CONFESIÓN

47 10 5
                                    

Esta profunda tristeza roja nuestra

Se vuelve más oscura y más oscura, luego se convierte en noche.

Si el amor estuvo allí desde el principio, nunca nos aseguramos.

El destino nos lleva a conocer a las personas más inesperadas,

Y dejan una impresión duradera en lo más profundo de nuestros corazones.

<Sayonaragokko/Amazarashi>

.

.

.

Un camino corto

Unos minutos

El tiempo es ambiguo

Del salón de fiestas nos dirigimos entre saludos sin detenernos al despacho, solo unos metros, pero se sintió como si fuesen kilómetros, unos minutos que parecían horas, nadie dijo una sola palabra, nuestras respiraciones se apreciaban, en ningún momento me soltó de la mano, su calidez me reconforto.

Desde que todo sucedió, mi vida ha cambiado drásticamente, pero ahora ya no estoy solo, esta calidez me lo recuerda, sonrió sutilmente, de reojo observo a Gaara, agradezco al destino por nuestro reencuentro inesperado pero predestinado, se arraigo en mi corazón reconfortándolo.

Nos detenemos, el señor Fugaku y su esposa son los primeros en ingresar, después Itachi y por último nosotros.

El silencio es tenso, observo a cada uno de los presentes, decidiendo si comenzar yo o no, abro la boca para comenzar a relatar mi parte de esta historia, pero Itachi me lo impide hablando el primero.

-Ya no se puede ocultar la verdad – dice serio – yo explicare todo si me lo permites.

Lo admito me ha tomado por sorpresa su actitud.

Esta más calmado de lo que pensé.

-Déjame hablar – Me observa, sus profundos ojos negro son un sinfín de emociones – hace años lo conocí, estudiábamos en la misma escuela, el mismo club – suspira y se sienta en un sillón, entrelaza las manos y apoya su rostro en las mismas – a decir verdad, en cuanto te vi, supe quien eras, pero fingí no conocerte

Aquello me sorprende, no me lo espere jamás sus ojos reflejan culpa, ahora lo sé desde el principio fui un estúpido.

-En aquel tiempo era un imbécil, mas de lo que soy ahora – me observa fijamente – no sabia que eras doncel, pero planeaba acercarme a ti, buscando un beneficio, al enterarme de tu condición de doncel me propuse enamorarte

Lo interrumpo, no puedo permanecer inmutable, me utilizo; no se en que momento o como actué tan rápido según iban saliendo sus palabras, pero mis hijos están ahora en brazos de Gaara y yo le di un puñetazo en la cara a Itachi.

-Lo merezco – dice tranquilo, la rabia en mi interior me provoca un ligero temblor – aún así admito que me enamore de ti – sostiene mis manos – me enamore - su convicción es tal que me estremece – te quería solo para mí, por eso nunca le deje hacer muchas cosas. Nos casamos en una boda muy privada, Sasori puso el capital inicial para la empresa

-Y fui un imbécil que le dio demasiado dinero, yo compre la gran y fastuosa casa en la que vivíamos – comienzo a balbucear interrumpiéndolo – no puedo negar que al principio nuestro matrimonio fue bueno, yo me sentí amado por primera vez en muchos años por eso me esforcé en complacerlo siempre, el dinero nunca fue mi prioridad

Observo nuevamente a los presentes, Fugaku esta tenso, su ira fluye por su ser; mientras que Mikoto derrama lagrimas totalmente decepcionada y finalmente Gaara, el sostiene a mis hijos, pero sé que quisiera asesinar a golpes a Itachi.

-Así que me aproveche de eso – asiente – si lo ame hasta que las cosas comenzaron a ponerse tensas, quería un hijo, es lo único que te pedía insistentemente pero siempre te negaste – derrama unas lágrimas – comencé a serte infiel muchas querían que te dejara, pero eso no pasaría yo te amaba

-Hasta que conociste a mi alumno – cruzo mis brazos – Deidara es todo lo que yo nunca seré, por el me dejaste, en un mal momento ¡yo ya estaba embarazado!

Simplemente no pude evitar gritarle lo último, las lágrimas corren por mi rostro.

-Pero ellos ya no te pertenecen

-Apenas hoy los conocí

Un sollozo ahogado se le escapa a Mikoto.

-Son mis nietos – da dos pasos hacia mí, pero retrocedo.

-No – mi voz se torna fría – ellos no son Uchiha.

-Son Sabaku No – me apoya Gaara – les he dado mi apellido, les daré todo mi amor.

-Por favor, Sasori – esta vez no se detiene, ella se me acerca y me toma las manos – nosotros no sabíamos nada, esos niños son Uchiha, déjanos convivir con ellos, aunque no lleven el apellido, permíteme darles el amor que merecen, permíteme resarcir un poco del daño.

Itachi se levanta, se acerca.

-Perdóname

Hace tan solo unos meses esa simple palabra es la que más anhelaba.

Hace unos meses esa palabra hubiese cambiado tantas cosas.

Ahora solo es una palabra más.

Ahora ya no tiene sentido.

El daño está hecho

Pero la decisión aún no está tomada.

.

.

.

N/A: Lamento la demora, se presentaron problemas técnicos (mi teclado descompuesto), sin más otro capitulo, quizás corto pero es lo que me salió, es la esencia. En dos capítulos más tendré el final, así que quiero sacar alguna de mis historias que esta en pausa, por lo que quiero quizás hacer un grupo de what's app, Facebook o alguna publicación aquí en wattpad para que voten y elijan por la siguiente historia, en fin acepto propuestas.

PERDÓNAME #PremiosPlanetas2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora