Devil In Disguise

Crushing

Ahora que no estoy drogado, asqueado y lleno de comida, me puedo enfocar en la otra cosa que pasó ayer, cuando Agatha me tomó en su boca. Es solo la segunda vez en toda mi vida que dejo que alguien me de una mamada y ni siquiera pude terminar.

Deslizo mi mano dentro de mis pantalones de pijama y me toco despreocupadamente mientras Agatha sigue escribiendo y escribiendo tonterías.

"Te vi en YouTube hace rato. Hay muchas entrevistas tuyas... aunque solo hablas de cosas aburridas."

"Soy muy interesante, no es mi culpa que tú no entiendas de lo que hablo." Contesto, sin preocuparme en bajar mi celular porque sé que ella seguirá escribiendo inmediatamente.

"A nadie le importa, solo quieren ver tu bonita cara. Eres hermoso cuando mientes."

Eso me hace reír de nuevo. Me imagino que en este momento, si fuera una situación normal, yo debería contestar que ella también es hermosa o algo por el estilo, pero no tengo que hacerlo porque: 1- esta no es una situación normal, y 2- incluso si lo fuera, no sabría cómo proceder.

Así que solo pongo: "Gracias." Y espero que no quiera seguir hablando conmigo.

Agatha

—¿Qué haces? —pregunta mi hermano, llegándome por atrás de repente, asustándome y haciéndome esconder mi celular como si estuviera haciendo algo malo. Hablar con mi humano demoniaco no es nada malo, así que me obligo a dejar de esconder la pantalla y dejar que mi hermano vea mi conversación, como el hombre entrometido que es. Me quedo en silencio mientras lee y luego mientras me mira con ojos entrecerrados— hmmm, interesante.

—¿Qué? ¿Qué es interesante, lo metiche que eres? Sí, bastante.

—Es interesante que en cualquier momento Yzhabat podría hartarse de estar aburrido sin un alma propia que atormentar y podría regresar por ti, pero aquí estás muy tranquila, hablando con tu humano. Pero la parte más interesante de todo esto es que te está ignorando totalmente, Agatha —dice, terminando con una risa burlona que intenta esconder pero veo de todos modos. Alejo el celular de él y le doy una mirada de advertencia, haciendo uso de mi piel real para intimidarlo— no te enojes conmigo por ser honesto.

—No eres honesto, eres molesto —me quejo— no conoces a Nikolai como yo. Es un milagro que no esté llena de gente intentando matarme en este momento y que él me esté contestando. Tal vez es cortante conmigo, pero me está contestando de todos modos y eso es algo bueno. Creo que le gusto.

—Aja, claaaro. Parece que te está ignorando, pero cosas más raras han sido posibles así que supongo que tienes razón —dice, sonando como si estuviera tratando de calmar a un niño— es lindo que te guste alguien y todo eso, pero encuentra a otro humano del cual enamorarte y enfócate en sacrificar a este ¿sí? No tenemos mucho tiempo.

—No me gusta, déjame en paz —gimo, harta de su existencia. Me levanto del sillón para ir a mi habitación donde pueda tener más privacidad para hablar con Niko. Antes de irme por completo, necesito dejar algo en claro— lo único que quiero hacer con él es sacrificar su alma para que sufra por siempre. Además, deja de tratarme como una niña. Pasé cientos de años en este mundo antes de morir, igual que tú.

—Este mundo es muy diferente a lo que tú conocías. Tú eres un bebé recién nacido, Agatha —se ríe una vez más, dejándose caer en el sillón para ver la televisión— tienes mucho que aprender aún, así que ve a tu habitación a seguir hablando con él. Anda, ve.

—Ugh —suelto, sin querer seguir hablando, y me largo.

Belzat es un punzante grano en el culo, justo como un hermano humano lo sería. Y yo no quiero un hermano humano, quiero un hermano normal que solo se preocupe por pecar y divertirse.