Psicópata || h.s

25.

Cálculo que quizá había pasado menos de 20 minutos antes de que comenzara a caminar lentamente hacia donde recordaba que se encontraba el coche. Tenía miedo. Como sí cara paso que daba determinaba lo que iba a suceder a partir de ahora, ¿que haría? ¿Qué haría con su puta vida? De nuevo se repetía la historia aunque no estaba totalmente segura de ello. Se relajó un poco para que Dallas no la viera en ese estado y no se preocupara, vio el auto aún aparcado a unos cuantos metros más. Suspiro. «bien.» pensó ella, desde ahí comenzaba lo que daba paso a sus decisiones, subió al asiento del copiloto y le sonrió a Dallas quien ya se encontraba dormido en el asiento de atrás, no miro a Harry en todo el trayecto, el silencio los consumía pero no hacían nada por romperlo, al llegar, Harry cargo a Dallas en brazos dormido.
Sarah se desvistió rápido y se cambió a su grande ropa de dormir, entro en la cama y cerró los ojos, se había adueñado de la cama a propósito, escucho unos pasos acercarse y se hizo la dormida, un suspiro se escucho y después la puerta de la habitación cerrarse.

Sus ojos se inundaron de lágrimas y sentía como si unas llamas ardieran en su pecho consumiendo cada parte de ella , se imagino una vida tranquila como siempre se la imagino de joven, con hijos y un esposo a su lado, felices, sin ningún problema. Claro, eso no existía. No para ella.

Las semanas pasaban, las cosas en lugar de ir hacia delante iban todo lo contrario, Dallas comenzaba a sospechar , la tensión se respiraba sólo de entrar a ese lugar, Sarah que se encontraba picando unas verduras exploto en llanto y sollozos, no aguantaba más vivir así, sólo lo seguía haciendo por su pequeño Dallas y su nuevo pequeño bebé que yacía aún en su vientre, el no tendría la culpa de nada, claro que no, eso estaba claro. Escucho el sonido de muchas cosas moverse y después como si alguien arrastrara algo de ruedas por el pasillo, su instinto fue salir y ver lo que sucedía, claro, se estaba yendo y ella no podía o iba a hacer nada por detenerlo, claro que le dolía pero las cosas ya no eran iguales a como antes y prefería que partiera antes de que fuera peor, para todos.
Harry la miro sin expresión alguna y finalmente hablo.

»ambos sabemos muy bien que las cosas no pueden seguir así, tome la decisión mientras te escuchaba sollozar hace unos días fingiendo estar dormido en la habitación, joder esto si que ha sido un sufrimiento, tanto como para mi, Dallas y principalmente tu, yo siempre supe que tu necesitabas algo mejor que tu pero era lo bastante egoísta para dejarte ir.

Comenzaba a mostrase vulnerable pero siguió.

»el bebé te prometo que estará bien , escucha Sarah, es una promesa, no tienes nada de que preocuparte, el siempre estará bien, también Dallas y por su puesto tu, aunque yo ya no este moveré cielo, mar y tierra para que a ustedes no les falté nada. Es una promesa.

Se acercó un poco a ella que ya tenía sus ojos inundados de lágrimas pero no decía nada y sólo asentía, le levantó del mentón y junto sus labios con los de ella, que rápidamente aceptaron y correspondieron el beso, segundos después se alejó, comenzaban a asomarse pequeñas gotas en los ojos. La miro por última vez totalmente a su merced, su vientre voluminoso e hinchado y totalmente desalineada como se había enamorado más de ella, sus mejillas enrojecidas y los labios completamente rojos e hinchados.

- antes de que marches - dijo ella muy a duras buscando las palabras - ¿ya te despediste de Dallas? - dijo ella con dolor.

- le dije que voy a un viaje largó, que volvería el día en el que su hermanito naciera- dijo el también con dolor.

- ¿que respondió?

- que le prometiera regresar.

Ella no intentó preguntar más, con la mirada le dijo todo. Que marchará de una vez.