The Birth of the Eclipse (Cassunzel Modern!AU) [final alternativo]

Polvo de estrellas.

Ya habían pasado cuatro meses después del funeral de Rapunzel, en esos años fue un reto para Cass acostumbrarse a su nueva vida.

Cass aunque estuviera ocupada en la comisaría, siempre estaba atenta a los cuidados de Violet.
Había veces en que Cass llevaba a su hija al trabajo, construyó junto con ayuda de Pedro y Stan una pequeña sala de juegos para Violet, de manera en que pudiera trabajar y cuidar a la niña sin problemas en que tocara cosas peligrosas.
-muchachos- Cassandra se levantó de su asiento -sus informes ¡ahora!-
-encontraron a Dwayne vendiendo drogas- habló Pedro con un tono serio.
-¿de nuevo?- la pelinegra casi rompe su pluma -¡esta vez encarcelenlo! ¡que vea que es más que una advertencia!-
-si- ambos se miraron aterrados.
-¿algo más?- Cass volvió a preguntar anotando los sucesos en su bloc de notas.
-se ha pedido buscar a la comadreja como lo ordenó- Stan se quedó en silencio -la búsqueda comenzó hace días-
-perfecto, no dejaremos que ese asesino ponga en peligro a más gente- Cass dejó su pluma en la mesa, le dio un sorbo a su café y miró a los muchachos -pueden retirarse, hicieron un buen trabajo-
-gracias capitana-

Dicho esto ambos salieron de la oficina dejando a Cass casi en soledad, solo la compañía de su hija hacía menos pesado el trabajo.
-bueno princesa- Cass cargó a Violeta y la sentó en sus piernas -¿a que quieres jugar?-
-ma.. ma.. ma..- la niña daba pequeños saltitos.
-¿eh?- la mujer estaba un tanto confusa -¿quieres hablar?-
-jajaja ma..- Violet se reía.
-¡oh, ya sé! Di “Cass”- una genuina sonrisa se posó en los labios de Cassandra -di “Cass”, sé que puedes princesa-
-Ca.. Ca..- la niña balbuceaba -ma.. ¡mamá!-
-¡si! Espera ¿que?- Cass miró a su hija con asombro -¿que dijiste, princesa?-
-¡mamá!-

Aquello sorprendió a Cass, no podía creer que su hija había dicho sus primeras palabras y que ella fuera la primera, sin embargo, su mente se lleno de pensamientos de una vida feliz con Rapunzel, en familia. Contuvo un nudo en la garganta, abrazó a la niña y saltó de alegría.
-¡mi princesa ya puede hablar!- Cass levantó a Violet sin quitar su sonrisa, a lo que la niña se reía sin parar -¡mi bebé ya esta creciendo!-

Horas después al terminar el trabajo, Cass y Violet iban directo a la casa de los Corona, la mujer estacionó el auto, bajó a la bebé en su cochecito y tocó el timbre de la mansión.
-oh Cassandra- abrió al instante Arianna -bienvenidas, pasen-
-gracias alcaldesa, aunque espero que puedan cuidar un rato a Violet, es que hay algo que debo hacer- dijo Cass un poco roja de la vergüenza -si no pueden esta bien-
-¿que? Cassandra será un gusto cuidar a nuestra nieta- Arianna hizo un ademán para que ambas entraran a la casa -pasa, sin miedo-
-no sé como agradecerles- Cass dejó las cosas de Violet en un sillón -ustedes me han apoyado incondicionalmente estos meses-
-es lo mejor que podemos hacer- Frederick abrazó a la pelinegra -sabemos lo difícil que es una perdida de la familia-
-es comprensible.. Ustedes la perdieron dos veces y por mi culpa- Cass suspiró con pesadez.
-hija, ninguna de las veces que sucedieron fueron tu culpa- el alcalde decía esto en un tono comprensivo y melancólico -son situaciones que se dieron por el destino y no podemos interferir en ello-
-entiendo- Cass sonrió levemente -de nuevo les agradezco por cuidar de Violet, no creo tardar mucho, a lo máximo llego en una hora-
-tranquila Cassandra, también debes darte tiempo de relajarte- Fred posó su mano en el hombro de la chica -ella esta bien con nosotros-
-gracias suegros-

Cass se despidió rápidamente de los mayores, subió a su auto y se dirigió a un deshuesadero. Allí por lo general se reunían los pandilleros, ladrones y criminales de Corona, además de adolescentes problemáticos que buscaban diversión.

Cassandra bajó del coche, se sentó en el capó, sacó una caja de cerillos, tomó un cigarro de su bolsa en su chaleco y lo encendió para así darle un ligero sorbo.
-Raps..- Cass aventó el humo del cigarrillo -haces mucha falta aquí.. No solo en mi vida, en la infancia de Violet..-

La pelinegra contuvo un nudo en la garganta y siguió fumando, sabía que había caído bajo como para caer en la adicción del cigarro. Sin embargo, no lo hacía todo el tiempo, solo lo hacía en lugares prohibidos, sin estar a la vista de su hija o de algún conocido.
-¿sabes Raps? Hoy Violet aprendió su primera palabra- su sonrisa volvió a aparecer en sus labios -ella me dijo mamá ¿puedes creerlo? Nuestra bebé esta creciendo muy rápido... Y tengo miedo en que crezca-

Hubo un silencio ensordecedor, ¿como podía creer que ella la escuchaba? Ya no estaba ¡se había ido para siempre! Estaba hablando sola, nadie la escuchaba, nadie podía saber como se sentía. Cass apagó el cigarro, lo tiró a la basura y se recostó en el asiento de su coche.
-por ahora las cosas han ido bien, pero no sé que haré cuando Violet pregunte de dónde viene, en cuanto más crece un niño más preguntas tiene acerca de su mundo- Cassandra miró hacia la ventana -Raps.. Me pregunto que vida hubiéramos tenido si estuvieras viva ¿seríamos una familia feliz? ¿no tendría tantas dudas como ahora? Eras joven como para irte de esa manera, tenías un futuro prometedor, una familia que recién empieza, amigos que te valoran, ¿acaso estoy condenada a sufrir las perdidas de los que amo?-

Cass desbloqueó su celular, abrió la galería y miró detenidamente las fotos que tenía guardadas. Varias de las fotos eran con su padre Cooper, en otras eran con Gothel y Hector que en ese tiempo las había tomado en la preparatoria y en la academia hasta llegar a la actualidad. Otras fotos consistían de sus amigos, Varían, Eugene, Lance y recientemente Jaqueline, aquellas fotos le producían alegría y nostalgia al verlas.

Después llegaron las fotos que compartía con Rapunzel, varias de distintos años y fechas. Una de su primera cita, la segunda de su baile de graduación, la tercera al terminar la universidad, otra de su compromiso, su boda y por último las fotos del embarazo de Rapunzel.

Estas últimas le causaban una mezcla agridulce de emociones, por una parte había una felicidad en ella al recordar todos esos meses que fueron los mejores de su vida, pero por el otro lado le causaba un dolor inmenso pensar que su muerte se pudo haber evitado si la llevaba a un hospital a tiempo.
-supongo que no puedo retroceder en el tiempo y salvarte- susurró la pelinegra en un tono apagado -si tan solo pudiera salvarte..-

                      Continuará...
¡holis! ¿como están? Les he traído un nuevo capítulo un poco agridulce ;w; ¡lo sé! Me gusta verlos sufrir aunque sufro con ustedes al escribir estas situaciones :"v

Ya la historia va tomando su rumbo al igual que su contraparte más feliz (? XD

Sección de teorías uwu tenemos pañuelos por si las dudas :"v

Disfruten la lectura!! Nos leemos luego Black Rockers!! Cuidense mucho, quedense en casa mis chavos y recuerden que los quiero mucho!!! ❤

Se despide Haru~