13.

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Alaric Patterson en multimedia.

Capítulo 13.

—¡No hagas ruido, Sam!— me gritó ella.

Solté un bufido.

—Tu solo camina y quítate esos putos zapatos de tacón hasta que lleguemos auto— le espeté.

Me hizo caso, al salir al patio trasero, nos dimos cuenta que los chicos estaban allí bañándose en la piscina y soltamos una maldición.

—Ojalá y les de gripa— rodó los ojos— tú hazte la loca, como siempre.

Tiré de su cabello y ella jadeó.

Llegamos al auto casi corriendo y arrancamos una vez dentro.

—¡Allá vamos universitarios!— gritó ella.

Solté una carcajada.

Llegamos a casa de Alaric casi al instante, lo cierto es que el chico no vive tan lejos de nuestra morada.

—¡Deprisa Alaric!— gritó Wen desde el carro, tocando el claxon unas cinco veces. Un Alaric salió corriendo de la su casa poniéndose un zapato.

—¡Vale, ya estoy aquí!— gritó, subiendo en la parte trasera— deja de tocar esa mierda, Wen.

—Me he dado cuenta ya— dije divertida.

Enseguida, Wen arrancó el auto.

—Vamos a una fiesta de universitarios— canturreó ella.

—¿Sus madres les han dado permiso?— preguntó Alaric, haciéndose pasó entre nosotras dos.

—¡Pues claro que no!— gritó ella— ¿Acaso quieres que nos maten?— dramatizó.

—Es que a mi tampoco me han dado permiso— se encogió de hombros— y tú tocando tu puto claxon mi madre se espantaría.

—¿Y como es que no has salido por una ventana y si por la puerta delantera?— pregunté— nosotras hemos salido por la trasera— reí mirando a Wen.

—Mi madre estaba teniendo Sexo— él dijo. Nosotras reímos.

—Casi nos pillan— rió ella.

—¿Y si van a su habitación?

—Nuestros hermanos nos cubren— dijo ella con simpleza.

Blake es mi novio.

Llegamos a la fiesta a eso de 20 minutos de carretera y nos bajamos del carro con unas ganas de fiestas enormes. Últimamente hemos estado saliendo más con Alaric, se fiestas, a cafeterías, ahora éramos tres.

Entramos y ninguno se separó del otro, solo Wen que salió a bailar mientras nosotros dos nos quedamos en la barra y pedimos algo de beber.

Él pidió cerveza.

Yo pedí soda.

—No voy a emborrarme— dije cuando me miró raro— Probablemente me toque manejar a mi— me encogí de hombros dando un trago.

—Vale, ya he podido ver qué Wen ha venido para emborracharse y olvidar sus pesares— rió. Yo también reí.

—Está noche estoy segura que se besará con unos cuantos.

Sus ojos azules me miraron, frunció el ceño.

—Ella es bonita— murmuró, dando otro trago.

Boom. A alguien le gustaba mi hermana.

—Lo se— sonreí— devolviéndole la mirada.

• • •

Wen con más de 20 chupitos después y no sé qué más, y bailando con todo lo que se movía.

Alaric con 10 cervezas y 7 vasos de whiskey después, mientras balbuceaba contra mi hombro.

Eran las 2 de la mañana y la fiesta seguida encendida.

Samantha con 14 vasos de Coca Cola.

—Creo que es una bonita hora para irnos— dije, agarrando a Alaric del brazo mientras se reía de cualquier cosa que pensaba.

Agarré a Wen del brazo igual, la cual se encontraba bailando con un sexy moreno, y la lleve conmigo hacia afuera.

La subí a la parte trasera del auto y de inmediato calló. Alaric se detuvo frente a mi antes de que pudiese entrarlo y me besó.

Me besó. Uno de mis súper amigos me besó.

Y si, inmediatamente lo separe de mi.

—¿Que mierda acabas de hacer?— espeté dándole en la frente.

Rió.

—¿Vas a rechazarme, Wen?— rió, subiendo al auto como pudo y acurrucándose con mi hermana— me dolería, por que me gustas— balbuceó desde dentro.

Oh, ha pensando que era Wen. No hay problema entonces.

Con una sonrisa en el rostro enciendo el auto y conduzco directo a mi casa. Claramente Alaric se quedará allí hasta mañana, sábado.

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MI PRIMERA VEZ CON MI HERMANO DE ACOGIDA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora