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— Y bien

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— Y bien... ¿Cómo has estado?.— JiMin hace una mueca ante la pregunta de su mejor amigo.

— ¿La verdad?

— Si.

— Mal... Estoy muy mal, Jinnie.

— Lo sé, tus ojistos tristes no me engañan, ¿quieres hablar de ello?.

El rubio asiente y se recuesta en las piernas del mayor.— Lo extraño, Jin, lo extraño mucho y no sé como acabar con este sentimiento, ¿sabes? Hoy lo vi con un chico, al parecer es el nuevo profesor de artes. Él es muy guapo y también sé que a puesto sus ojos en él. Me duele pensar que tal vez el logre conquistarlo y lo tenga como yo jamás lo tuve...

— No sigas tormentandote con eso, cariño, lamentablemente no todo lo que queremos lo obtendremos fácilmente. Debes admitir que tú también tienes la culpa, perdón si te lo digo, pero, este sufrimiento te lo buscaste tú solo.

JiMin asiente de acuerdo con las palabras de Jin.

— No tienes que disculparte, yo sé que cometí un error, sé que todo lo ocurrido también es mi culpa. Pero... ¿Era necesario que las cosas terminaran así?

— Las cosas suceden por algo, lo que es para ti, lo será así haya mil impedimentos. Y si HoSeok no es para ti y ya no quieres lastimarte y lastimarlo, dejalo ir y vive tu vida. Ambos encontrarán a la persona correcta.

JiMin solo pensaba en si valdría la pena dejar ir lo que tanto anhelo, ¿Debería dejar ir a HoSeok?, o... ¿Debería luchar una vez más por su "amor"?.

HoSeok estaciona su auto afuera del hogar de JungKook, él le había ofrecido al menor pasar por él

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HoSeok estaciona su auto afuera del hogar de JungKook, él le había ofrecido al menor pasar por él. Sale de su auto y camina hacia la puerta de la bonita casa y toca el timbre con paciencia.

A los segundos el apuesto pelinegro aparece tras la puerta con una sonrisa.

— Hola.— JungKook le da un pequeño abrazo al mayor y este lo corresponde con amabilidad.— ¿Nos vamos?

HoSeok asiente con una pequeña sonrisa y el menor prosigue a cerrar la puerta de su casa. Ambos suben al auto y toman su camino hacia la cafetería que JungKook le indicó.

El camino era silencioso pero para nada incómodo. Hasta que JungKook decide romperlo.

— Y... ¿Tienes pareja?

HoSeok sonríe y niega.— Estoy en proceso de divorcio, ¿y tú?.— HoSeok se detiene en un semaforo y observa a su menor.

— Termine con mi novio hace dos semanas...

— Al parecer los dos tenemos el corazón roto.

— Así es...

Ambos se miran fijamente y se acercan con lentitud, sus bocas a punto de juntarse. La bocina de un auto suena asiendo que ambos se sobresalten y se separen con rapidez.

HoSeok arranca y después de eso todo se volvió un poco incómodo.

...

La espalda de JungKook choca con rudeza en la fría pared de la habitación de Jung, al parecer la incomodidad había pasado al siguiente plano y el desamor en común los conecto.

Los besos eran ardientes y totalmente fogozos, sin sentimientos depormedio, lo que ambos necesitaban.

Sexo para sacar su ira y decepción.

La ropa desaparece en algun lugar de la gran habitación y sus cuerpos completamente desnudos quedan expuestos. HoSeok observaba con descaro el cuerpo de JungKook, le encantaba lo que veía.

Pero JungKook no era JiMin...

Por otro lado el pelinegro observaba al mayor con lujuria, pero de igual manera no era el cuerpo de su ex novio, Taehyung...

Ambos vuelven a unir sus labios en un fogozo beso y se tumban sobre la cama para acariciar mutuamente sus cuerpos. El pene de HoSeok comienza a rozar la entrada del menor y este gime en respuesta.

El mayor se separa del caliente cuerpo de JungKook y saca el lubricante y un condón de su mesita de noche. Lubrica con sus dedos la entrada de JungKook haciendo que este soltara jadeos obsenos para él.

Cuando el pelinegro esta lo sificientemente abierto recibe el pene de HoSeok en su estrecha y caliente entrada. El mayor gime por lo bajo para después comenzar a mover sus caderas a un ritmo delisiosamente caliente.

Pero de nada servía si ambos tenían en mente a personas distintas, por que de nada servía dar caricias tan vacías como las que ellos se estaban dando. Por que ellos no eran lo que buscaban.

Y tal vez no era la manera de olvidar, pero si de dejar de pensar en un momento su dolor.

Y tal vez no era la manera de olvidar, pero si de dejar de pensar en un momento su dolor

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 P R O H I B I T E D (HopeMin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora