Fortaleza a la desesperada

Morir por ti

Narra Ishimaru

Salí poco desde de la habitación donde deje a Kuro para que durmiera. Esta vez quería ser yo el que vigilara por él ya que casi siempre lo hacía.

Ese casi siempre es por qué hubo momentos en las cuales que no dormíamos o si él dormía antes que yo pero sería por muy poco tiempo.

Oh, Ishimaru. -Era Akiyama quien me hablaba.

Hola Akiyama, veo que Himura sigue muy dormido -Se la dije ya que ella lo estaba observando.

- Si... en estos días ha sido un fuerte shock para él por el tema de no poder salvar a mucha gente...

- Entiendo su frustración, yo... yo tampoco he podido salvar a las personas...

- Lo importante es que seguimos aquí.

Si... - Solté un fuerte suspiro- Por cierto Akiyama, ¿está aun mi padre en esa puerta?

Si, y además me pidió que echase un vistazo a los demás aunque no te nombró. Me imagino que es porqué ya lo habéis hablado.

De acuerdo, ya nos veremos. -Hice una pequeña reverencia-.

- Claro, luego nos vemos.

Me fui luego de escuchar su despedida para ir a donde se encontraba mi padre. Él rápidamente me miró.

¿Te cuesta dormir, hijo? -Me preguntó preocupado.

No es eso, es solo que le dije a Hayate que esta vez me encargaría yo de vigilar desde la habitación. -Le expliqué.

Ya veo -Mi padre miró hacia la puerta de la entrada y salida- Deberías volver a la habitación.

- Volveré luego de estar un poco contigo, papá.

- Te aconsejaría que lo hagas ahora ya que... no sé si lo sabes lo que te voy a comentar.

- Saber el qué.

Sobre Kuro -Me quedé confundido ya que desconocía lo que me querría decir sobre él - Veras, cada vez que veía a Kuro dormir él... él empezaba a temblar y a murmurar.

¿Eh?... -Me quedé de piedra ante esa información.

-Veo que en verdad desconocías ese dato, Kiyotaka.

- Si, pero... ahora entiendo muchas cosas. Ahora sé por qué casi siempre me decía que fuese el primero en dormir...

- Seguramente era por qué no te quería preocupar. Recuerda que él también sufrió la pérdida del que era tu pareja.

Desvié mi mirada al acordarme de él.

Es cierto que es un dolor que Kuro y yo compartimos.

Voy a ir a ver cómo está -Le dije ya preocupado por Kuro- Ten mucho cuidado, papa.

Lo tendré hijo -Me lo dijo con una ligera sonrisa.

Me marché para ir rápidamente hacia la habitación, abrir la puerta y ver que mi padre tenía razón, él estaba temblando muchísimo.

- Hayate...

Cerré la puerta, caminé, me tumbé en la cama y me metí por dentro de las sabanas para ir a abrazar entre su cuello. Luego de ello acerqué su cabeza hacia mi pecho para que se sintiera protegido, o eso es lo que yo pensaba.

Noté sus fuertes temblores.

Siento no haberme dado cuenta de esto antes, Hayate... -Susurré sintiéndome culpable - Menudo soy, ah... que irresponsabilidad por mi parte -Dije aquello como si aun fuera el delegado.