PARTY MONSTER/ KOOKV

CUARTA PARTE/CONOCIÉNDONOS

😇😈😇😈

A medida que mi adultez llegaba fui odiando soñar, todo era oscuro, solo, intentaba quedarme despierto el mayor tiempo posible e incluso así, las voces no dejaban de molestarme, caminaba por lo prados, miraba las estrellas, dibujaba, cada cosa distractora que me ayudara, aun así, rondaban recuerdos difusos, ChoiJung decía que no le prestara atención, pero como no hacerlo si de solo pensarlo mi corazón latía como loco.

Por la mañana del sábado camine hacia el parque acordado rogando para que se le olvidara y no llegara, pero todo era en vano, cabello azabache brillando por el sol, gafas negras al igual que su atuendo, era un maldito demonio, como podía hacer latir mi corazón de esta manera. Alcé una mano para saludarlo capturando toda su atención una vez estuve cerca.

-Buenos días angelito- tomo mi mano, besando el dorso de esta dejando una leve sensación de cosquilleo sobre mi piel-. ¿Cómo has dormido? ¿Has desayunado?

-Buenos días para ti también- sonreí mirándolo siendo los molestos rayos del sol impedimento para que viera su rostro-. Dormí bien supongo y no, no he desayunado.

-Eso esperaba, ven, vamos a desayunar- seguí sus pasos por la acera sin decir palabra alguna, no sabía cómo hablarle, menos cuando sus ojos me miraban con tanta intensidad. Llegamos a un pequeño local rustico a las orillas del mar donde había una que otra persona disfrutando del sol -. ¿Qué te gustaría comer?

- ¡Oh! una vez escuche a Jimin hablar sobre waffles, ellos suelen venir a la tierra más que yo y dijeron que son realmente buenos- sonrió pidiéndole la orden a la señorita cuyo nombre escuche por Hwasa, ella era una demonia.

- ¿Por qué has venido? -dejo las gafas sobre la mesa dándole paso a sus ojos grises.

-Me concedieron el permiso, un deseo por hacer mis deberes bien, como una ¿Vacaciones? ¿Así se dice aquí? -asintió.

- ¿Por cuánto tiempo angelito?

-Un mes, bueno ya perdí una semana- miro hacia el mar, dejándome libre acceso para mirar su perfil, era difícil apartar mis ojos de él.

-Tengo cuatro semanas para que me conozcas- Hwasa se acerco arremolinando el cabello de Jungkook quien solo le sonrió.

-Dile a tu desconsiderado padre que venga a ver a su hermana.

-Por supuesto, yo le diré- dejo los pedidos en la mesa alejándose.

- ¿Esto es un waffle? -un gran plato con miles de cosas adornándolo.

-Si angelito.

- ¡Woh! - probé un poco, gimiendo al sentir aquel dulzor en mi boca-. ¡Es genial! ¡Dios! ¿Por qué no me dejas tener de esto en el cielo?

-Aquí los tendrías a diario cielo- aquella sensación en el pecho no me abandonaba.

- ¿Qué te gusta de aquí?

-El mar, la comida, aunque no pueda saborear como me gustaría, el cielo nocturno, los árboles, las estaciones, me gusta la nieve, la lluvia, la música, tocar instrumentos.

- ¿En el infierno no hay de eso? -negó.

-No, no lo hay ¿Y en el cielo?

-No conozco el invierno o el otoño, no sé cómo se siente la lluvia o la nieve y tampoco está comida, solo hay frutas o verduras, siempre está soleado, con miles de flores por los prados.

-Fui una vez, quizás no ha cambiado mucho desde entonces- abrí la boca para decir algo, pero no sabía exactamente qué decir, un demonio no es permitido en el cielo.

- ¿Fuiste? ¿A qué? Jamás te vi, no es como si fueras poco llamativo, me acordaría de haberte visto- susurro algo que no alcance a oír, sus ojos ya no brillaban.

-Mi padre está en el cielo TaeHyung y el otro en el infierno, tengo permiso para ir a verlo solo una vez en el año.

- ¿Cómo? ¿Tu padre?

-No soy un ángel como tampoco un demonio, pero, si tengo algo de ambos, 50 y 50 por así decirlo.

- ¡Oh por todos los cielos! ¡Eres un hibrido! – el apetito se esfumo y ahora solo sentía curiosidad por aquel hombre-. ¿Quiénes son tus padres? ¿Conozco al ángel? De seguro si, me relaciono con la mayoría en clases.

-Seok Jin un ángel y NamJoon un demonio

- ¿Jinnie? – asentí-. ¡Woh! Jinnie es el ángel más bueno que conozco, siempre a disposición, sobre todo cuando no entendía la materia, filosofía no es lo mío.

-Así es, el ángel Jin es mi padre, es al que menos veo, solo puedo llamarlo tres veces para que venga y yo solo puedo ir una, trato de rodearme de su cariño cuando lo veo- mi corazón de encogió, las reglas o leyes siempre serian un asco en todas partes.

- ¿Y NamJoon?

-Vivo con él desde mis 23 años, cuando supieron de mí, los separaron, estuve un tiempo con ellos porque los necesitaba, pero a los 3 años me separaron de los dos, fue una etapa dura hasta que pude volver con uno de ellos, me concedieron poder llamar al ángel solo tres veces sin que el demonio este cerca, puede venir y verme, pero no verlo a él.

- ¿Y si lo hace?

-Me matan- trague en seco-. Y los castigan por la eternidad.

Nada era como lo pintaban, me quejaba de cosas que al lado de estas eran pequeñas, ¿Cómo Choi podía odiarlo? Jungkook es aun mas de lo que quizás demuestra, fuerte, valiente, decidido, si lo conociera más, terminaría cayendo por él incluso si eso rompía las leyes.