~CAPITULO 6~

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[DENNISE]
Una vez que llegamos a la barra Bianca pidió por nosotras.
-Me da tres Daiquiris, por favor- le dijo al camarero- Bueno, hay bastantes chicos guapos a tú disposición Denny, mira a ese bombón.- Comentó señalando a un chico en el fondo.

-Me voy a tener que poner celoso, señorita Jiménez.- dijo una insoportable voz que conocía de sobra mientras abrazaba por la espalda a mi amiga

-¡Ty!-grito Bianca siendo interrumpida por el camarero cuando trajo nuestras bebidas-Gracias- dijo rápidamente- Tomad, las vuestras guapas. Y ¿cuándo has llegado?-Preguntó antes de girarse y besarlo.

-Hace un ratito ya, me había quedado admirando la belleza de estas tres chicas cuando dije, pero si es mi chica y sus amigas y aquí estoy- Odio su puta voz de verdad, ojalá y se quede mudo, pesado.-¿Qué tal estáis chicas? Miriam, ya me ha dicho Connor que lo habéis dejado....¿mañana volvéis no?-Decía riéndose.

-Pues yo muy bien y en cuanto a la segunda parte no, ya es la última, no quiero saber nada de ese imbécil.-Responde cruzandose de brazos, aunque con un tono duditativo al enunciar la ultima parte.

-Pues una pena oye.- Al ver que no le contestaba decidió hablarme directamente- Dennise te veo guapísima, ¿te has echado novio ya?- Este gilipollas ahora se burla de mi o qué.

-Pues no, al contrario que tú, que necesitas a Bian para poder vivir contento, yo no necesito ningún hombre para vivir mi vida, sola estoy muy agusto, gracias- Dije tras beberme la copa de un trago y alejarme, y este que se cree, que mi vida va a depender de un hombre para que me salve de las cosas malas, pues no, yo me salvo sola.

Al llegar al centro de la pista de baile, me dispuse a localizar una buena presa para tener una noche de placer. Decidí hacerle caso a Bianca y fuí a por el rubio que había señalado. 

-Hola guapo, soy Dennise.-Le dije con un tono coqueto.

-Emm, hola, soy Nicholas, pero llámame Nick- Dijo dándome la mano

Mirándole de cerca es bastante mono.-¿Puedo invitarte a una copa?

-Por supuesto- Contestó mientras me cogía la mano e íbamos hacia la barra.

Tras beber un par de horas juntos, decidimos ir a mi casa para pasar la noche.

-Qué coche más bonito, casi tanto como tú- le dije a Nick- Mi casa está en la calle- dije callandome al ver una cara que me resultaba muy familiar, pero no recordaba de donde.

-¿En que calle?- Me dijo con impaciencia.

-Ah si, en la quinta.- Contesté mientras me metía con él en su coche.

TRAS 8 AÑOS SIN TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora