/яеsετ/ jαεчσиφ.

τнiяτεεи

Taeyong se levantó a causa de la alarma, 6:40, era hora de levantarse, leer la carta, desayunar, ir al trabajo y reflexionar allí mismo que es todo eso de las cartas y por qué él. Esa era su rutina

Casi por instinto fue hacia la puerta y tal como se acostumbraba a hacer, abrió la puerta y vio para todos por si veía a alguien sospechoso que pueda haber dejado aquel papel. Que por cierto, esta vez sólo era un papel, no estaba envuelto por esa carta que comúnmente tenía, ahora sólo era lo que tenía adentro, un papel escrito a mano, con ciertas manchas que aparecían aveces por las cartas.

La abrió y la leyó

"Hola, este es Jaehyun.

Realmente no esperaba llegar a este momento, no quería. Pero es que no sé, simplemente sólo quiero compartir mis problemas con alguien.

Sé que no es tu problema... o quizás que no te importe; sé que no dirás nada al respecto.

Bueno... me cuesta decir esto, más bien, escribirlo. Pero lo haré.

Hace un tiempo, mi familia y yo fuimos a un parque a simplemente pasar el rato juntos, poder hablar, reírnos. Tal y como una familia normal y feliz.
Pero justo algo sucedió ese día, algo bastante estúpido que me hizo pensar bastantes cosas y por las noches no poder dormir... Iré al grano, ¿Te acuerdas de mi hermano? bueno, él fue quien fue el cau"

La confusión al leer aquellas cartas ya era bastante común, pero esta vez era algo no tan común que hacía a esta algo rara

Se podía ver claramente como cierto párrafo no se podía comprender bien debido a que estaba incompleto, nunca había pasado algo así con aquellas cartas.

Vio la hora, eran las 7:03, se preparó una taza de café y se fue a poner su ropa que utilizaba para el trabajo. Se iba a encontrar con un día bastante largo de su parte.

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- Ah... queridísimo Ty Truck ¿Cómo estás? -un castaño apareció detrás de él y se abalanzó a su espalda en forma de abrazo, con intenciones de molestarlo-

- Creo que ya me acostumbré a que hagas eso, ya no me molesta, así que tienes todo tu derecho en por fin dejar de hacer eso cada vez que me ves -dijo en forma de burla-

- Tienes razón, pero ya se me hizo costumbre hacerlo, me hace sacar todos mis demonios -su apreciado sarcasmo filosófico apareció, haciendo soltar una pequeña risa a Taeyong-
Ya ¿Qué hacías?

- Estaba leyendo algo. -él no sabía si contarle lo de las cartas, podría hacerlo, recibiría más ayuda, pero le daba algo de mal sabor el tener a alguien que también sepa sobre su "temita"-

- ¿Puedo saber qué? -agarró cualquier silla que se encontraba allí y se sentó a su lado-

-taeyong se lo pensó unos segundos- Bien, pero no se lo digas a nadie, es algo privado, queda aquí entre nosotros, John. -le advirtió-

- Okay, lo prometo -dio una sonrisa sincera-

- Bien, ponte cómodo que te contaré desde el principio.

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