Mr. Mole:La rosa y la bestia

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Era un dia nublado,los pájaros estaban escondidos por el fuerte viento que aventaba las hojas secas del recinto,los girasoles del gran jardín estaban opacos y caídos, y un fuerte olor a humedad gobernaba las narices de todos los trabajadores de la mansión. Un joven de cabellos rubios estaba a las afueras de el, acariciando cada uno de los petalos de una moribunda flor, el se sentía como aquel, sin vida y ánimo. Dio un largo suspiro, para luego alejarse, camino con la cabeza baja, mientras los recuerdos de su pasado con el millonario volvían dentro de su mente, sus gritos y los de él, no quería volver a sentir lo mismo.
La mansion de Mr.Mole estaba en completo silencio, hasta que el sonido del trote de los caballos despertó la curiosidad del joven,quien se acerco a la reja corriendo para averiguar el origen del sonido. Y lo que vio fue un hermoso carruaje decorado con dos grandes ruedas de oro y unos caballos blancos que tiraban de él.

-Que hermoso- admiro el joven. Observó cómo aquel lujoso carruaje se detuvo enfrente de él, dejándolo paralizado, sin saber que hacer.

-Vete adentro- la voz de Norton apareció de repente asustando al más joven. Su tono era hostil y muy fria, se escuchaba como las primera vez que llegó a la mansión, por ende, sabía muy bien que no tenía que desobeceder su orden. Asintió nervioso y se retiro del lugar, apresurado los pasos y sin observar hacia atrás, como si de un soldado se tratase.

El mayor se quedó ahí observando con un rostro de no querer visitas. Las personas que estaban dentro del carruaje fueron bajadas por el cochero. Una mujer de piel blanca, cabellos rubio grisáceo y unos labios bien rojos, vestía un vestido largo del color de sus labios, ella fue la primera en bajar, para después un joven de cabellos color miel al igual que sus ojos, tenía puesto un smoking negro de alto costura.
La mujer al ver al hombre parado detrás de la reja, le tiro una pequeña sonrisa.

-¿No vas a saludar a tu madre? - preguntó, se acercó más a Norton, esperando una respuesta de parte de él, pero en vez de recibir eso, sólo recibió una mirada de desprecio.- ¿Todavía tienes resentimiento? Oh vamos, ha pasado muchos años, hasta tu padre ya murió,y todavía te comportas como un mocoso.

Norton se quedó en silencio, aun con la misma mirada del principio. La mujer se sintió un poco incomoda, hasta esquivo la mirada de su hijo, para ignorar sus pecados del pasado. El joven que la acompañaba, rompió el ambiente tenso con solo una sonrisa y una voz agradable que conquistó los corazones de los presentes.

-Nos dejarías pasar, hace mucho frio aqui-comentó, se abrazo y fingió que estaba temblando para convencer al millonario.

-Bueno... Pero después los quiero fuera de mi propiedad- dijo Norton, rendido ante el joven de cabellos miel. Su primo era una persona muy tierna, pero no tanto como su amado,como recuerda el día cuando le dijo que sí, su hermoso vestido blanco que le había comprado por muchos millones, fue un día que nunca olvidara.
La familia entró a la mansión, fueron directamente guiados hacia la chimenea, donde pudieron calentarse y descansar por un rato. Norton se alejo del grupo, para así buscar a Mike, tenía que darle una explicación a su actitud a las afueras, no quería que lo viera de nuevo como un monstruo. Abrió la puerta del comedor para retirarse, pero se detuvo al encontrarse cara a cara con su esposo, quien sostenía una copa y un vino.

-Mike ¿Que haces aquí? Si te dije que...

-Lo sé, pero pensé que un poco de vino te alegraría un poco, para así después hacer lo que te gusta- contestó el joven, levantó la copa y el vino para que el mayor las recibiera. Este se quedó admirando el cuerpo de su esposo, con sólo pensar en "hacer lo que le gusta", le comenzaba a ponerse duro su parte baja. Quería hacerlo ahora mismo, pero se olvidaba de "unos" problemas.

-Que buen sirviente, nos trajo vino- comentó la madre de Norton, sus tacos resonaron por toda la sala. De manera brusca le quito la botella al joven, empezó a leer la etiqueta buscando los años del producto.
Los ojos de Norton se convirtieron en fulminantes y una vena se dibujo en su frente, hizo rechinar sus dientes.
Mike bajo la mirada sumiso ante su amo, este al ver la reacción de su esposo intentó fingir una sonrisa para así girarse a su madre y con amabilidad decirle que se fuera a su hogar.

-¡Largo de aqui, anciana! No ves que quiero follar.

-Oye, está anciana fue quien te recibió, si no fuera por mí estarías todavía en el... -Contestó la mujer con agresividad, se detuvo en la mitad de su frase al percatarse de lo último que dijo su hijo. Con los ojos de plato, movió su mirada hacia Mike, quien escondía su sonrojo agachado su cabeza. -¿Lo vas a hacer con un plebeyo?

-Es mi esposo- contestó Norton para quitarle de las manos su botella de vino. Norton se dio vuelta para hacer una señal a su amado para que lo acompañará hacia su trono, el sofá pequeño que estaba enfrente de la chimenea.
La mujer no contestó solo se quedó observando a la pareja dirigirse hacia el sofá, Norton se sentó primero luego Mike en su regazo, puso sus brazos alrededor del cuello del mayor, y sus rostros se quedaron muy cerca, tanto que sus respiraciones se unieron. La madre iba a hablar pero la voz chillona del primo la interrumpió,dejandola con las ganas de castigar a su hijo, por juntarse con personas de "esa clase".

–Que hermoso,mi primito consiguió novio antes que yo– comentó con una gran energía y sonrisa.Corrio hacia la pareja para abrazarla pero Mike lo esquivo levantándose del regazo de su amo, era mejor hacer eso antes de recibir uno de los castigos de Mr. Mole en especial cuando se pone celoso.El joven familiar de Norton, se detuvo en medio camino confundido por la reacción del rubio. –¿Porque te corres? Si ya eres parte de la familia, no seas tímido ¿O es por otra cosa?

La voz amistosa del primo, se transformó a una espeluznante ante la pregunta final, pero volvió a la normalidad al sentir a Norton levantarse.

–Víctor, no fastidies–dijo entre regañadientes, se coloco al lado de Mike para darle un beso en su frente, aquel contacto hizo que sintiera un escalofrío en todo su cuerpo. El hombre se acercó a su oído, y en un tono suave pero terrorífico le susurro. –Bien hecho, pequeño. Al final, aprendiste, de las malas pero aprendiste.

El menor agacho su cabeza, sumiso ante Norton, aguanto las ganas de llorar y de salir corriendo. Respiro hondo y fingiendo una sonrisa le contestó a Victor.

–No,no es por nada, solo pensé que ustedes no me aceptarían por ser un plebeyo.

Víctor asintió con una encantadora sonrisa y una luz armónica, pero muy por dentro sabía que ese joven estaba mintiendo. El era experto en las mentiras, también en fingir un rostro gentil y amistoso. Ese monstruoso Norton, seguramente abusa de él o lo maltrata, el nunca cambiará, siempre será una bestia despiadada como su padre.
Solo acompañó a su tía, para cumplir su venganza, no para "ver a su primito que tanto extrañaba" como el dijo para convencer a la mujer. Cobraría todo el daño que le hizo a todas las personas que ha amado,sin importar que. Estuvo años planeando algo, tuvo la idea de matarlo con un solo disparo o  con apuñaladas, pero no sería satisfactorio para el, su muerte sería muy rápida y casi sin dolor. Al final logró la conclusión de torturar a su presa para que llegue al suicidio. Mike podría ser una gran parte para que Norton lo haga, pero no quería hacer sufrir al joven, tendrá que arreglar lo planificado, pero si no lograba encontrar algo hasta el siguiente día, será un gran adiós para Mike.