ʟᴏᴠᴇ ᴛᴇɴᴅᴇɴᴄʏ ♡; 《caejose》

Capítulo 3: ᴍᴀʀᴋs

-¡No, necesito saberlo ahora! -soltó Caesar con obstinación-. Hay alguien muy importante a quien necesito... -hizo una pausa, sonrojándose por sus palabras-. Digo, ¡hay alguien a quien debo ver, por el bien de todos! -confesó por fin, agachando su cabeza y ocultando o, más bien, intentando ocultar sus sonrojadas mejillas como si alguien, entre toda aquella oscuridad, fuera a descubrirle.

Levantó la mirada extrañado: su instinto le había indicado que, durante aquellos minutos que habían pasado desde que se había despertado, el chico de voz dulce había permanecido delante suyo.

Ahora, sin embargo, había algo que le decía que se había movido de ahí, que había cambiado su posición sigilosamente.

Mordió su labio un tanto confundido y por un segundo, después de todo aquel rato que llevaba conversando con él, consideró sospechar de la supuesta persona que le había salvado de la muerte.

En ese momento notó una punzada en el brazo izquierdo y una repulsiva sensación, como si en su cuerpo estuviera entrando algún tipo de substancia ajena.

-Ah, sí... -susurró de nuevo aquella voz, justo al lado de su oído. Esta vez, en cambio, se escuchó realmente diferente: hablaba con cierto aire de desdén, escupiendo las palabras como si acumulara un profundo sentimiento de odio o asco-. Te refieres a Joseph, ¿no? -preguntó-. Joseph Joestar...

Caesar abrió los ojos como platos, sorprendido ante aquellas palabras y se dio la vuelta como pudo.

-¿Lo conoces? -preguntó conmocionado.

-Sí. -respondió aquella voz de manera cortante-. Pero preferiría que no hablaras de él cuando estemos juntos... Ahora túmbate y sueña, mi pequeño girasol*... -pronunció de nuevo el otro hombre dulcemente, la cual cosa creó un contraste increíble. Fue tan descarado que, por un instante, Caesar pensó que se trataba de dos personas distintas que se encontraban allí, pero no era el caso.

El italiano empezó a sentir como el líquido que había entrado por su brazo se extendía por todo su cuerpo y relajaba cada uno de sus músculos.

Poco a poco se fue tumbando en la cama, incapaz de mantenerse en otra posición.

-No, no, no, otra vez no... -suplicó el rubio con ojos llorosos. No quería volver a sumergirse solo en la oscuridad absoluta, le temía.

-No te preocupes, Caesar. -sintió una mano suave que acariciaba juguetona su perfecto pero magullado rostro-. Yo estoy contigo, no te dejaré solo, no como lo hizo Joseph...

Entonces sintió como si alguien se acercara peligrosamente a su cara y permaneciera inmóvil, admirándolo.

Durante aquellos segundos, sus ojos pudieron acostumbrarse ligeramente a la oscuridad.

Entre toda aquella lobreguez que llenaba la habitación, pudo entrever un par de ojos bien perfilados y que, seguramente, serían de algún precioso tono claro.

Para su sorpresa, debajo de estos habían unas marcas triangulares que los adornaban.

Espera, ¡eran justo iguales que las suyas!

Antes de que pudiera articular alguna palabra o formular alguna pregunta, sintió como unos finos labios aprisionaban los suyos.

No tuvo energías para rechazar el beso y aunque hubiera tenido pocas, no lo habría intentado.

Antes de caer dormido de nuevo, aún sintiendo aquella agradable pero indebida emoción, volvió a pensar en Joseph; en sus ojos, en sus labios y en su risa y en cómo los echaba de menos.

Y es que joder, Caesar nunca dejaba de pensar en él, y nunca dejaría de hacerlo.

•✦───────────•✧

¡Holis!, me parecía oportuno explicar algunas cosillas sobre este capítulo y sobre la historia en general uwu.

*mi pequeño girasol: No sé si sabréis, pero en el manga dice que las flores favoritas de Caesar son los girasoles y entonces se me ocurrió que esta misteriosa persona, que ya os avanzo, es es el stalker número 1 de Caesar, le llamara cariñosamente así. Se me hace tierno. ajsj

También quería disculparme porque sé que la historia va muy lenta pero en cierto modo adoro describir cómo se sienten los personajes y en esta historia hay o harbá mucho drama y relaciones un tanto tóxicas (obsesión y dependencia emocional), aunque también habrá acción y cosas ricas como amor y pasión entre Caesar y Joseph. e.e

¡Muchísimas gracias por leer! 💗