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El clima cambió repentinamente, las negras nubes opacaron el lugar y los fuertes vientos movieron las hojas de los árboles haciendo un estruendo. Norton apretaba el revolver con muchas fuerzas, mientras se movía de un lugar a otro esperando a que el sujeto dentro de la cabaña saliera. Todos los empleados hicieron presencia, hasta Víctor, pero este llevó al albino a otro lado para conversar una cosa y al regresar ya no estaba con el. Naib lo noto, por ende se escabullo entre medio para ir en busca del empleado perdido.

La puerta se abrió lentamente, la figura de Luchino apareció, tenía una posición indiferente como era de costumbre pero estaba vez estaba encorvado y con las manos escondidas en los bolsillos de sus pantalones, se veía como un maliante.

-¿Donde está? -preguntó rápidamente, Norton. El biólogo comprendió a quién se refería y miró hacia atrás suyo, donde se escondía el rubio. El millonario abrió los ojos bien grandes y su boca se formó como una "o". Iba a gritar el nombre de su pequeño, cuando, el otro hombre cerró la puerta prohibiendole a Mike que saliera. - Te metiste con la persona equivocado.

Norton recargo el arma con las cuatros balas que tenia, y le apuntó a quien creía que era su mejor amigo.

-Si vas a pelear, que sea como los hombres- se saco la bata que tenía encima mostrando la polera negra apretada que le marcaba sus pectorales. - ¿O no quieres pasar vergüenza enfrente de tus empleados?

-No te tengo miedo- contestó, Norton. Arrojó la pistola lo más lejos posible para demostrar lo capaz que era. Se subió las mangas de su camisa y se puso en posición de combate.- ¡Ven, maldita perra! Te haré trizas por la traicion que me hiciste.

-¿traicion? Ja... Lo único que hice era liberar del sufrimiento a Mike, porque lo único que hacía en ese lugar era sufrir torturas y malos tratos por tu parte.

Tras lo dicho, el hombre millonario, enfurecido, se lanzó encima del biólogo, dando los primeros golpes mientras que el otro se intentó proteger. La sangre y los golpes llovía entre los dos, escupian insultos entre medio de la pelea,moretones brotaban como flores en primavera y también los rasguños empezaron a aparecer en la piel de ambos luchadores. Williams abrazo a la ama de llaves, quien lloraba desconsoladamente al ver como Luchino era derrotado por su jefe.
Al final , el biólogo, cayó derrotado en el pasto de su jardín. El ganador lo observó por un rato, y luego, le escupió en su rostro.

-Mike es mio y no es de nadie más, el no tiene permitido amar a otra persona que no se yo...

Unos sarcástico aplausos interrumpieron el discurso del millonario, todos se giraron hacia la persona que hacía ese ruido. Y lo que vio Norton no lo podía creer, era su primo con una sonrisa maléfica, las pupilas de sus ojos estaban grandes y su rostro era opacado por una sombra.

-Maldito, desgraciado- habló, Luchino, con una voz débil. Tenía todo el rostro destrozado por los nudillos del millonario, y su nariz estaba rota. - Dijiste que tu plan no me iba a dañar.

-¿Dije eso?- sé burló, Víctor. - Solo dije que "esperes tu momento".

-Maldito, traidor- gruñó el millonario. Corrió en dirección a su revolver para recogerlo, pero el rubio la agarro primero. Aún así, Norton intento quitársela, hubo una pelea por quien obtendría el arma. Hasta que Norton se la arrebato y no dudo en dispararle.el rubio se toco la parte donde le había llegado la bala, y se vio su mano que estaba ensuciado por un líquido carmesí.

-¡¡Víctor!! -grito, Luchino. Atacó por las espaldas al millonario, lo abrazo por detrás bien fuerte para que soltara el arma lo que logró, pero al instante el hombre se zafó del agarre e intentó recoger nuevamente el arma. Luchino le agarro un brazo para detenerlo y lo tiro hacia un lado. Los golpes volvieron a aparecer entre Norton y el biólogo, mientras que el rubio cayó al suelo, apretó con fuerza su herida para detener un poco el sangrado.
El hombre alto no pudo más, y fue derrotado nuevamente por la gran superioridad de fuerza que tenía el millonario, este último mencionado se quedó parado observando el cuerpo de su enemigo derrotado en el piso, su respiración era agitada y el sudor le recorría por todo su rostro. Lanzó un rugido victorioso al aire, como si fuera un león que había derrotado a otro por el control de la manada.
De repente, se escucho un disparo, los empleados presente se taparon los oídos por el fuerte sonido que había provocado el revolver de su jefe. Norton se dio media vuelta mientras se tocaba la parte afectada por la bala, fue directo debajo de su espalda, sus ojos vislumbraron a la figura de su amado sosteniendo el arma. Mike tenía el revolver, sus ojos estaban llenos de lágrimas y su cuerpo temblaba al sentir desobediencia ante su amo.

-Pensé que me amabas...

-Nunca te ame- fue lo último que dijo, para apretar el gatillo dos veces. Una bala fue directa al hombro izquierdo del mayor y la otra se incustro en su congelado corazón. El momento fue en cámara lenta para el joven, ver como la bestia se derrumbaba enfrente de sus ojos y como los demás abrían sus bocas sorprendidos por la valentía del rubio, no podian creer que el se había enfrentado a su gran terror.
Cuando el cuerpo de Norton no se movió más, Luchino se levantó como pudo, para quitarle el revolver a Mike, quien temblaba y tenía sus ojos puestos en el muerto. Martha corrió para abrazar al joven, acarició sus cabellos mientras lo consolaba con sus bellas palabras, el moreno se los unió y le dijo a Mike una frase que nunca olvidara "fuiste más valiente que nosotros".
Por otro lado, Andrew despertó de su sueño,el rubio le había tirado un polvo que lo dejó desmayado a un lado de la calle. Naib encontró su cuerpo y lentamente lo despertó, no comprendía las razones del porque el primo de su jefe había dejado al jardinero durmiendo dejándolo fuera de la situación.
El albino, se desespero al no ver el rostro de su sol, se levantó apresuradamente ignorando los mareos y nauseos que le causó eso, y se dirigió hacia donde se encontraba la escena. Naib lo siguió desde lejos y al ver los cuerpos, se acercó a los de su grupo. William, le explicó todo lo que había sucedido, el jardinero escuchaba desde lejos los detalles, pero lo dejó de oír al ver la silueta de Víctor.
Ahí es cuando, Andrew vio algo que no olvidara en toda su vida, su pequeño sol estaba tirado en el piso cubierto de sangre. Rápidamente, se agachó y le tomó el pulso, espero y espero,con la esperanza de encontrar un símbolo de vida, pero nada. Sus lágrimas recorrieron por sus mejillas y comprendió las razones por la que lo dejó durmiendo en la calle, se había sacrificado para que Mike y el no murieran. Tomó el cuerpo con delicadeza y empezo a apreciar la belleza de su querido amor, su garganta se apretó demasiado y su cuerpo no le respondía a su mente. Se sentía ahogado en la pena e inútil por no haber podido salvar a su sol.

"como voy a extrañar a mi luna"

El día en donde murio Wick era una Navidad cualquiera, padre e hijo llegaron para cenar con la familia Campbell. Víctor había llevado a su perro Wick,quien fue un regalo de Joseph en su cumpleaños, aquella criatura de ojos saltones y colmillos que sobresalían en su boca era muy cariñoso con toda la familia excepto con Norton. Este le ladraba al sentir su olor o presencia, el rubio no comprendía las razones del porque hacía eso hasta que llegó esa noche. Había escuchado unos gritos extraños y Wick se levantó al instante en busca de la persona que hacía esos estruendos. Confundido el joven lo persiguió, pero en medio camino había perdido el rastro del animal. Continuó su búsqueda por toda la mansión, fue por cada habitación, aún así no encontró ningún símbolo de su mascota. Siguió su recorrido hasta el jardín trasero, donde escucho pequeños aullidos de dolor que provenía en una esquina del lugar. Corrió y se encontró con la imagen que le cambió su vida, gracias a ella conoció una parte de él que se escondía entre las sombras de su corazón.
El niño Norton se encontraba parado con sólo calzoncillos, cubierto de moretones, sus ojos estaban llenos de lágrimas y tenía el ceño fruncido mientras observaba al triste animal ahogándose en su propia sangre. Y como su madre, se excuso de forma incoherente para la situación que tenía enfrente:

-Lo siento, tenía mucho furia recargada por mi padre. Tranquilo, mamá te comprara otro.

"Te odio, los odio, odio a todo el mundo, hasta me odio a mi mismo por haber nacido" esas palabras se repetían constantemente en su cabeza y se las decía a su padre, pero este siempre le contestaba que no se sintiera así, pero el amor de Joseph no era suficiente para todo el odio que tenía en contra la familia Campbell.

–Padre, me hubieras desecho como Mary dijo, tirandome a un pozo.

–Lo que le hizo tu tía a tu madre no tiene perdón–respondió, Joseph. Acarició el rostro de su querido hijo y lo acercó para que lo viera a los ojos.–No viviré por tanto tiempo, hijo mío. Quiero que me hagas un último favor, acaba con la vida de todos los Campbell, quiero ver desde el cielo sufrir a esa asquerosa familia en el infierno.

Mr. Mole:La rosa y la bestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora