~LA INVITADA~

Adam

No me lo podía creer. Después de todo este tiempo intentando controlarme...y le beso en una fiesta por un ataque de celos.
Había cometido un error, y lo sabía, sabía lo que sucedería si hacía eso pero aún así lo hice, ¿Cómo había podido ser tan gilipollas?
Encima ella no estaba en buenas condiciones y no había hecho nada malo, solo estaba divirtiéndose. ¿Quién soy yo para quitarle ese derecho? No entiendo nada de lo que siento, pero cuando mis labios tocaron los suyos... simplemente no podía parar, hubiera seguido si pudiera pero me apartó. Algo que me devolvió a la realidad y a las consecuencias que tendrían mis actos.

Después de eso, no pude hacer otra cosa que montarle en el coche y volver a casa. Que estupidez.

Cuando llegamos, la cargué hasta su habitación y finalmente la dejé en su cama...una cama en la que me había imaginado echado con ella más de una vez...

Se veía como un ángel cuando dormía, quería tocar su dulce piel, su cuello...se veía realmente delicioso. Quería morderle y hacerle de todo.
Pero me controlé y solamente le di un pequeño beso en la frente antes de salir de su habitación.

6am

Me desperté temprano, iría a correr para hacer un poco de ejercicio y después a comer al bosque, a cazar.

Lamentablemente, nuestro "padre" nos había prohibido morder a los humanos, nos conformamos con sangre animal, pero obviamente no es suficiente. Por eso mi hermano Evan que tenía contacto con un médico humano en un hospital lejano, nos proporciona sangre humana de algunos donantes. Me da pena por la gente que necesita la sangre, pero no es lo mismo la sangre animal que la humana.

El humano que nos la proporciona se llama Tom, es un hombre de 55 años con hijos y una mujer maravillosa. Evan le amenazó: si no nos daba sangre, mataríamos a toda su familia. Y claro, el pobre acojonado, no tuvo más opción.

Cuando un vampiro bebe sangre humana, sus poderes aumentan y sus energías también. Es como la cafeína para los humanos.
Normalmente voy con Rose a cazar pero ahora mismo necesito que cuide de Sophie ahora.

Lo siento Sophie, no lo volveré a hacer.