Habrían pasado alrededor de veinte minutos y ambos nos encontramos acurrucados en el sofá, su cabeza descansaba en uno de mis brazos mientras el otro estaba sobre su vientre. El silencio era nuestro único acompañante, nadie decía nada, nadie hacía nada, ella de a poco se quedaba dormida y yo me llenaba del aroma de su perfume, podía sentir su pulso, como inhalaba y exhalaba de forma inconciente. Me sentía pleno, completo, en ese instante entendí que no es el lugar, sino la persona lo que hacía que un momento fuera inolvidable.
Mis párpados comenzaban a sentirse pesados, su cuerpo caliente y su respiración me arrullaban. No puse ninguna resistencia, simplemente me entregué al sueño y me dejé vencer por él.
(...)
—Despierta— Decía Kiara mientras me movía suavemente, podía oír su voz, pero me encontraba muy cómodo como para despertarme en ese momento, no tenía ningún apuro por hacerlo. —¡¡¡Maldita sea Luke!!—Esta vez me sacudió con agresividad y su voz no sonaba tan calmada.— Mi madre llegará pronto del trabajo y no quiero tener que darle explicaciones sobre esto. ¡Quiero que te pongas en pie y te vayas ya de mi casa!.—
Como pude me levanté del sofá y tomé mi mochila, ella me abrió la puerta y me indicó con un gesto que me fuera. En esta ocasión no hubo beso de despedida ni un cálido abrazo, solo una mirada fría y un ''largo de mi casa'' que casi pude ver en sus ojos.
—Hasta luego—Dije en voz baja, mirando hacía el suelo mientras cruzaba la puerta de su casa y caminando cabizbajo me dirigía hacía la mía con bastantes preguntas.
(...)
—¿Y si no le gustó como la besé?— Pensé en voz alta acostado en mi cama, con la mirada perdida en el techo de madera. Quizás ella también estaba nerviosa, o puede que de verdad su mamá se enojara si nos viera en una situación como esa, en el peor de los escenarios incluso puede que se arrepintiera de estár conmigo.
Sentí mi teléfono celular vibrar en el bolsillo trasero de mi pantalón, me senté en mi cama y decidí ver quien me había escrito, era Louis quien bombardeaba con mensajes nuestro grupo de WhatsApp llamado: ''Los tres mosqueteros... ¡Y Luke¡''. Nombre que por supuesto fue idea del mismo chico:
Louis: ¿Como te fue con la chica hombrecito?.
Louis: Estaré aquí toda la noche Luke, puedo esperar mientras me ignoras.
Jacob: ¿Cuál chica?... Espera, ¿Luke con una chica?. — Era evidente que él había disfrutado escribir eso.
Y: No daré muchos detalles ahora, pero fue genial. Ya es algo tarde ¿Les cuento mañana, vale?.
Louis: Fueron los shorts hermano, dan suerte, están benditos. Con ellos perdí mi virginidad.
Harold: A nadie le importa Louis, son las díez de la noche déjenme dormir por favor.— Sí, así era Harold, simple y honesto, era parte de su encanto.
Dejé mi teléfono y me dispuse a tratar de dormir. Daba vueltas y vueltas por la cama, conciliar el sueño estaba haciéndose difícil. ¿Por qué tienes que ser así Kiara? Un segundo me tienes en el paraíso y al siguiente me llevas al infierno. Me mimas, me tratas con cariño para al momento siguiente pedirme que me largue de tu casa. En definitiva tenía cosas que hablar con ella, aclarar ciertos aspectos de nuestra ''Relación'', sí es que puede llamarse así y pedirle algunas respuestas.
La noche sería eterna mientras estuvieras presente en mi mente, porque dormido o despierto ahí estarás Mujer.
