The devil ~Taekook~

Final

Fuimos al cementerio a visitar a Jimin, te lo pedí y tú aceptaste, solo fuimos los dos, sin choferes y guardaespaldas.

─¿Por qué querías venir cariño?─ preguntaste mientras caminabamos hacia la lápida de Park
─Necesito dejarlo ir─ respondí
─Entiendo, ¿quieres que te acompañe o me quedo aquí?─ interrogaste
─Ven conmigo─ sonrei.

Al llegar al lugar, coloqué el ramo de flores que habia llevado. Me arrodille y toqué lentamente el nombre escrito en la lápida, el cual estaba acompañado por una frase; "el mundo es mucho más hermoso cuando tú sonríes, y la vida deja de doler un momento cuando miro tus ojos.".

─Hola pequeño─ dije─ vine a visitarte, sé que no vengo hace bastante, pero es que no tenia el valor suficiente para hacerlo. No tenia las suficientes agallas para venir a visitarte a un cementerio siendo consciente que la última vez que te vi estabas con vida─ las lágrimas ya estaban cayendo─ sé que te lastime, y te encuentras aquí por mi culpa. Estás muerto porque no pude darte el amor que merecias, me conociste en un mal momento de mi vida pequeño. Te rompí y tú nunca debiste de haber estado roto, no merecías eso, no merecias terminar así.
Lo siento mucho cariño y por eso estoy aquí, para decirte que te amé demasiado, pero no de la manera en la que querías, no así porque mi corazón le pertenecía a alguien más─ te miré, y tus ojos brillaban debido a las lágrimas acumuladas─ pero sin embargo me amaste y moriste por amor.
Te extraño y algunos días el sentimiento de no tenerte es mucho. Por eso hoy te dejo ir, te desencadeno de este mundo, porque no te merece, eres demasiado para él y eres demasiado para mí, Taehyung también lo es ¿sabes?, no quiero quedarme en este triángulo amoroso con un lado muerto, quiero poder hacer feliz a Tae.
Mi ser de luz, te fuiste y te llevaste una parte de mí, pero una parte de ti se quedó conmigo. Ojalá en otra vida pueda encontrarte, y ninguno de los dos termine herido. Gracias, porque me amaste incondicionalmente.
Y si, el mundo era mucho más lindo cuando tú sonreias─ me puse de pie y te miré, te acercaste a mí y me abrazaste. Mirabas la lápida y las lágrimas corrian por tus mejillas, pero dejaste de abrazarme y te pusiste de cuclillas frente a la tumba.
─Park Jimin─ dijiste─ no pude conocerte y solo pude verte unas pocas veces. Pero gracias niño, gracias por amar a Jungkook y gracias por cuidarlo, gracias por estar para él. Sé que tal vez no me quieras demasiado y lo siento, lo siento porque tu corazón pertenecía a Jungkook pero el de él pertenecia a alguien más, lo siento demasiado, porque nadie merece terminar así.
Pero puedes marcharte tranquilo, cuidaré de Jungkookie de la misma forma en la que tú lo hacias y lo voy a amar con cuerpo y alma, tal vez no tanto como tú lo amaste pero lo amaré hasta con la última gota de amor que hay en mí. Estoy siendo amado por la persona que tú más amaste y lo siento por eso, porque tal vez tú tenias mucho más que ofrecer.
Niño, gracias por todo y de todo corazón lo siento por haberte arrebatado una parte de tu vida. Pero puedes volar alto hasta que sea tu momento de reencarnar y te prometo que en nuestra próxima vida tu historia de amor con Jungkook va a terminar bien, pero en esta, déjame amarlo hasta el final de mis días, dejame hacerlo mio, dejame entregarle todo el amor que él merece. Hasta siempre pequeño─ te secaste las lágrimas y te pusiste de pie, me abrazaste y comenzamos a alejarnos lentamente.
─¿Ya está?─ preguntaste
─Si amor, ya está─ respondí, me tomaste de la mano y comenzamos nuestro camino de regreso, con la mente un poquito más tranquila y el corazón menos herido.

Subimos al auto, y antes de poner el motor en marcha te besé, te besé por todos los años en los que no pude hacerlo.
─Te amo Jungkook, y el mundo también es demasiado hermoso cuando tú sonríes─ me dijiste.
Tu sonrisa me hizo saber que todo estaba bien, y que siempre iba a estar bien si te tenia a mi lado, entendí que solo necesito de tu amor porque me enseñaste a brillar en la oscuridad.
Y entendí que a veces el probar del fruto prohibido no es una mala idea y menos si se trata de ti. Entendí que amarte es el paraíso más placentero aunque estemos ardiendo en el infierno.

No todas las historias de amor terminan con ambas partes vivas, pero la nuestra si, no morimos en el intento de amarnos. Olia a incesto, pero también a amor. Olia a tú y yo.

             

                         Fin.