas- Respondió el mesero.

-Oye mi Lu, haznos el honor de cantarnos una canción, aquí con los mariachis-

-Si mi amor, haznos el honor-  Dijo Kuri.

-Va, yo encantada, A VER MUCHACHOS, ARRANQUENSE CON “LLORAR”.

Los mariachis comenzaron a tocar la canción de “Llorar” y Lucero empezó a cantar.  La letra de la canción, le llegó a lo más profundo a Melendi, y la manera en que Lucero estaba interpretado la canción lo conmovió tanto que dos gotas de agua cristalinas bajaban de las pupilas de Melendi.

Y así continuaba esa noche, que se había convertido en una bohemia, cantaron varias canciones, tomaron tequila, vino y cenaron comida típica mexicana.  Melendi no la estaba pasando tan bien, se sentía muy triste de ver a Lucero con su novio, la veía enamorada de él y eso lo llenaba de frustración por quererla tanto y sentir ese sentimiento de amor hacia ella, sin ser correspondido.

Melendi se levantó de su silla.

-Disculpe un momento, voy al sanitario-

Carlos ya se había percatado de lo mal que estaba Melendi, así que decidió acompañarlo, para hablar con él.

-Bueno por ahí voy contigo-  Dijo Carlos siguiendo a Melendi.

Ya alejados de la mesa dónde se encontraban Kuri y Lucero.

-Ey Melen...- Le dió Carlos un par de palmadas en la espalda de Melendi.

-¿Qué pasa Carlos-

-Ey, cómo qué, pasa... Sé cómo te estás sientiendo y que estás mal, déjame decirte que está situación tampoco es fácil para mí, pero en realidad yo estoy muy confundido con mis sentimiento, pero sé que tú si la estás pasando muy mal, hay algo que pueda hacer por ti, brother?-

-La verdad es que estoy muy mal, y yo ya no soporto un minuto más aquí, me duele verla tan enamorada de él y que lo que siento por ella no sea correspondido, así que nos podemos irde aquí?-

-Sí claro que sí amigo, vamos a despedirnos, ya para irnos-

Melendi y Carlos regresaron a la mesa dónde se encontraban Kuri y Lucero.

-Mi Lu, Melen... y yo ya nos tenemos que ir-

-Ayy no, de verdad?-

-Sí, es que bueno ya estamos un poco tomados, ya pedimos un Uber, de echo ya llegó, está aquí afuera y ya les pagamos a los mariachis, así que nos pasamos a retirar-

-Bueno... pues ni hablar, me dió mucho gusto encontrarlo aquí y la pasé muy bien, fue un rato muy agradable-

-Nosotros tambiéeeen-

Carlos se despidió de Lucero con beso en la mejilla, y de Kuri con la mano estrechada.

-Bueno ya nos vamos, nos vemos pronto- Dijo Melendi y se acercó a Lucero, la moto fijamente a los ojos, en ese momento Lucero sintió como si un remolino de mariposas volarán por su vientre y suspiro.

-Claro Melen, adorado-

Melendi se despidió de Lucero,  solamente estrechando la mano, para Lucero fue extraño, Melendi también se despidió de Kuri estrechando la mano, muy rápido y seguido de eso, Carlos y Melendi se retiraron del lugar.

Michael Kuri y Lucero se quedaron ahí en el restaurante, pero Lucero se quedó muy pensativa ante la actitud de Melendi y en todo lo que ella estaba sintiendo por él...

Continuará...












La musa de mis melodías. Lucelendi❤️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora