Antonella

Capítulo 41

Grace respira con dificultad, el, la reconoció, como puede ser posible, han pasado, más de tres años, su cuerpo cambio mucho, ahora tiene curvas donde no había, ella se cortó y tiño su cabello de color castaño, usa unos pupilentes cafés, para ocultar sus hermosos ojos color celeste, que tanto le gustaban a él, se ha maquillado para parecer más grande, ni su amiga la reconoció la primera vez que la vio.

-responde, ¿y con quien dejaste a mi hijo? - le dice Peter molesto

Grace siente un mareo, no cae porque Peter la sostiene, ella comienza a llorar, tiene miedo, sabe que él, tiene el poder y el dinero para hacer lo que quiera, podría desaparecerla y nadie nunca lo sabría o lo podrían comprobar, podría quitarle a su hijo, pero, en ese caso preferiría que la matara, a vivir sin él.

En este momento se arrepiente tanto de haber cedido ante sus superiores que la presionaron para que trabajara de infiltrada, y por fin atrapar a Peter y a Walter.

Ella a pesar de ser menor de edad cuando el, la sedujo, nunca lo denuncio, y tampoco le aviso de su embarazo, por miedo a que le quitara a su hijo o a que se deshiciera de él.

Pero, uno de sus maestros en la academia, se enteró de la historia y la transfirió, desde entonces la han presionado para que colabore, ella no quiso, le tiene mucho miedo, sin embargo su nuevo capitán que esta cegado por el dolor y el orgullo, la chantajeo amenazándola con contarle a Peter del hijo que ella tuvo de él, ella intento, denunciarlo, pero, sus denuncias no fueron bien recibidas ya que todo el departamento de policía los odia, y ahora a ella, la ven con el mismo odio, además de que la humillan y menosprecian por caer en las garras de ese hombre, nadie la ve como lo que fue, una pobre niña inocente, seducida por un hombre con experiencia, labia, dinero y poder.

En la comisaria solo se habla de que nunca les han podido arrestar, sus crímenes nunca son comprobados, no hay pruebas y las pocas que han encontrado desaparecen.

Peter carga a Grace y la acuesta en la cama, ella no deja de llorar y temblar, teme preguntar, le horroriza pensar en las posibles respuestas de él.

- ¿creíste que no te reconocería?, ¿Qué te hizo pensar que te perdí la pista? – dice Peter algo molesto. Ella se sienta en la cama con mucho esfuerzo, lo mira a los ojos tratando de buscar si le miente.

-de verdad que eres ingenua, Grace, recuerdas cuando te corrieron tus malditos padres de tu casa, por estar embarazada, no tenías ni una hora en ese parque cuando la dueña de los departamentos te ayudo, ¿Quién hace algo así?, quien crees que pago tu parto, yo fui el donador, y cuando no te aceptaron en la academia también fui yo, pero, eres tan terca que volviste para la revisión del examen de admisión, esa beca, fui yo, la beca de la guardería también, por Dios Grace, ¿Quién da becas en la guardería?, y la rifa de tu vecina de piso, la que ganaste, también fui yo, nunca les perdí de vista, y antes de que preguntes también yo mande golpear a esos dos que se te acercaron, yo sé todo de ti, yo te lleve hasta donde estas, lo único que no pude anticipar es que la chismosa de tu amiga le dijera todo a tu miserable maestro y él te transfiriera y te chantajearan, recuerda que la mayoría de la policía trabaja para mí, por lo menos los que toman las decisiones- dice Peter viéndola fijamente

- ¿Qué vas a hacer conmigo? - pregunto ella en un hilo de voz

-todavía no lo sé- dice Peter viéndola molesto, ella cierra los ojos tratando de controlar su miedo y formulando una nueva pregunta

-si me pasa algo, ¿Qué pasara con mi hijo? - pregunta ella sin poder verlo a los ojos y temiendo su respuesta.

-querrás decir nuestro hijo- dice Peter más enojado, ella lo ve y lo encara, por su hijo hará lo que sea