Un café para llevar | Caramelo Macchiato

Capítulo 1.

Jin:

Cierro los ojos mientras el autobús avanza, hace demasiado frío hoy. La gran ciudad está despierta, la gente está en movimiento, y hoy, me vuelve a tocar estarlo, y para ser sinceros no me desagrada la idea de ir al trabajo. ¿Suena raro? Bueno, es que hay un par de ojos bellos que me mantienen con ganas de ir a laborar todos los Lunes.

Temo quedarme dormido, puesto aunque voy con actitud, aún tengo sueño, así que paso mis manos por el rostro frotandolas una y otra vez. El autobús para y me pongo de pie para bajar junto a el grupo de personas que también han llegado a su destino.

—Permiso.– Digo mientras bajo del autobús y me voy camino a el trabajo.

Una vez ahí, saludo a los demás trabajadores y paso a los vestidores para dejar mi abrigo y ponerme el mandil de la cafetería.

–¡Buenos días!– Escucho voces animadas e inmediatamente se de quiénes son.

–¡Buenos días Hyung! –Jimin entra a los vestidores, y me pongo la gorra negra.

–Buenos días.– Le contesto sonriendo.– ¿Y Hoseok?

–¡¡Buenos días!!– Entra bailando, me río un poco.– ¿Que cuentas Jin?

–No mucho, estaba preguntando por ti.– Cierro mi casillero.

–¿También vienes con actitud el día de hoy?–Dice aún moviendo su cuerpo, mientras se pone su mandil.

–Él siempre viene con actitud, ¿No es así Jin?–Dice Jimin sonriéndome y levantando las cejas, una y otra vez.

–Pues si, deberías hacer lo mismo, así evitas quedarte dormido en el autobús.– Hoseok se ríe.

–No puedo creer que aún no superen eso.– Se queja y pone los ojos en blanco.– ¿A quien le toca hoy lavar platos?.

Hoseok y yo levantamos los hombros.

–Bien, juguemos piedra, papel o tijeras.– Propone mientras se coloca para jugar, Hoseok y yo nos acercamos para jugar.

–¡Piedra, papel o tijeras!–Decimos los tres al unísono.

Sonrió mientras mi par de amigos fruncen el ceño.

–¡AJÁ! He ganado, bien, con su permiso, me voy a atender en la caja.– Camino de reversa.

–No es justo ¡siempre te toca la caja primero! –Hoseok entre cierra los ojos mientras Jimin trata de asimilar que he ganado.

–Siento mucho que a uno de ustedes le toque fregar platos.– Salgo de los vestidores y los puedo escuchar jugar otra vez, seguido de la voz de Jimin quejandose, me suelto a reír y camino hasta la caja.

Una pequeña fila de 4 personas está ahí, entusiasmado busco entre estás un rostro familiar, y si efectivamente ahí estaba ella.

T/N, observa la cafetería, buscando algo, me acomodo la gorra de nuevo y me preparo para comenzar el trabajo.

–Buenos días, bienvenido a Moni Café, ¿Que desea tomar el día de hoy?–Le sonrió a la señora que está enfrente mío.

T/N no pierde un segundo para buscar y chocar su mirada con la mía. Solo puedo notar como se le ilumina la cara.

Demonios, como me encanta cuando pasa eso. Tomo la orden de la señora, para apresurarme y escuchar la voz de T/N, mi pequeña dosis de alegría para el día.

T/N:

Corro apresurada a la cafetería, estoy llegando tarde y para ese entonces seguro hay una fila enorme en la cafetería. Llegó torpe a la entrada del lugar, mientras acomodo mi cabello, que; al correr se ha salido de control.

¡Asombroso! He llegado y solo hay 4 personas... Bueno, puedo esperar unos 20 minutos y tomar el autobús para llegar a las 8 a la Universidad y tomar la primera clase a tiempo. ¡Vamos que si se puede!

Camino hasta la fila y busco con la mirada a Jin, si Jin está atendiendo es seguro que está fila avanzará como rayo. Aunque, aún no logré verle.

20 minutos después...

–Buenos días señorita ¿Que desea llevar el día de hoy?– Sonríe dulcemente.

–Buenos días Jin.–

–¿Jin? Aquí no hay ningún Jin.– Finge buscar por el local, con una mano extendida sobre sus ojos.

–Ya deja de hacerte el payaso.– Le digo dándole un pequeño golpe en el hombro

–Ohh eso me ha dolido.– Sigue actuando como si le hubiera dolido.– Bueno ya, ¿Lo mismo de siempre?–Asiento.– No escuchooo..–Pone una mano en su oído.

–Si, lo mismo de siempre.–

Después de algunos movimientos torpes e incluso quemarse un poco la mano, Jin pone la tapa del café y me entrega una bolsa de papel.

–No pedí esto.–

–Lo se, pero siempre olvidas desayunar, así que come lo que hay dentro, yo invito.– Revuelve mi cabello

–¡Jin! –Aparto su mano.– Está bien, gracias.–Pago el café.

–¿Estarás ocupada esta noche?

–Mmm, no creo ¿Pasa algo?

–¿Quieres ir a el karaoke?–Pregunta emocionado, lo pienso un poco.– Anda, vamos, hace un tiempo no salimos solo tú y yo como en los viejos tiempos.– Hace berrinche.

–Esta bien, está bien, iremos a el karaoke.

–Bien, paso por ti a las 8.– Asiento.– Que te vaya bien en la Universidad.

–Gracias Jinnie.– Tomo las cosas y salgo del lugar.

Podría estar con Jin todos los días y me sentiría alegre, porque él es tan positivo y divertido, pero... Me confunde, confunde mis sentimientos.

Después de tomar la primera clase en la Universidad, salgo a la terraza, para comer lo que Jin ha puesto dentro de la bolsa, lo primero que sacó de está es una pequeña nota escrita en una servilleta.

"El desayuno es la comida más importante del día, ¿Cómo pretendes brillar sin alimentarte bien? Tonta, no te pases el desayuno de nuevo"

Sonrió y beso la servilleta para después sacar un par de Sandwiches y un jugo de caja pequeño.

–Eres un encanto.–