Pasaron los días, Andrew y Antonella estaban felices, asistiendo a eventos, conociendo sus amistades, comparando sus gustos, los cuales eran muy parecidos, y disfrutando de su mutua compañía.
Antonella creía estar soñando, pero esa misma noche en una fiesta a la que asistieron, platicando con una amiga, esta le comento.
-Antonella me dijeron unos amigos que, la antigua novia de Andrew, Frederika, se enteró por el periódico de su compromiso y esta furiosa, en este momento debe estar tomando un avión de regreso a la cuidad-
Antonella recuerda haberlos visto en algunos antiguos titulares de periódicos y revistas, se veían muy bien juntos, todos los que los vieron en esa época, pensaron que se casarían, sin embargo, hacia un año aproximadamente que habían terminado, Frederika se mudó a París, pero cada cierto tiempo se veían, los rumores decían que, ella lo había presionado ya que, quería que él se comprometiera y él, por supuesto se negó.
Frederika es una mujer muy fuerte y controladora, a quien le encantan las fiestas y exhibirse, en el carácter es muy parecida a Andrew, consigue siempre lo que quiere, con excepción de a Andrew.
Físicamente es muy alta, tiene el cabello rubio, su cuerpo es rectangular, pero, bien tonificado, tiene un busto prominente que algunos aseguran es producto de una cirugía, su cara es cuadrada, nariz recta, ojos azules y labios delgados en color rosa. Ella en algunas ocasiones ha modelado, para diferentes marcas de alta costura.
Antonella se sintió algo intimidada y busco a Andrew, él pudo notar algo en su cara.
- ¿qué te pasa Hermosa? -dijo Andrew.
Antonella respondió algo tímida y a la vez temerosa de su reacción
- me dijeron que tu ex novia Frederika viene a verte está muy molesta por el compromiso-
Andrew- me imagine que eso haría, le gusta mucho llamar la atención, tu no le des importancia. Lo único importante para mí eres tú-
el, la beso de manera tierna, para tranquilizarla, algo que, si funciono, ellos siguieron disfrutando de la fiesta, hasta tarde. Cuando Andrew la llevo a su casa, se despidió avisándole de un compromiso que tendrían al día siguiente, ellos quedaron de verse más temprano e ir cenar primero.
Al despertar Antonella se sentía muy feliz, ese día tenía mucho que hacer, está en exámenes y trabajos finales.
Antonella se había arreglado muy bonita, Andrew cuando la ve se queda embelesado, a ella no le gusta mucho maquillarse, pero, cuando lo hace realza su belleza, además ella por primera vez decidido usar algo más coqueto, lleva un vestido negro con encaje, tiene un escote pronunciado en la espalda y llega tres dedos por encima de la rodilla, su cabello lo lleva recogido en un peinado alto, con algunos cabellos sueltos y rizados de manera intencional, lo que hace contraste con el color de su piel, y deja a la vista su espalda descubierta.
- ¡Estas hermosa Antonella!
Dijo Andrew mientras se acercaba a saludarla, este le da un beso en los labios y desliza su mano por su espalda para acercarla, en ese instante se sorprende al sentir su piel al aire y sin poder evitarlo, la hace girar para verla por completo, su cara no puede esconder esa sonrisa descarada y el brillo especial que se ha instalado en sus ojos
- ¡No traes brasier! – grita Andrew sorprendido, ha visto a muchas mujeres con mucho menos ropa, pero, jamás pensó que Antonella también tuviera o usara ese tipo de vestidos, ella siempre usa ropa más discreta y nada provocativa.
Antonella esta roja de la vergüenza, por reflejo ha subido sus brazos al pecho juntando las manos como si estuviera rezando, trata de cubrirlos, ella ha querido sorprenderlo, quería que se sintiera orgulloso de ella, pero ahora no se siente muy segura, de nuevo solo piensa en salir corriendo, no quiere ni verlo a la cara, entonces en un tono de voz bajo ella alcanza a decir
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Antonella
RomansaAntonella es una bella chica algo inocente, cariñosa y bondadosa. Desde la muerte de su madre se ha alejado de todo y de todos, olvidándose de vivir. Andrew es un hombre frió, ambicioso y posesivo. El ha dado por perdida su herencia, pues no quiere...