Mr. Mole:La rosa y la bestia

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Era algo extraño, sentir como su cuerpo se estremecía por el suave contacto del mayor. No quería, pero era su obligación, consentir los deseos de su amo Norton. En la habitación desordenada del mencionado, estaba siendo nublado por el calor que salían de los cuerpos, los cristales del único lugar donde entraba la luz del sol fue empañar y en el lugar hubo una sonata de gemidos de parte del más menor de los dos.
Norton no pudo resistir más y se corrió dentro de Mike, quien al sentir el líquido dentro de él soltó un ahogado grito. Cuando el millonario salió de dentro de él, se quedó admirando la pieza de arte que tenía enfrente suya, pero al ver las cicatrices en su rostro, creadas por el mismo, un sentimiento de culpa y pena gobernó su corazón oscuro. Las acaricio una por una, con delicadeza y lentitud, aquello hizo que el menor se sobresaltara.

-No te asustes,mi pequeño- lo tranquilizó, el millonario, con una voz más melancólica. Se acercó al menor, para darle un beso, pero este lo esquivo,grave error de parte de Mike. -¿En serio? ¿Me quieres tratar de esa manera? ¿Que debo hacer para que me ames?...

-Matame y seré por fin feliz- contestó rápidamente, Mike. Quién escondió su rostro en la almohada para empezar a llorar de forma desgarradora.
La respuesta dejó atónito al mayor, se quedó por un buen rato observando al joven llorar debajo de él. No pudo soportarlo más y se levantó de la cama, se puso sus pantalones que estaba tirado y se retiro del lugar con su camisa en mano. Dio un fuerte portazo, que atemorizo a Mike.

El joven se quedó en silencio, acurrucado en la cama, mientras intentaba quitar los recuerdos sucios de hace un rato. Estuvo como media hora acariciando su cuerpo, hasta que sintió como alguien daba pequeños golpes en la puerta.

–¿Puedo entrar, Mike? – La voz de Martha apareció detrás de la puerta, el joven sin pensarlo dos veces se levantó de la cama y fue corriendo a abrir la puerta.
Cuando ambas miradas llenas de pena  se unieron, Mike no pudo resistir llorar y abrazar a la mujer. Tenía mucha confianza en ella, era su única amiga y compañera. Martha siempre estaba ahí cuando él necesitaba un poco de cariño, sin embargo, no estaba cuando Mr. Mole abusaba de él. Aún así, la comprendía, el miedo hacia Norton es más grande que el amor y la confianza entre ambos, o eso creía el.

En el otro lado de la mansión, Luchino se encontraba con sus "aliados", escondidos detrás del limonero. Víctor estaba acostado en el suave pasto con la cabeza apoyada en las piernas de Andrew, quien acariciaba el sedoso cabello de su sol.

-Y... ¿Como haremos que Mike confíe en...? -comenzó a hablar, Luchino. Pero, fue interrumpido por Víctor, quien lo callo de inmediato.

-Luchino, solo debes esperar a que tu momento llegue nada más -Contestó el rubio con un tono de voz tranquila, ya que las suaves acaricias del albino lo estaba hipnotizado. Nunca en la vida, un "perro" suyo, lo había consentido como Andrew lo hace. Si el albino lograse hacer todo lo que le pide y que no, para completar su plan, se excitaria, no tanto como con Luchino, pero sería una noche muy caliente para su títere favorito.

-Es la primera vez que te veo tan enamorado-comentó, Luchino. Soltó una pequeña risa, al ver cómo el rubio frunció el ceño como respuesta a ese comentario que para el era desagradable. Nunca en la vida se enamoraría de un "títere", sabía que algún día cuando se aburra del albino lo mataría como los otros. - Andrew te consiente mucho, no crees que está llegando a tu corazón.

Andrew al escuchar las palabras del biólogo, una gigante sonrisa se dibujo en su rostro y sus ojos comenzaron a brillar la esperanza que sobresalía de su corazón. Victor giro su vista hacia el, y al ver la felicidad de este solto una sonrisa y luego susurro la palabra "idiota".

-¡¡Víctor!!-una voz femenina irrumpió en el momento pacifico entre los tres hombres,quienes giraron al mismo tiempo sus miradas hacia el grito de la mujer. Víctor supo de inmediato de quien era y empezó a actuar. Se levantó y con una mascara de un rostro asustado se acercó a Mary, quien le dio una abofetada.-el idiota de mi hijo es maricon, y tu le copias.

-Tía Mary, deje que le explique....

-Y no puede ser que tu Luchino... -gruñó la mujer dirigiéndose hacia el biólogo que la observó con una ceja levantada y una mirada fría.-.... Aceptes que Víctor este haciendo cochinadas con ese jardinero sucio y repugnante enfrente tuyo.

Luchino, no contestó, solo permaneció callado e indiferente. Además, estaba atento ante la reacción de Andrew quien se levantó enfurecido y apretando con mucha fuerza su puño. Ahí supo cual era el siguiente paso del plan del rubio.
La mujer, de manera brusca, se dio media vuelta y resonando sus tacones, se acercó al albino y le dio una golpiza que dejó al jardinero con el labio sangrando. En ese momento, en el rostro de Víctor apareció una sonrisa maléfica, que dejó perplejo al biólogo.

-Mi pequeño Víctor no quiero que arruine su vida con un sujeto como tú...

-¿Como yo que? ¿Pobre? ¿Asqueroso?

-Como una rata de alcantarilla en busca de un queso Pule-contestó la mujer en forma de burla, eso enfureció aún más al jardinero quien sin pensarlo más se tiro encima de la mujer, como era más fuerte que ella, ambos cayeron en el pasto. Con ambas manos, apretó con mucha fuerza el cuello de la mujer, quien poco a poco comenzó a perder oxígeno.
Luchino no reacciono, sólo quedó pasmado ante la reacción violento del empleado, mientras que Víctor reía a carcajada.Mary lucho para sobrevivir, intentó rasguñar los brazos musculosos del hombre para poder zafarse del agarre, hasta intentó gritar para que algún empleado o su propio hijo la oyera, pero no lo logró.Resistió y resistió por un buen rato.
Cuando la mujer no se movió más y su tono de piel se volvió de un tono morado, el albino quito sus manos de ella y observó lo que había hecho. Se asustó y entró en pánico, empezó a temblar y a llorar, mientras le pedía perdón a Dios. Pero el suave contacto de Víctor, lo tranquilizó, sus manos pasearon por toda su espalda. Se acercó a la oreja del albino para resitar algunas palabras.

-Bien hecho, mi luna-dijo con una voz lasciva y susurrante. Víctor estaba muy caliente, lo que había visto, nunca en su vida, un "perro suyo" lo había hecho. Saboreo la victoria, estaba tan cerca y a la vez tan lejos a la venganza hacia Norton.- Ahora tienes que hacer que esto parezca un suicidio ¿Lo puedes hacer por mi?

-Si, mi sol-contesto Andrew de forma automatica, como si fuera un robot recibiendo órdenes.

Andrew se puso a trabajar, escondió el cuerpo debajo de la tierra y se fue en busca de una cuerda para colgar el cuerpo en el limonero. Víctor lo observaba admirando cada movimiento del hombre, se estaba excitando al ver como el sudor de este recorría por todo sus formados músculos de los brazos, aquellos que mataron a la pequeña bruja de su Tía. Cuando Andrew puso la soga alrededor del cuello de la mujer y la elevó para después, con ayuda de Luchino, amarró  perfectamente la cuerda en una gruesa rama del arbol. Era increíble observar como sus dos hombres trabajaban en conjunto para satisfacer sus deseos, pero por una extraña razón, su corazón comenzó a palpitar como loco cuando Andrew le tiro una sonrisa al terminar con la misión.

–¿Luchino, no te pareció increíble como Andrew la ahorcó?–El nombrado giro un poco su mirada por un momento, aquella era indiferente y sin brillo. Víctor seguía observando como el cuerpo moribundo de la mujer se balanceaba lentamente.

–Me da igual, nunca me agrado Mary– dijo Luchino,con frialdad. – Espero que esto aporte en tu asqueroso plan.

–Te lo prometo, si funcionará.

Hola, como van con su cuarentena?

Lo siento por el capitulo corto, pero era necesario para dejar con la intriga.
Muchas gracias a todos los que apoyan a esta historia 😍❤️

Bye bye