──𝐄𝐏𝐈́𝐋𝐎𝐆𝐎

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EPÍLOGO

𝒟𝑒𝓈𝓅𝓊𝑒𝓈 𝒹𝑒 𝓁𝒶 𝓉𝑜𝓇𝓂𝑒𝓃𝓉𝒶

Un año después.

No he vuelto a hablar con nadie de aquel lugar. Me vine a Australia después de la recuperación de Tom en el hospital, porque si, sobrevivió. Estuve con él hasta que en una noche quisieron atacarle y nos fugamos de allí, desde entonces ha pasado un año y estamos mejor que nunca. 

Volví a confiar en él, él no volvió a mentirme que yo supiera. 

Compramos una casa cerca de la playa, no tenemos muchos amigos en este lugar pero no es lo esencial. Admito que no es como lo imaginaba pero me basta, tengo a la persona que amo a mi lado y con eso basta, él es mi hogar, y yo soy su hogar. 

— ¿Que tanto piensas, Lily?

— En nada —Sonreí— El ultimo en llegar al agua es un huevo podrido —Exclamé levantándome de la arena y corriendo al mar.

Esa sensación de libertad, de ser tu misma, sin mentiras ni engaños, no me la quitaba nadie. Y es que por fin era feliz. 

Tom me alcanzó cargándome y luego tirándome al agua. 

— ¡Eh! —Reclamé divertida.

La tarde pasó con nosotros en el agua, arena y devuelta al agua. Siendo nosotros. La playa se encontraba solitaria, y el atardecer ya nos estaba saludando en el final del océano. 

Estos últimos meses pensé en todo lo que viví, y es que yo no volvería hacer la misma nunca más. Nadie lo es después de vivir algo así. Ese día yo desperté, morí, reviví, me enamoré de la persona que jamás pensé y de eso se trata ¿no? Encontrar amor en lugares inimaginables, encontrar luz en oscuridad. 

No volví a saber de Zendaya, era mi amiga, o eso creí. Compartí mis penas, secretos, y aún así me traicionó, total ya la perdoné el día en que recibí una llamada de un numero desconocido. 

Por otro lado, mi hermano se fue de allí y ahora vive en Holanda, mantenemos contacto y ahora somos más unidos que nunca a pesar de la distancia entre nosotros.

Le hicimos el funeral a mi madre dos días después de los sucesos, traté de no romperme, ser fuerte ante los ojos de lo que vi purgando, de los que no tuvieron ni la vergüenza de pedir disculpas en ese lugar. 

Samantha, ella fue cínica, y no volvimos a saber más nada de ella. Tengo el presentimiento que le sigo cayendo mal y que nunca va a admitir que le salve la vida. Eso no sería muy Sam.

Mire a Tom y le sonreí, el estaba perdido viendo la noche caer así que no se dio cuenta de que lo miraba, tome su mejilla y le di un pequeño beso en esta. 

— Te amo, gracias por haberme secuestrado hace un año. —Solté en broma.

El rió levemente con una sonrisa de lado. 

— También te amo, ¿y sabes que? Te voy a preparar ahora mismo un plato que me enseño mi madre de pequeño —Se levantó y extendió su mano para ayudarme a levantarme, la cual acepte.

— Que no se te queme como la vez pasada.

— Yo se que te gustó. 

— Ay por favor, eso era carbón.

— ¡Tenía su toque a parrilla! 

Y así nos adentramos a la casa, dejando los malos recuerdos atrás. 















THE END

¿Que les pareció la historia? No se crean que iba a matar a Tom, parfavar, soy cruel para hacerles creer eso, pero no como para terminar mi primer fanfic así. O sea.


¡GRACIAS POR TODO EL APOYO QUE TIENE ESTE FANFIC! ♡♡

Los amo mucho, sus comentarios me hacen el día, la tarde y la noche.

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𝐓𝐡𝐞 𝐏𝐮𝐫𝐠𝐞┊𝑻𝒐𝒎 𝑯𝒐𝒍𝒍𝒂𝒏𝒅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora