El Secreto de James Potter

𝕮 𝖆 𝖕 𝖎́ 𝖙 𝖚 𝖑 𝖔 3

La enfermera Poppy Pomfrey era una buena persona. Fue muy amable con él al comienzo, pero cuando empezó a revisarlo con la varita, su ceño se frunció y parecía molesta.

¿Por qué los adultos eran tan fáciles de enojar cuando el estaba presente? Su tío Vernon, su Tía Petunia, el profesor Gaunt y ahora la sanadora Pomfrey. ¿Acaso hacía algo mal? Si era así, debía arreglarlo.

Pomfrey sostuvo unos papeles. Ciertamente estaba enojada, pero no con el niño, sino, con aquellos que se hicieron cargo del pequeño. Según Dumbledore, había dejado a Harry Potter con una familia que lo querría y lo trataría como su propio hijo. Los resultados de los exámenes no eran prueba del cariño.

Harry tenía una mala condición con la vista causada por golpes en la cabeza, golpes con objetos duros que podrían crear una conmoción a un niño pequeño. La magia lo protegió e intento arreglar esto, pero al parecer los golpes eran constante y era inevitable. Si iban a un sanador con esta especialidad, Harry podría tener esperanza de no utilizar lentes, por el momento era mejor que los utilizara, pero esos eran inexactos.

Aparte de la vista, había moretones que eran recientes y un historial de algunos que desaparecieron con la magia pero que en el pergamino aparecían. Moretones que empezaron a una temprana edad, de la edad de tres a cuatro años. Y estaba segura de que no era porque el niño era torpe y se caía siempre, no, eran golpes hecho por un adulto.

Cicatrices en la piel no había, gracias a la magia, pero hay antecedentes, muchos antecedentes y la cantidad de cicatrices que el niño tuvo con fecha y cuantas fueron ese día. A veces a Pomfrey le gustaba que los exámenes fueron detallados, esta vez era diferente. Imaginar lo que tuvo que aguantar un pequeño se le apretaba el corazón.

Minerva tenía razón, esa familia era despreciable.

Le dio una mirada a Tom que esperaba el examen. Ella no hablo, sólo le paso el pergamino y vio como la cara de Tom parecía relajada, pero en esos ojos había un fuego que daba miedo. No fue la única que estaba furiosa, la magia que desprendía el profesor le hizo saber que estaba más allá de lo pensado, como si hubiera lastimado algo preciado.

Algo en su cabeza hizo click y miro a Harry.

Tenía alguna similitud con el profesor aparte de James. Ojos verdes como los de Tom, no como los de Lilly, la madre de Harry.

Pomfrey en el tiempo que James era un estudiante se escucho un rumor de que Tom mantenía una relación con el mismo adolescente Gryffindor. Pensó que era eso, solo un rumor para lastimar al buscador de Gryffindor y al estricto profesor de DCAO, pero no. Harry podría ser la prueba de esa verdad.

Ella, con la esperanza de que fuera así y que pudiera alejar a Harry de esos muggles despreciables, fue en busca de una poción que pidió una vez al profesor de Pociones sólo por precaución. Siempre todos los años tenía una, esta vez podría ser de ayuda.

"Tom, quiero hacer un ultimo análisis" el profesor miro la poción que mostro Pomfrey. La reconoció y no dudo en hacerla, también tenía sus dudas hace mucho tiempo cuando se entero que los Potter daba las noticias que otro Potter venía en camino, tres meses después del encuentro que tuvo con James.

Harry estaba curioso con la poción, era de un color blanco plateado. Buscaría en sus libros de pociones cual era.

"Como gustes, Poppy" se acercó a ella.

Ocultando lo que hacía para que Harry no sospechara, saco su varita e hizo un corte con ella en su mano. Poppy negó con la cabeza.

"Es mejor que el señor Potter lo vea Tom, puede ser una ayuda para él y alejarlos de esos muggles" miro al menor que lo miraba con esos ojos verdes.

"No creo que sea prudente Poppy, él..." se mantuvo callado cuando ella le dio una mirada que interpreto bien. "Bien, hay que explicarle entonces la situación"

"¿Qué situación?" mencionó el menor.

Con los Dursley había aprendido que no debería preguntar, pero esta vez su curiosidad le ganaba.

Tom vio que el menor tenía una vena curiosa, heredada por James. Le sorprendió que Harry estuviera en Slytherin cuando sentía que tenía más de Gryffindor, pero por experiencia sabía de aquellos niños que fueron abusados y maltratados, caían en la casa de las serpientes.

El mayor quiso acariciar al menor, pero se detuvo aún cuando su mano estaba sangrando. Puso algunas gotas en la poción y el menor que vio esto, sus labios formaron una "o" en comprensión.

Se curo la herida con un simple hechizo. "Verás Harry, quise explicarte esto mejor en un lugar donde te sintieras cómodo y con algo de chocolate caliente y galletas, pero creo que esto podría ser una ayuda" el menor lo escuchaba atento. "esta poción es utilizada para saber la paternidad del niño, en este caso, Poppy quiere asegurarse de algo"

Harry bajo la mirada. ¿Sería que su padre James no fuera su padre? No, no, era la misma imagen de él y además el profesor le sentía cariño a su padre. No debería haber traición, pero ¿Cómo sería posible que fuera la imagen de James Potter y a la vez Tom fuera su padre? Eso no tenía sentido, no en el mundo Muggle y aquí era el mundo mágico.

El profesor viendo que Harry entro en shock, supo que no fue buena idea. Lo que sabía de este mundo era nulo y Harry debería tener un rechazo, pero sólo vio lagrimas salir del menor.

Su impulso fue fuerte y lo abrazo. El menor lloró ese segundo día, esta vez mojando la túnica gris del profesor que lo consolaba.

Poppy se acercó a ellos con la varita. Tom le dio una mirada de que se quedara en su lugar.

"Tranquilo, James es tu padre. No haremos esto si no quieres ¿Sí? Pero James es tu padre, no te preocupes por eso"

El menor murmuro algo, no se escucho porque estaba escondido en el pecho del mayor. Lo repitió cuando se alejo un poco. "Quiero intentarlo, no me importa si mi papá no es mi papá, el siempre será mi papá porque me protegió y..."

"Harry, James es tu padre. Se que en el mundo muggle la relación entre dos hombres no es aceptado, pero en el mundo mágico si lo es y para tú información, aquí es posible tener hijos sin importar el género"

Si era eso cierto, su madre no era su madre y su padre podría ser su madre, y el profesor podría ser su padre. Eso era bueno y malo.

Malo porque aquella que llamaba madre no lo era y posiblemente puede que sea una tía. Una mujer que dio su vida por él a pesar de no ser nada. Eso era malo porque por su culpa acabo la vida de alguien que podía seguir adelante sin importarle.

Y bueno porque tendría un familiar que lo cuidaría y lo alejaría de lo Dursley ¡Incluso se alegro de no tener parentesco con ellos!

Un deseo profundo quiso que la poción de positivo.

"Por favor, quiero hacerlo" su voz sonó temblorosa, más por la ansiedad que por estar llorando.

Tom concedió que Pomfrey se acerca y cortara la mano de Harry.

Gotas cayeron y la poción poco a poco cambio.

Ahora era dorado.