Cambios de linea

La llegada de Riana Phoenix

-Continuamos-

-Club del ocultismo-

-Narra Ryo-

Me encontraba solo en el club del ocultismo terminando unos reportes que debía enviar al inframundo sobre la situación actual de mi territorio, los cuales eran una rutina para mi y que de hecho estaba apunto de terminar, pero de repente enfrente de mi apareció un pequeño círculo de teletransporte con el símbolo de mi familia. A través del círculo apareció una carta con el sello personal de mi madre, así que supuse que era algo urgente, por lo cual me apresure a leerla.

Cuando termine de leer la carta, use mi poder de la destrucción e hice que la carta desapareciera. Después me levante rápidamente de mi silla e invoco un círculo de teletransporte, pero este se destruyo de repente y de hecho causo una pequeña explosión en la sala, que me saco volando contra mi escritorio.

¿A dónde crees que vas Gremory?- Fue la pregunta que me hizo Alan mientras me veía desde el techo colgado como un vampiro.

¿Qué haces aquí Alan?- Fue la pregunta que le hacía yo mientras me levantaba del piso.

Realmente eres un maleducado por no responder mi pregunta antes de hacer una, pero como soy amable te responderé, sentí que alguien de esta sala trataba de teletransportarse a la casa de Isara, así que vine a ver quien fue el idiota que lo intento y por lo que veo fuiste tu.- Fue la respuesta que me dio mientras comenzaba a caminar sobre el techo, hasta quedar cara a cara contra mi.

¿Cómo lograste destruir mi círculo de teletransporte?- Fue la nueva pregunta que le hice mientras le mantenía la mirada.

¡Vaya!, no trataste de negar que intentaste ir a casa de Isara sin su permiso, te lo doy por buena Ryo. En fin, respondiendo a tu pregunta fue algo simple, solo puse un sello que evita el teletransporte a una locación especifica.- Fue lo que me decía mientras bajaba del techo y me veía de manera tranquila. Cosa que me estaba aterrando.

Ahora bien, yo quiero hacerte una nueva pregunta.- Era lo que me decía, mientras yo sentía como una enorme brisa comenzaba a inundar la habitación.

¿Por qué querías ir al cuarto de Isara?- Fue el grito que me dio, al mismo tiempo que me estampo contra un muro y comenzaba a estrangularme.

Te...lo...dire...si...me...sueltas.- Fue la oración que logre formar mientras me quedaba sin aire, la cual pareció convencer a Alan, pues me soltó.

Después de recuperar el aliento comencé a contarle.

Estoy desesperado.- Fue lo primero que le dije, lo cual pensándolo mejor, no fue la mejor forma de iniciar el tema.

Se que estas enamorado de Isara y que eres virgen, pero estas no son formas de matar dos pájaros de un tiro. - Fue lo que dijo Alan, obviamente insinuando que yo quería perder mi virginidad con Isara... Algo no tan erróneo, pero que me causo mucha vergüenza.

¡No es lo que piensas!- Fue el grito avergonzado que le di, él cual solo le causo gracia.

Fuu- Mira en este momento me encuentro en una situación complicada y la única forma de salir de esta es  si me dejas ir y acostarme con Isara.- Fue la razón que le di a Alan, la cual en retrospectiva no fue buena idea. Decirle a un dragón sobreprotector que quería acostarme con la chica que considera su hermana menor , ha sido una de mis mayores estupideces.

Después de decirle eso, solo recuerdo el recibir un poderoso derechazo en el rostro y de ahí lo único que viene a mi mente es ser golpeado repetidas veces hasta terminar a las afueras de Kuoh.

-Afueras de Kuoh-

Así que un compromiso arreglado, debí suponer que era algo como eso.- Era lo que le decía Alan a Ken.