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Yoongi cada vez se acostumbraba más a su nueva vida, se sentía tan cómodo con el omega. En las noche salía al bosque a cazar, quería quitarle algo de carga a Jimin, no debía seguir yendo al bosque solo, podía ser peligroso por lo que algunas veces lo acompañaba e incluso paseaban con la luz de la luna como guía. Jimin siempre tenía algo que contar, ya sea de los libros de su abuela, del lugar, de la Sra Choi, de las flores, incluso le contó que había otro omega como él en el pueblo, que la pasaba verdaderamente mal, porque lo golpeaban.

-Como si el maltrato verbal y psicológico fuera menos doloroso- pensó el lobo.

Un día Jimin entró al sótano más alegre de lo normal, el lobo pudo percibir que hoy era un día especial. El chico trajo varias cosas, puso un mantel en el suelo, y comenzó a traer muchas cosas, comida preparada y algo que llamo la atención de Yoongi.

-Hoy tendremos una comida especial lobito, hoy es mi cumpleaños, cumplo 22 años- entre las cosas que trajo saco un gorro de cumpleaños de colores, parecía muy artesanal hecho a mano. Yoongi se sorprendió, había acertado con la edad, tenía casi la misma que Taehyung, corrió hacia una puerta yendo directo al bosque, tenía que buscar algo para regalarle al omega, si fuera humano,  buscaría la joya más cara y preciosa que podría comprar para  dársela, pero era un lobo y tenía que improvisar, corrió y corrió, sin encontrar nada.

"Cuando hagas un regalo a alguien especial, tienes que hacerlo pensando en la persona querida, tienes que pensar en sus gustos, en lo que quiere, en lo que le apasiona, a veces lo menos es más Yoonie, sigue a tu corazon" eran las palabras que alguna vez su madre le había dicho, miró nuevamente alrededor y vio, muchas flores y frutos, lo que Jimin amaba, tenía que pensar, no podía ser cualquier flor ni cualquier fruto.

-¡Bingo! lo que buscaba- corrió a la casa con su regalo.

Al entrar al lugar, se sintió horrible al ver al omega con los ojos vidriosos se había llenado de pensamientos negativos, fue rápido a dejar lo que traía frente del omega y lamio su cara, era la única forma que tenía de mimarlo.

Jimin miró lo que el lobo había traído, envuelto en una gran hoja, eran tulipanes rojos, arándanos, moras, frambuesas y fresas. Aunque Jimin no lo supiera a eso olía el, no por nada había elegido aquellos frutos.

-¿Para mi?, ¿un regalo para mi?- dijo el omega señalandose.

Yoongi con su hocico volvió a acercarle lo que había traído, dándole a entender que si. El omega era felíz, sus ojos brillaban de emoción y no podía dejar de sonreír, se abalanzó al alfa para abrazarlo.

-Gracias, gracias, hace tanto que no tengo un regalo, muchas gracias lobito-

Yoongi no podía sentirse más feliz de hacer sentir bien al omega, su pecho se inflaba de orgullo. Jimin contemplaba aquellas flores, las había puesto en un vaso porque florero no tenía.

-¿Sabes que los tulipanes rojos significan una declaración de amor eterno?, ¿acaso me estás cortejando lobito?- dijo burlón achicando sus ojos.

Yoongi quedó estático, ¿lo estaba cortejando?, el sabía el significado de esa flor, pero lo había hecho inconscientemente, sólo siguió a su corazón, se sintió tímido, tal vez si fuera humano estaría sonrojado agradecía ser un lobo y poder ocultarlo, nunca se había sentido así.

-Es la primera vez que recibo este tipo de flores y tal vez sea la única, los omega como yo no nos regalan estas flores- miró a Yoongi- gracias me hiciste muy feliz- y le sonrió.

-Yo te regalaría un jardín entero y aún así sería poco-

Comieron la cena especial, una de cumpleaños, Jimin estaba realmente feliz, reía a cada tontera que hacía el lobo, buscaban la forma de entenderse. Había llegado el momento del pastel, pero como no todo puede ser felicidad, escucharon un ruido, el beta había vuelto antes de tiempo, el lobo corrió a esconderse y Jimin guardo lo más que pudo antes que la puerta sea  abierta.

-Aquí estás omega tonto, tengo hambre cocina algo- miró a un costado y vio las flores.

-¿Que tenemos aquí? ¿Flores de cortejo? ¿Alguien te está cortejando?  ¿No se da cuenta lo que eres? ¡Te estoy preguntando!- lo agarró del brazo.

-N-nadie, yo las corte- dijo adolorido por el agarre. El beta lo soltó bruscamente, y se dirigió a las flores, las pateo tirando el vaso en el que estaban.

-Ya me parecía, que idiota te cortejaria, no sirves para nada, no puedes tener hijos y mucho menos complacer a nadie, aunque siempre me llamo la atención saber que se siente estar con alguien como tu- se acercó al omega.

Jimin vio de lejos como se removió el lugar en donde estaba el lobo y con su mano le hizo seña que no se moviera, no quería arriesgarlo. Yoongi en su lugar se sentía inútil, y con mucha bronca, quería matar a ese beta, lo descuartizaria en mil pedazos, pero sabía a eso le traería problemas al omega, sin embargo si tocaba uno de sus pelos no le importaría nada.
El beta miró al otro lado, y vio el pastel.

-¿Un pastel? ¿En eso gastas la comida que te dejo? Oh! Es tu cumpleaños ¿cierto? ¿Y con quien lo festejas? - miró a su alrededor buscando a alguien.

Pero el omega reaccionó antes que siga indagando.

-Nadie- habló jimin.

-Esto es extraño, pasas mucho tiempo aquí, ummm pero más extraño sería que alguien te quiera, he estado buscándo alguien que quiera a alguien como tu, hasta tu familia quiere sacarte de encima, aunque a mi se me acabe el negocio, también estoy cansado de ti, eres tan irritante siempre con esa cara de bueno, tan inútil, tanto así que tienes que pasar tu cumpleaños en un sótano festejando con las ratas, ya que tu propia familia te quiere lejos, tal vez deberías nose, acabar con tu vida y te ahorras todo esto- las lágrimas de Jimin comenzaron a caer, era verdad que era una carga para su familia, que nadie lo quería ni lo iba a querer. Fue hacia el pastel y lo tiró al piso.

-Para tus amiguitas ratas, ya me quitaste el apetito, limpia todo esto, yo me iré a dormir.- se fue dejándolo sólo.

Jimin lloraba, caían mares de lágrimas por sus ojos, su cumpleaños se había arruinado, como podía irse toda su felicidad en unos pocos minutos. Yoongi al sentir al beta lejos corrió hacia el omega a consolarlo, intentó todas sus tácticas para calmarlo  pero no pudo seguía llorando y llorando, el que podría haber sido el mejor cumpleaños después de años, se había arruinado, las flores, el pastel, ahora el lobo debe verlo patético, eran los pensamientos de jimin, en cambio Yoongi estaba preocupado, dolido y enojado, su lindo omega no paraba de llorar, sólo le quedo estar a su lado y acompañarlo en su tristeza.

El omega lloró y lloró hasta quedarse dormido, el alfa lloró con el, hace años que no lo hacía, incluso la ultima vez fue el día q murió su madre, ni en la muerte de su padre soltó una lagrima, ni cuando no pudo volver a ser humano, porque el se merecía todo lo que le pasaba, pero Jimin no, esa noche lloró, por lo cruel del mundo, porque Jimin se merecía todo lo bueno que existe, por lo injusto que eran con el ser más hermoso y puro que existía, lloró por ese lindo omega que estaba al lado suyo.

                         ~~ * ~~

Este capítulo es más corto que los interiores, pero no menos importante, finalmente el Yoongi de está historia se está ablandando. Espero les guste...! 😘😘😘 

Incomplete // YoonMin // OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora