11.

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Capítulo 11.

Le miré divertida, rodando los ojos mientras lo veía bromear con Christian como era de costumbre. Nuestras madres nos habían dejado la comida echa y se habían ido a dormir. Wen usaba su celular y Brandon comía sin ánimos, mirando a un punto detrás de mi cabeza.

Han pasado dos días desde que pasó lo mío y lo de Blake. Me llevó esa misma mañana a la farmacia para comparar la pastilla del día después y espero que no se nos haga costumbre hacerlo.

—¿Hay algo que haremos hoy?— preguntó Christian— además de haber faltado a la escuela— rió— volvamos a ir de fiesta— propuso. Wen asintió, Blake no negó y Brandon tampoco.

Me encogí de hombros, poniéndome de pie y dejando el plato sucio en la regadera, Brandon se paró junto a mi y me miró con una sonrisa ladeada.

—Sam— llamó mi atención, le miré— ¿Podemos hablar?— preguntó, dejando el plato al lado del mío.

Lo miré de mala gana.

—¿Acaso quieres lastimar mas?— susurré solo para que él me escuchase, pero no fue así, nuestros hermanos miraron hacia nuestra dirección— creo que ya lo has echo lo suficiente, Bran.

—Créeme, es importante— dijo entre dientes, despeinando su cabello.

Alce una ceja.

—Dímelo aquí entonces— me cruce de brazos.

—No— negó— en privado, Sammy— suplicó, agarrándole de la muñeca con fuerza. Me quejé. Todos lo notaron— solo será un minuto.

Blake se puso de pie y Christian miró hacia Brandon.

—Hermano, déjala tranquila, ha dicho que no— espetó Blake alejándome de su agarre. Me ha apretado fuerte. Me ha dolido cojones— ¿Que es eso que quieres decirle que necesita ser en privado?

—Es algo entre ella y yo, Blake— dijo, mirándole mal— Sam, de verdad necesito hablar contigo por que es importante. No tardaré mucho en contártelo.

Negué. Me negué.

—Pues yo no quiero hacerlo, no quiero hablar contigo, no quiero, Bran— espeté.

Brandon rodó los ojos y miró hacia Blake con una mueca de desagrado.

—¿Por que mierda te metes en lo que no te importa, donde no te han llamado, Blake? Quiero hablar con ella, no contigo, hermano.

Blake se encogió de hombro, acercándose a él.

—¿Y ti que mas te da? Ya te ha dicho que no quiere hablar contigo, Brandon— me empujó por el pecho— Lamento que eso no fuese lo que querías escuchar, pero aléjate de ella— le espetó, llevándome del brazo escalera arriba— Te ha apretado muy fuerte, Sam— susurró, analizando mi muñeca, dejó un vasto beso allí y sonreí— te la voy a vendar ¿de acuerdo? Pero primero te colocaré algo.

Asentí.

Me abrazó por la cintura y besó mi frente como ya le era costumbre, enrosque mis brazos en su cuello y le deje un beso en la mejilla poniéndome de puntillas. Nuestras frentes se unieron. Parecíamos una pareja cursi.

—Deja de crecer de una buena vez, no podré besarte si sigues así— dije en forma de regaño.

—Pero mira que fácil es— se puso a mi misma altura, poniéndose de cuclillas y robándome un beso— ¿Ves? Solo tengo que acostumbrarme a tu pequeño mundo— se burló.

—¿Por que eres tan burlón?— bufé.

—Por que si no lo fuese, no sería yo— dijo, sentándome en la cama— ahora siéntate que mi hermano ha sido realmente brusco, nada más mira como te ha dejado la muñeca. Esta roja.

Rodé los ojos.

—¿Piensas que es algo grave eso que tiene para contarme?

Se encogió de hombros.

—Puede ser, pero también puede que sólo haya querido volver a llamar tu atención ya que no has estado detrás de él por dos días— sonrió sarcástico.

—No te vayas a poner celoso, Blake— murmuré.

Él negó y se sentó a mi lado una vez acabó lo que estaba haciendo con mi lastimada muñeca.

—Se que no volverás a caer en las redes de Brandon, Sam, yo confío en ti— Dijo, lo miré sin decir ni una palabra— ¿Por que no lo harás? Cierto?

No le respondí al instante por que estaba pensando.

—Sabes que estoy enamorada de él y trato de superarlo, lo estoy consiguiendo, ¿Comprendes?

Esta vez fue él quien no emitió palabra alguna, solo asintió y me acurrucó entre sus brazos.

—Lo estoy intento y lo lograré, Blake— dije— solo no te vaya de mi lado en el proceso por que sería algo doloroso, ¿bien?

—No lo haré, tampoco te lastimaré— Dijo, soltando un largo suspiro— te lo he prometido una vez y te lo prometeré un millón más. No te desharás de mi tan fácil.

Y le creí, por que Blake es el tipo de persona que cumple una promesa, quien no es capaz de lastimar o de romper un corazón. Blake quiere de verdad. Blake se enamora de verdad.

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MI PRIMERA VEZ CON MI HERMANO DE ACOGIDA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora