Déjà vu de emociones.

I 💭 Como quisiéramos...

Como quisiéramos o a veces nos gustaría exprimirnos el corazón y al mismo tiempo los sentimientos y que más grande error de los humanos creer que al hacer esto todo se esfumaría; Cuando los sentimientos no están en el corazón sino en algún lugar de nuestro cerebro.
Seguramente viene la incógnita del por qué entonces sentimos el dolor en el pecho o en el corazón y no en esa parte del cerebro; Déjame decirte que a ciencia cierta no tengo la respuesta.
Siempre me he preguntado por qué nacimos con la capacidad de sentir, pero... ¿Te imaginas una persona sin emociones? Yo sí.
Creo que es parte de crecer. Sí, dije crecer.
El nudo en la garganta, ese dolor, las milésimas de emociones incontables, es parte de un todo. Sin embargo seguimos queriendo exprimir todo eso a lo que yo le llamo consumirse.
La gente habla de amor, pero no se da cuenta que hay muchos tipos de él, no se da cuenta que lo que se siente no se puede explicar y sea bueno o sea malo, ese globo lleno de aire va seguir ardiendo mientras no lo explotes.
Espuma en el corazón me dijeron una vez, y la verdad es que; no todo es tan malo como parece, porque lo que alguna vez quieres exprimir también te hace feliz y es ahí cuando entiendes por qué sentimos.
Y es que es tan irreal, porque desde que el doctor estaba esperando que llegases al mundo y tu madre estuviese en esa sala de parto con tanto dolor haciendo el más grande esfuerzo para que pudieses ver las estrellas por primera vez y respirar, allí comienza todo, en tu primer llanto, que significa que estás vivo. Llegamos a suponer que sólo estamos hechos de carne y hueso porque eso nos hicieron creer, pero la verdad absoluta es que somos humanos y en algún momento de nuestra vida todos fuimos tontos acerca de un todo o si quiera nada. Porque aunque mil y una vez quisiéramos apartar lo que no se puede del alma y no, no hablo de amor, porque ese término está muy desechado para quiénes lo sufren, que al contrario no es nuestro caso; Debemos aceptar que poder abrir los ojos al despertar y poder sentir la brisa correr más fuerte sobre nuestra existencia y nuestra piel es símbolo de estar vivos, y aunque no siempre lo estemos de esa manera, todo lo que alguna vez quisimos exprimir siempre vuelve a nosotros sólo que esta vez mejor, y quizá siempre fue mucho mejor sólo que está vez estamos felices de que los árboles se muevan de lado a lado para que nos den el oxígeno que tanto hemos anhelado.

-itsskys.