Verano y Otoño (YiZhan)

Verano

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Hacía bastante calor y Yibo solo vestía un short corto y una camiseta ligera, había decidido no hacer absolutamente nada ese día, después de todo eran vacaciones de verano y realmente debido al calor no tenía ganas de nada. Había despertado tarde y se perdió el desayuno, no le molestó el hecho de que sus padres y abuelos no lo esperaran para desayunar, sino que ni siquiera lo incluyeran en el paseo que tuvieron más tarde, y es que ¿quién pensaría que el adolescente realmente querría salir con un montón de adultos aburridos?
Yibo no lo pensó de esa manera pero era cierto, sin embargo al no ser invitado no pudo evitar sentirse algo molesto, le molestaba no ser tomado en cuenta.

Pasó las primeras horas mirando televisión pero debido a que se trataba de un domingo realmente no había algo que terminara de agradarle y harto de buscar en cada canal, terminó por apagar la televisión.

Se dirigió a un cuarto y se dejó caer sobre la cama, pero unos momentos después se levantó y se recostó sobre el piso. Rodó par de veces en la pequeña habitación ya que el piso se mantenía un poco fresco, esa sensación le agradaba.

Estaba quedándose dormido casi debajo de la cama en la que solía dormir cuando iba de visita a casa de su abuela en las vacaciones, cuando escuchó la puerta ser tocada suavemente. Frunció el ceño pues había encontrado la posición adecuada y no quería levantarse. La puerta fue tocada una segunda vez, incluso más fuerte que la primera. Sin esperar a que la puerta fuese tocada por tercera vez decidió levantarse y abrir.

- Ya voy. - Dijo antes que pudieran tocar de nuevo, al abrir la puerta se encontró con un chico que quizá le resultaba un tanto familiar.

- Hola, disculpa... ¿se encuentra la señora Yu? - Dijo el chico detrás de la puerta.

-Uh...no está ¿qué deseas? - dijo algo distraído, decir aquello le tomó un par de segundos pues su vista rápidamente fue dirigida a la sonrisa del chico que tenía frente a él.

- Lamento la molestia, pero ¿podrías prestarme una escalera? - Dijo el adolescente sin dejar de sonreír. Parecía ser conocido de su abuela, ya que tenía la confianza para ir a pedirle una escalera.

-¿Para qué la necesitas? - Preguntó Yibo con curiosidad.

Tímidamente el chico bajó un poco la mirada y rascó suavemente su mejilla.

- Debo subir al árbol para bajar el avión de mi hermanito. - respondió.

- ¡Yo puedo subir! Soy bueno escalando árboles. - Ni siquiera supo si su abuela tenía una escalera o no pero inmediatamente al escucharlo quiso ser quien rescatara el avión de un niño que ni siquiera conocía. Probablemente haya sido que no tenía nada que hacer que se animó a salir o el hecho de que desde que había llegado no había salido con ningún chico de su edad.

- Pu-puedes? Es un poco alto y puede que sea peligroso para un niño de tu edad.

¿Niño? ¿Acaso le habían dicho niño? Él ya estaba en la adolescencia, si bien era algo bajito no le gustó para nada este comentario.

- A quién le dices niño? Ya tengo 13. -
Yibo no pensó que aquel chico fuera mayor porque aunque parecía ser más alto no lo era demasiado.

- Oh, lo siento... pensé que eras menor.

No era la primera vez que creían que Yibo era más joven, su complexión delgada, más su estatura ligeramente por debajo del promedio de los niños de su edad y sumando el hecho de tener una cara tierna, no era de extrañar que las personas pensaran que era un par de años menor. Estaba acostumbrado, pero no le agradó que el otro se lo dijera también.