Volví de correr más o menos a las 00:00. Necesitaba darme una ducha urgente, gracias a el enfado por Sophie corrí muchísimo más de lo que corro normalmente, o corría o mataba a alguien.
Entré a casa a paso silencioso intentando no despertar a nadie para que no me preguntaran nada, odio cuando me hacen preguntas innecesarias.
Me encontré a Evan en el sofá, me contó que Sophie estaba ya durmiendo y que se había comido la mitad de una pizza ella sola, ¿Cómo podía habersela comido siendo tan flaca?
Subí a mí cuarto a estar con el ordenador o cualquier mierda que me gustara.
Cuando me la encontré.- ¿Qué haces tú aquí?
Estaba en mi cuarto, no sé que estaría haciendo pero no me hacía gracia.
- Está es mi casa también, puedo ir donde quiera, cuando quiera y con quién quiera.
- ¿Tu casa? Ja. No me hagas reír por favor. Apenas llegas hoy y ¿ya te crees parte de esta familia? Ja.
- Desde luego encajo mejor que tú, que a saber en qué líos estás metido.
No podía más.
La agarré de la mano y la empujé hacia la pared, haciendo que su espalda choque con la pared y dejándola totalmente indefensa.
Acerqué mi cara a su cara esperando a que dijera algo.
Pero no lo hizo, solamente se rió y de verdad no sé cómo lo hizo pero se soltó de mi agarré.- ¿Qué coño?
- Eres patético, ¿Ya te aburrieron tus amiguitas? ¿O es que no queda alguna chica que te soporté y me tienes que coger a mí?
- Tu me pareces muy interesante Sophie, pero tranquila, no voy a caer tan bajo como para acostarme con alguien como tú.
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~LA INVITADA~
مصاص دماءSophie, una chica de 18 años, independiente, guapa, inteligente, sensible y agradable que se muda y busca trabajo después de la muerte de sus padres. Se aloja en una casa grande y solitaria donde viven 3 hermanos; Adam, Evan y Rose (sus hermanastros...