Entró y solo veo a un hombre de traje muy elegante de espaldas mirando atravesar de la ventana, la enorme ciudad. Su cabello era rubio y estaba medio despeinado. Cuando se percato de mi presencia, se voltio y me vio directamente a los ojos y penetraron en los mios.
- por fin tengo el honor de conocerte- dijo estirando la mano para poder estrecharla- ________ Jarrel?-
-así es- dije sin pensarlo
-soy Kendall Schmitd- mencionó- soy tu abogado-
No conteste, y solí me quede mirando su hermoso rostro. No puedo mentir. Empezó a decir cosas que ni entendía. Dinero......... Herencia........ Padre
-señorita Jarrel necesitó que me de uno datos para que lleve la solicitud y le den toda la herencia-
Ok. Ya estaba más tranquila
- esta bien.¿me van a dar el dinero o lo voy a pasar a buscar?- estaba tan desesperada en recibir es dinero para hacer mi venganza.
- pues por política del banco y por la ley, me exigen que yo le entregue en dinero integro hasta su casa-
- ok- no tarde ni un minuto en darme cuenta que este hombre, me estaba coqueteando, por la forma en que me miraba y sus gestos en las manos.
- listo firme aquí, aquí, y aqui- dijo señalándome las pequeñas rayas.- bien eso es todo, señorita Jarrel-
Me levate de la silla y le di la mano con indiferencia. El igual se levanto y me acompaño hasta la puerta .
Cuando salí, me sentía mas segura que nunca. Ya tenia dinero y solo faltaba comenzar a investigar sobre el asesinato. Pero lo malo es que no se por donde carajos empezar.
Así que empezaría por contratar un detective privado. Si eso es, y tendría que ser el mejor.