Faltaba una semana para la gala de la orquesta, presentando el dúo de violín y violoncello. Los ensayos previos eran, como siempre, exhaustivos. Se pulía cada detalle con esmero y dedicación, no sin los roces propios de la situación.
Había tratado de evitar a Nanami; llegaba y ocupaba rápidamente mi lugar, y me iba en cuanto terminaba el ensayo. Cuando mi ex me pidió un ensayo extra para nuestro dúo, que quería que nos pusiéramos de acuerdo en unos pasajes. Le dije que no, que no creía que fuera necesario. Pero luego me llegó un “pedido” de parte del director del teatro, y tuve que acceder a ello.
-Quiero acompañarte- me dijo Ana.
-No hace falta amor, voy a tratar de terminar lo más pronto posible-
-No confío en ella Nat. No sabemos aún hasta donde es capaz de llegar-
-La verdad es que me sentiría mejor sabiendo que estás ahí, pero preferiría que ella no supiera que estás ahí, no quiero que tenga ningún gesto violento o molesto contigo.-
-No te preocupes, entraré luego y me sentaré al final, donde no pueda verme-
Ana seguía yendo al colegio, como siempre, tenía que conseguir su título de secundaria para poder estudiar en alguna de las prestigiosas escuelas de música que la habían aceptado, pero cuando podía me acompañaba a los ensayos o pasaba a buscarme, esperándome fuera del teatro. Me sentí aliviada al escuchar que estaría presente. No hacía mucho tiempo que estábamos juntas, pero con ella a mi lado podía enfrentarme al mundo.
Mi encuentro con Nanami tendría lugar el día jueves, luego del ensayo con la orquesta. Se había estado escondiendo de mí, esquivándome, supongo que para impedir que le reclamase por haber recurrido a esos métodos para lograr estar a solas conmigo. En esos días previos se la veía nerviosa, y un poco desarreglada. Pero no quería sentir pena por ella. Su accionar me había hecho muy infeliz una vez, no iba a permitirle una segunda oportunidad para terminar lo que había comenzado tantos años antes.
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Fueron días de intenso trabajo y el jueves llegó demasiado pronto. Ana tenía exámenes finales, no habíamos dormido juntas, porque necesitaba estudiar, pero me había prometido llegar a tiempo al ensayo con Nanami, aunque sin dejarse ver. Se preocupaba por mí.
Si lo pienso ahora, miles de indicios me habían indicado el posible desenlace de mi conflicto con Nanami, pero quizás no había querido reconocer que la mujer que había amado tanto se hubiera convertido en… No voy a adelantarme a los hechos.
Mis compañeros de orquesta desalojaron rápidamente el teatro, ansiosos todos por llegar a sus hogares y distenderse. El ensayo había sido agotador y exigente, el director no dejaba pasar el más mínimo error.
Nanami se había quedado en un rincón del escenario, iluminado a medias. Ese día se había vestido esmeradamente: un yukata estilizado, más pegado al cuerpo que el tradicional, y más corto, de seda negra, cinturón y pantalones, también de seda, de un color gris acerado, mostrando un complicado entramado de rosas y hojas caprichosas. No se había maquillado, supongo que porque recordó que no tolero el maquillaje. Prefiero a las mujeres sin barreras, como son, belleza natural.
Me saludó cálidamente, como si hubiésemos sido las mejores amigas, un beso en cada mejilla. Parecía que para ella, nada había pasado: no le había entregado las fotos a la directora, tampoco había intrigado para que me viera obligada a asistir a ese ensayo extra, tan incómodo como innecesario. Un comportamiento cercano a la esquizofrenia.
-If you don’t mind, I would like to start from section B, bar 154, right after the ritardando…there is something there that…-
Justo había visto la sombra de Ana en el fondo del teatro, había entrado discretamente, sentándose en la última fila, en las sombras. Su presencia, saber que estaba ahí, me daba tranquilidad.
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🎵🌜 UNA CUERDA DE VIOLONCELLO🌛🎵
Teen FictionSuena el timbre de entrada a clases, y como cada jueves desde hace un par de meses, mis manos empiezan a sudar casi descontroladamente... ESTA ES UNA ADAPTACION CREDITOS A SU ESCRITORA 🌛idgie🌜