𝗯𝗲𝗮𝘂𝘁𝗶𝗳𝘂𝗹 𝘁𝗵𝗶𝗻𝗴 ➳ payton moormeier [terminada]

22|

Siento que te voy
a querer toda la vida.

-Avenida 749

Janet

Me despierto sintiendo una mano rodeandome la cintura, giro y me encuentro a Payton durmiendo tranquilamente, su pecho desnudo sube y baja lentamente debido a su respiración.
Acaricio su cabello, él abre los ojos.

-Lo siento, no quise despertarte.

-Solo me hacía el dormido, te pones muy cariñosa por las mañanas- dice colocándose encima mío y dejándome un beso en los labios- Es más que evidente que duermes muchísimo más que yo.

-Tal vez- digo, Payton me mira indignado- Bueno sí, tengo el sueño muy profundo y si fuera por mí estaría durmiendo todo el día.

Él me mira con cara de "te lo dije".

-Escúchame- dice- Mamá ha estado extrañandome mucho, y yo a ella también, así que en la tarde sacaré un vuelo hacía Carolina Del Norte y seguramente viajaré dentro de un par de días.

-Está bien, dile a Joanne que yo también la extraño.

Él ríe.

-Bien.

Le doy un besito en la punta de su nariz.

-¿Salimos a desayunar?- le pregunto

-Sí, muero de hambre.

***

Bajamos las escaleras ya cambiados cuando nos encontramos con un profundo silencio en el resto de la casa.

-Que raro- dice Payton

Lo es, hasta ahora me acostumbré a bajar de el cuarto y escuchar la televisión, o a Sam gritando enojado porque perdía en los videojuegos, o a Emma e Ivana contándose chismes.

-Todos deben estar durmiendo, ayer fueron al teatro y claramente llegaron tarde- suspiro- Bien, vámonos- le digo a Payton

Tomo las llaves (sí, ahora tengo llaves, gracias Emma) y salimos de la casa.

Una vez llegamos a la cafetería más cercana, cada uno pide su desayuno y procedemos a esperar.

Tomo mi celular para avisarle a Emma donde estoy.

-Déjame tomarte una foto, es para Emma- le digo a Payton.

Éste posa mostrando una pequeña sonrisa, haciéndome sonreír mientras tomo la foto.

Guardo mi celular en el bolsillo de mis jeans, y en ese mismo instante llega nuestro desayuno. Bastante rápido.

-Ey, debo contarte algo- lo miro- No te preocupes, no es algo grave- digo después de ver la expresión preocupada de su cara

Él parece calmarse.

-Hace aproximádamente dos meses, he empezado a escribir una canción.

Payton abre sus ojos haciéndolos parecer dos platos.

-Dios mío, tienes que mostrarmela ya- dice entusiasmado

Río por su cara de sorpresa y por la emoción que me recorre en el cuerpo.

-Espera, todavía no la he terminado. Y no escuchaste la mejor parte.

-¿Cuál es la mejor parte?- pregunta

-Esta canción es muy especial, no sólo por ser la primera que escribo, sino también porque la escribí pensando en tí.

Siento como mis mejillas comienzan a arder después de decir lo último.

-¿Es en serio?- la voz de Payton cambia a una más conmovedora y tierna

Asiento.

Él se para de su asiento y se acerca a mí para abrazarme.

-Gracias- me dice

-No tienes por qué agradecerme.

-Si tengo por qué- me mira- Eres increíble, nunca pensé que alguien podría llegar a escribirme una canción. Me muero por escucharla.

-Pronto lo harás- le digo

Él besa mis labios.
Sonrío.
Vuelve a su asiento para que podamos seguir desayunando.

***

Abro la puerta de la casa encontrándome con todos los sonidos que mencioné al principio.
Todos ya se han levantado, como siempre, muy energéticos. ¿Cómo lo hacen? No lo sé.
Hago un saludo general.
Me dirigo a la cocina y me sirvo un vaso de jugo de naranja. Mientras lo tomo, observo el sofá, Luca y Sam están sentados ahí. Si tan sólo supieran lo que pasó en ese sofá horas antes nunca más tomarían asiento ahí.

Lavo el vaso que usé para luego subir a mí habitación y ponerme más cómoda.
Me saco las converse negras y las dejo a un costado de la cama.
Enciendo mi laptop para poner un poco de música cuando justo en este momento escucho el sonido de llamada de mi teléfono.

Tomo mi celular y observo su pantalla.
Número desconocido.
Raro.
Decido atender de igual manera.

-¿Hola?

No puede ser.