Carta 2

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Londres, 25 de enero del año 2000


Querido Charlie:

He leído tu carta apenas la lechuza la dejó sobre mi escritorio, debiste avisar que picotea, casi me ha dejado sin un dedo.

Vaya, no creí que me escribieras tan pronto. Daphne ha sido una buena amiga mía, es claro que sabes que te echó el ojo desde el torneo de los tres magos, pero ya mucho antes estuvo recibiendo clases de Cuidado de Criaturas Mágicas, por lo que no sorprendió a nadie su decisión de convertirse en Dragonolista, solo a su hermano mellizo; Draco Malfoy, que sin duda puso el grito en el cielo al saber que iría a Rumanía.

Por lo que me has escrito, concluyo que te sientes atraído por ella, creo que deberías ir con calma, no te vayas por lo físico que en Rumanía no hay pociones anticonceptivas y tú no quieres dejar a Norberta por Daphne ¿o sí? Mi consejo es este: Conócela más, entérate cosas sobre ella, cosas simples como su color favorito o sobre cómo se le ocurrió la idea del salón de belleza. Sé más social con preguntas simples y deja esa fachada de chico malo, que ambos sabemos que eres muy tímido para entablar una conversación con las mujeres. Si para hablarme tuviste que estar borracho en el matrimonio de Bill y eso que tuve que llevarte a vomitar a un retrete.

¿Qué te vas a convertir en un asaltacunas como Remus Lupin? Ta lvez. Mi ex profesor le lleva 13 años a Tonks y ahora tienen un hermoso bebé de dos años, deberías tomar vacaciones para conocer al pequeño Teddy, es todo un amor y yo soy su madrina, por supuesto que Harry es el padrino, le arrebató el lugar a su papá. Debiste ver la cara del señor James cuando ocurrió.

¿Cómo me va? Pues hasta la mier... Draco Malfoy, está más exigente cada día. En un solo día me ha preguntado mil veces si he terminado mi parte del informe que nos ha asignado Kingsley, pero no pregunta por mí, me ve como un hombre más. Y no, no me he vestido como uno, uso las faldas, blusas y tacones que me recomendaste, hasta algo de maquillaje, sin embargo, no me nota.

Lo he invitado a salir, mas me rechaza con la excusa de que hay trabajo que hacer y cuando por fin me acepta la invitación, Kingsley nos da más trabajo. Odio mi situación, a este paso tendré que tatuarme en la frente que me gusta, porque por muchas señales que le envío no se da por enterado o me ignora intencionalmente. No tengo idea de cómo conquistarlo, por lo general es a mí a quien intentan enamorar.

Si tienes algún consejo no dudes en escribirme pronto.


Te envía un zape, tu mejor amiga 😉. 

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Cómo conquistar a tu dragón © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora