Mr. Mole:La rosa y la bestia

9

El sol iluminó los oscuros rincones de la mansión, dando el inicio de un nuevo día. Luchino se había quedado a dormir en este recinto, no pudo descansar bien al sentir los fuertes estruendos de la "habitación del horror", se levantó varias veces a beber agua o simplemente a fumar un poco del tabaco que le había regalo su padre para su cumpleaños. Pero, aún así, los llantos de Mike aparecían constantemente en sus sueños. Solo deseo que todo esto de matar a Mary y de ayudar a un sociopata no sea en vano.
Se vistió con su típico suéter de color anaranjado y sus pantalones negros, esta vez no utilizaría su típica bata blanca, ya que quería verse cómodo y poder descansar de su trabajo. Después de vestirse, salió de su habitación encontrándose con la jardinera Emma cambiando las rosas de los flores que estaban esparcidos en el pasillo, ella le dio los buenos días y continuó con su trabajo.
Bajo las escaleras apresurado, sabía muy bien que Mike se encontraría en la cocina, ya que según Martha este le encantaba ayudarla todas las mañanas con la comida y a Norton no le molestaba, quien no quería saborear los deliciosos platos de su amado niño. Cuando llegó al lugar, sus fosas nasales fueron inundadas por el olor a pan recién horneado, su estómago grito por una deliciosa rebanada.

-Buenos días, Luchino-La voz de Mike se hizo presente, esta era de un tono feliz, eso era muy extraños para el Biólogo.

-¿Como estás tan feliz? -preguntó angustiado, Luchino. El joven lo miro extrañado por la pregunta, esa mirada le indica al biólogo algo, le estaba afectando la mente al estar aquí.- ¿Tu no eras quien estaba llorando anoche?

-No... Era Norton, se había tomado unas copas y eso le causó mucho depresión, recordar su pasado-respondió, Mike. Le pareció muy extraño, Luchino, ver cómo ese joven contestó la pregunta tranquilamente cómo si fuera algo cotidiano.- Se lo que estas pensando, que no es normal que vea como algo cotidiano el alcoholismo de Norton. Mientras estes viviendo en esta mansión, el "ebrio Norton" te parecerá normal comparado con todo lo que pasó en este lugar.

El ambiente se volvió muy pesado, la empleada Martha y Naib se quedaron pasmados por las palabras del joven. Nunca en la vida lo habían visto hablar tan seriamente, siempre se quedaba callado cuando pedían una opinión acerca de este tema.
Luchino hizo una tos falsa para calmar un poco el ambiente, cuando logró que todos se girarán hacia el, este se acarició la barriga y con gentileza les pidió a los empleados una rebana de pan con mermelada.
Mike se dirigio a recoger la bandeja de Norton, solo espero que el millonario no estuviera con mal humor hoy día. La última vez que estuvo ebrio, despertó la mañana siguiente golpeando al menor como si fuera su culpa que sea borracho.

Víctor seguía dormido entre los brazos de Andrew, se había olvidado completamente de la mansión y de su venganza, hasta que entre sus sueños se le vino una imagen que le causó las ganas de matar a su tía.

Era un dia normal, el joven de ojos color miel había tenido una pesadilla. Por ende, como era de costumbre, se fue corriendo a la habitación de su padre. Cuando llegó a la habitación escucho las voces de su madre y la tía Mary detrás de la puerta, estas discutían por su padre. Su madre era una criada de la mansión, un día tuvo relaciones con él joven Desaulnier y quedó embarazada. Las voces comenzaron a aumentar el tono, hasta que llegó al sonido de un disparo. El joven se tapó los oídos al escuchar el estruendo, lágrimas recorrieron sus mejillas.
Se quedó acurrucado al lado de la puerta llorando, la mujer salió de la habitación y se encontró cara a cara con el joven. Esperaba un perdón o por lo menos que le explicara las razones del por qué hizo eso. Pero, lo único que obtuvo fue un:
"Ella no era de lo nuestros, sólo fue un gran error de tu padre. Agradece que sacaste nuestros genes, o sino ya te hubiéramos tirado a un pozo"

Desde ese día, juro venganza por su amada madre. Aquel suceso ocurrió antes de la muerte de Wick, ese cariñoso canino le había dado días de alegría y pudo olvidar la muerte de su madre. Pero, esa desgraciada familia, no tuvo le necesario con quitarle a su amada madre, tuvieron que quitarle su única esperanza y amor. Con sólo imaginar al cachorro en el piso con un charco de sangre y ese maldito de Norton con una roca en su mano, un sentimiento de furia gobernaba en su interior. En su lista negra tenía a toda la familia Campbell, juro por años venganza, pudo matar al Señor Campbell con una almohada y también logró que su Tía muriera ahorcada por Andrew, solo faltaba al más malvado de todos, Norton.