Distracciones y Revelaciones (Traducción Supercorp)

CAPÍTULO 12

*Todos los créditos a la autora original*

Funcionó. Ella lo hizo. Lena había retrocedido con éxito en el tiempo y detuvo la muerte de Supergirl, con todas las cosas: un beso. Había ayudado a Kara a aguantar el tiempo suficiente para que Brainy apagara el sistema.

Y sin embargo, ahora, a pesar del alivio de hace unos momentos, la sonrisa de Lena se desvanece y cualquier alegría desaparece cuando Kara recupera la conciencia parcial solo lo suficiente para sacudirse, toser, y ahogarse. 

Alex y Lena se dan cuenta al mismo tiempo de que podrían ser las cadenas de kryptonita en las muñecas de Lena.

—¡Muévete!— Ordena Alex mientras es ayudada por un agente a mover el cuerpo lejos de Lena. 

Pero no hay cambio. El cuerpo de Kara tiembla y se retuerce mientras jadea y jadea, una mano llega a su pecho mientras las venas de su cuello se hinchan y está claro que está en completa agonía.

—¿Qué está pasando?— Lena no entiende. Está lo suficientemente lejos como para que la kryptonita no afecte a Kara

—¡Ella no puede respirar!— dice Alex con los ojos muy abiertos y
aterrorizados. —Es la kryptonita. Estaba en el aire de las partículas y ahora está en sus pulmones— Alex agarra la mano de Kara y ve el tono verde de sus venas, que todavía recorre todo su cuerpo, hasta su cuello y rostro e incluso sus ojos.—Está en su torrente sanguíneo. ¡Por favor Kara!— Alex suplica, desesperada. 

En este momento, Lena se da cuenta de por qué Kara había estado tan molesta con ella por su alijo de kryptonita. Esto fue brutal. Esto fue horrible. Este nivel de sufrimiento, este grado de dolor, nadie debería tener que sentir eso. Especialmente alguien tan bueno y heroico como Kara. Y el hecho de que Lena haya tenido algo en su poder que pueda hacerle esto a Kara, a la persona que ahora sabe que más ama en este mundo, la pone físicamente enferma. 

—¡Vuelve!

El grito sobresalata a Lena de su autoflagelación. Ella observa cómo Alex y los agentes se alejan varios pasos de Kara, y Alex arroja una granada amarilla al cuerpo. 

Después de que un breve destello envuelve a Kara, ella finalmente jadea por completo. E inmediatamente pierde la conciencia nuevamente. Alex cae de rodillas a su lado y le pone una oreja en el pecho. 

—Su ritmo cardíaco se está desacelerando— dice Alex aliviada. Pero ella sabe que todavía no está fuera de peligro. —Tenemos que llevarla a las lámparas solares. Ahora.
— Ordena a medida que llegan más agentes. 

Mientras los agentes rodean a Lena y trabajan en sus cadenas, ella ve cómo se llevan a Kara, y reza a un Dios en el que nunca creyó que todo esto no fuera en vano. 

——-

Los ojos de Kara se abren. Los recuerdos brutales del dolor de su cuerpo que se separa del interior se inundan, y es casi demasiado, incluso solo el recuerdo, hasta que ve algo que la calma. Algo que es la mejor vista con la que podría haber despertado. Lena . Sentada junto a su cama, con los ojos cerrados. Se ve exhausta, tal vez incluso dormida. La mirada de Kara baja para ver que las muñecas de Lena están rojas y magulladas por sus ataduras anteriores. Y luego ve: la mano de Lena agarrando la suya. No lo había sentido antes, hasta que el entumecimiento se desvaneció y ahora podía sentir sus dedos de manos y pies nuevamente. Y ahora puede sentir el agarre de Lena. Su propio dedo se contrae involuntariamente al sentirlo, sorprendiendo a Lena, que se da vuelta y se sienta derecha alarmada, y cuando hace contacto visual con Kara, se alivia. 

Lena la mira por primera vez en mucho tiempo con algo más que enojo. Algo gentil y cálido. 

—Hey— dice Kara apenas por encima de un susurro.