3 años y 5 meses después.
Tsubasa se encontraba dirigiéndose hacia un restaurant bastante afamado de Tokyo, sus amigas le dijeron que tenían que hablar de algo serio por lo que no sabía que ocurriría, aunque en el fondo le daba igual, desde hace bastante tiempo que se volvió alguien bastante gris anímicamente, pese que lo tenía todo actualmente, hace mucho que no era feliz con su trabajo, luego de estacionar el auto se dirigió a la entrada del restaurant y mostro su reservación, siendo dirigida al tercer piso del recinto, no le costó ver donde estaba sentada su amiga Anju.
-Fuiste la primera en llegar, eso es algo muy fuera de lo común- comento Tsubasa sin mucho ánimo, pese que trataba de bromear o mostrar más humor con sus queridas amigas, no le salía por mucho que lo intentaba.
-Si bueno, hoy no tuve complicaciones, ¿quieres algo para tomar mientras? Erena dijo que llegaría pronto- decía bastante relajada Anju, por lo que Tsubasa pensó que el motivo para su reunión no sería tan serio.
-Bueno, pero solo un trago, hoy no tengo ganas de despertar con resaca-.
-No sé porque presiento que vas a despertar así igualmente- Decía Anju mientras le servía del vino que tenía en la mesa, en todo este tiempo Tsubasa se ha dejado llevar muchas veces por el alcohol, de cierta manera es culpa de Anju, que la alienta siempre a tomar junto a ella, la diferencia es que la más alta es muy buena resistiendo el alcohol mientras que la más bajita no.
Siguieron platicando con normalidad un rato hasta que finalmente llego Erena.
-Perdón por el pequeño atraso- decía Erena sentándose al lado de Tsubasa- ¿le dijiste algo mientras?- le preguntaba Erena a Anju dirigiendo su vista hacia ella, a lo cual esta negó moviendo su cabeza- bien, es mejor así.
-Disculpen ¿pero de que querían hablar? Como no me han dicho nada estoy bastante perdida- preguntaba Tsubasa a sus 2 amigas.
-Aún no, mejor cenemos primero- dijo Erena viendo el menú.
-Preferiría que lo hiciéramos ahora, pero está bien- decía Tsubasa restándole importancia viendo también el menú, no sentía el ambiente pesado o incomodo, por lo que la idea de que el tema sea algo no tan importante se le asentaba más.
-¿Quieres un trago Erena?- preguntaba Anju.
-Tu deja de tratar de emborracharnos cada vez que nos vemos- le respondía Erena, pero aun así aceptando, a lo que Tsubasa esbozo una sonrisa.
-Si no fuera por ellas no sé qué sería de mí- pensaba para sus adentros la castaña de ojos verdes cerrando los ojos y manteniendo aquella sonrisa, recordando cómo sus preciadas amigas estuvieron con ella en las buenas y en las malas, Tsubasa no se dio cuenta que sus amigas se sorprendieron al verla contenta.
La velada transcurrió con facilidad, no tomaron mucho porque aún tenían que hablar, ya que es por eso que estaban reunidas ahí.
-Bueno creo que ya es momento de decirle Erena- decía Anju mirando a su compañera a lo que ella asintió con la cabeza.
-Finalmente, ¿pues de que querían hablar? ¿Es sobre el grupo o algo personal?
-Pues técnicamente ambas, aunque tiene más que ver con el grupo- respondía Erena
-¿Si? Ahora sí estoy perdida- decía Tsubasa llevando su mano a su mentón pensando en que sería.
-Tsubasa no saques conclusiones premeditadas hasta que digamos todo, lo que menos queremos es que haya malentendidos, de hecho, dependiendo de lo que digas podemos retractarnos- decía más seria Anju, de pronto la tranquilidad que tenía Tsubasa se empezaba a desmoronar de apoco.
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Las 2 caras del tiempo - La misteriosa desaparición de Honoka
Fiksi PenggemarDías después del ultimo concierto de Muse, Honoka estaba pensando en su futuro cuando se encontró con la chica que conoció en estados unidos, la charla que tuvieron cambiaría por completo su vida, años después Tsubasa se enteraría que su querida ami...