En un año (Juliantina) PAUSADA

Capítulo 8

No dijeron que sería fácil, tampoco dijeron que sería tan complicado y que me caería tantas veces antes de lograrlo...

_¿Qué piensas preciosa?_

Val levantó la mirada y me acarició la mejilla lentamente_ imagino que tengo piernas, que estoy caminando mientras te tomo de la mano y vamos por la playa_

Me acosté a su lado en la cama, recostando mi cabeza en su pecho_¿Y qué más?_ quise saber, cerrando mis ojos para imaginarme lo que está diciendo, ella hizo lo mismo sin dejar de acariciar mi mejilla. Me encanta cuando hace eso, me hace sentir mimada.

_ luego nos sentamos en la arena, te colocas entre mis piernas mientras te abrazo por detrás. Disfrutamos de la suave brisa, el silencio reconfortante y nos quedamos así un tiempo, solo disfrutando_ sonreí como boba al imaginarme eso_ luego girarías tu cabeza y me besarías lentamente_

Levanté la cabeza dejando varios besos en su mandíbula hasta subir a sus labios_ eso puedo hacerlo ahora_ susurré contra su boca antes de iniciar un beso lento, consumidor. Uniendo mi frente a la suya, queriendo tenerla más cerca_ podría besarte cada segundo_ volví a susurrar contra su boca.

Ella sonrió de vuelta, una sonrisa que no alcanzó a convencerme de que sea real. Más bien, una sonrisa muy forzada_ me vas a besar todo el tiempo que me queda de vida_ dijo arrugando la nariz, mi corazón dio un vuelco de alegría. Es lo más tierno que alguien me ha dicho en mucho tiempo...

_ ¿Me lo prometes?_ le pregunté haciendo un puchero el cual ella besó varias veces.

Volvió a besarme, quedándose así unos segundos; sin hacer ningún tipo de movimiento_ con este beso, te prometo que me vas a besar por el resto de lo que me queda de vida. Porque quiero pasarla contigo_

_las promesas no se rompen Valentina_ ella asintió entrecerrando los ojos, ojos que me hipnotizan por completo_ ¿Quieres algo de comer?_ volvió a asentir, así que me levanté de la cama con mucho cuidado de no lastimarla, no sin antes robarle un beso, esta vez si sonrió de verdad...

Salí de la habitación dispuesta a ir hacia la cocina, pero una conversación hizo detenerme de golpe. Provenía de la habitación de la mamá de Val, no quería escuchar. No soy entrometida, no se porque mi cuerpo no respondía a las señales de mi cerebro de continuar mi destino.

_ pero es que ya hice todo León, ya no sé qué más hacer. Estoy tan cansada, y se nos está acabando el tiempo. Dijo un año, solo quedan meses. Estoy harta de estar viajando para ver si encuentro algún estudio o algo que la haga volver a ser la misma de antes_ tragué seco al escuchar a la señora llorar. ¿Estarán hablando de Valentina? Creo que está hablando por vídeollamada con el papá de Val... no me gusta esa conversación.

_ ¿Y si solo la dejamos ir? La perdimos el día que tuvo el accidente, ella no es feliz. Ya déjala ir_

Negué rotundamente, echándome hacia atrás. Siento ganas de vomitar, todo me da vueltas. Ahora puedo entender de qué va todo esto.

En un año... ella piensa... ni me sale decir esa palabra, me niego a decirlo.

_ no puedo, es mi pequeña y si la vieras, está más feliz. Sonríe hasta más que antes, hay un brillo diferente en sus ojos_

Me siento mal por pensar que la madre de Val no la quiere, pero en realidad la ama demasiado, aquí la única egoísta es Valentina. En verdad está siendo muy egoísta, así que corrí de vuelta a la habitación sin hacer mucho ruido, no quiero que se entere de que estaba escuchando, cerré la puerta. Mirando a Valentina con el ceño fruncido, no puedo hablar. No me salen las palabras. Solo balbuceos ahogados en lo más profundo de mi garganta.

Ella me está mirando sin entender lo que me pasa, claro que no lo puede entender. No sabe el dolor que estoy sintiendo en mi pecho, tenía tantas cosas por decirle, que se quedaron solo en mi mente.

_ cuando dijiste que pasarías el resto de tu vida conmigo, no me dijiste que yo no pasaría el resto de la mía contigo_

_ ¿De qué hablas?_ me preguntó dando varias palmadas en la cama, negué de inmediato. Si estoy cerca de ella, será más difícil contener mis lágrimas.

_ sabes de lo que hablo, vas a morir en unos meses. ¿Crees qué esto es una estúpida película o un estúpido libro? Es la vida real Val, y duele, duele porque hace unos minutos estabas haciéndome promesas estúpidas, ahora me doy cuenta de lo vacías que estaban_ dejé salir un sollozo agudo sin poder evitarlo.

Ella en cambio se rió en mi propia cara_ se que no es un libro, ni una película. Se que es muy real, lo vivo día a día. Y aunque tú me hagas sentir mejor, no es suficiente. ¡No lo es, maldita sea y nunca lo será! ¡Quiero mis putas piernas de vuelta! ¡¿Por qué nadie entiende el infierno en el que estoy viviendo?! Solo juzgan, opinan y hablan mierda sin saber, como si estuvieran viviendo o sintiendo lo que yo siento_ me estremecí al ver su rostro rojo, está enojada y yo no estoy menos enojada que ella. Sus gritos se han de escuchar por toda la casa_ ni siquiera sé que diablos viste en mí. ¿Es por mi dinero? ¿Quieres qué lo deje todo a tu nombre cuándo muera? Si es eso, no tengo ningún problema, total. Te hace más falta a ti, qué a mí_

Me sentí asqueada, me acerqué a ella con la respiración pesada. Su pecho sube y baja sin parar, abrí mi mano y la dejé muy cerca de su mejilla, pero sin llegar a pegarle, no lo haría_ me enamoré de ti Val, lo hice desde el primer día que entré a esta puta habitación, desde entonces solo he querido intentar hacerte entender lo hermosa que es la vida. Intentaba hacer que vivieras de verdad, que apreciaras las cosas de una manera diferente. Tu dinero me importa muy poco_

_ y lo hice, pero no es suficiente. No lo es_

Cerré mis ojos dejando salir las lágrimas que tanto estaba reteniendo_ me duele no ser suficiente para ti, me duele que lo que hiciera no fuera suficiente_ le dije entre lágrimas, no puedo parar de llorar, no puedo hacerlo. Y solo puedo pensar en nuestra última salida, nuestra última salida al cine, con lo que me costó convencerla de ir.

Tres días antes...

_ es una horrible película_ dijo Val en un tono bajito, estamos en el cine. Los guardaespaldas se tardaron un montón en lograr entrarla a la sala, y cuando entramos, ya estaba a mitad. No le he prestado atención a la película. Estoy muy nerviosa, no sé porque. Pero las manos me sudan, como si fuera una adolescente. Quizás es porque estoy en una cita con Valentina, estoy en un puta cita con la chica que me gusta. Nadie nos está mirando raro, ella sonríe tanto que puede iluminar toda la sala, ella es el sol_ deja de mirarme así, ya me estás dando miedo_

Reí bajito, pegándole en el hombro _ eres una pendeja, es más. Admite que te encanto_ negó frunciendo el ceño_ no seas así, ándale Val_ volvió a negar pero sin borrar esa sonrisa de sus labios.

_ sabes que me encantas demasiado, pero si tengo que decírtelo el resto de mi vida. Entonces te lo diré _

Salí de mis pensamientos, riéndome de ellos. No sé cómo fui tan estúpida como para no darme cuenta, estuvo ahí todo el tiempo. Me lo decía a cada rato, pero mi corazón quiso entender lo que más le convenía_ ¿Y no hay nada qué pueda hacerte cambiar de idea?_ me puse de rodillas frente a su cama_ no quiero perderte Val, no quiero perderte a ti también. Eres la única persona que me queda_

_ encontrarás a alguien más, tendrán hijos. Una casa, un perro. Serás una gran enfermera, le contarás a tus hijos sobre mí y seré un lindo recuerdo. No es tan malo. ¿Verdad?_

_ Es lo peor que me han dicho, porque quiero todo eso contigo. No quiero tener que contarle eso a mis hijos, quiero que estés ahí para que se lo cuentes a los nuestros_ me levanté, tomando sus mejillas entre mis manos_ no te rindas, no lo hagas_

Hace unos minutos nos estábamos gritando, ahora le estoy rogando para que se quede conmigo_ no puedo Juls, no puedo hacerlo. Por más que ame estar contigo, se que a la larga no será suficiente. ¿Qué pasará cuándo quiera jugar con nuestros hijos? ¿Cuándo quiera correr tras de ellos y no pueda? ¿entiendes lo frustrante qué es eso?_asentí, no soy tan estúpida. Una parte de mí la entiende_ ahora cuando salgas por esa puerta voy a querer ir tras de ti y no podré hacerlo_ dijo en un hilo de voz.

_¿Me estás echando?_ le pregunté con temor de que diga que sí.

Negó, haciéndome suspirar de alivio_ no te estoy echando, solo te estoy dejando ir para que encuentres algo mejor_

Con eso me dejó caer de golpe con la realidad, me levanté por completo. Me giré sobre mis talones, caminé hacia la puerta. No tuve el valor de salir, no puedo irme y ya, no tengo el valor necesario para alejarme.

Pero. ¿Cómo te quedas al lado de alguien qué no te quiere en su vida? Es mejor solo marcharse, llevarse los recuerdos y tratar de enterrarlos.

_ Juls, no te vayas. No aún, ¿Puedes ir a la playa conmigo? Es lo último que te voy a pedir_ reí entre lágrimas, es muy egoísta. En verdad lo es, todavía tiene el descaro de pedirme eso.

_ tus guardaespaldas pueden llevarte_ le dije entre dientes, girando el pomo de la puerta.

_ Quiero ir contigo_ suspiré pesadamente, no puedo decirle que no... aunque me esté rompiendo el corazón en mil pedazos, aunque sienta que se me está desgarrando el alma. Aunque sepa que la voy a perder...

_amantedelonuevo_