【『Dear Freddy』】Fredold

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No sabía en qué momento, como o por qué, sólo sabía que de fondo musical estaba "After hours - The Weeknd".

Estaba siendo cargado por aquel rubio ceniso de los muslos, lo tenía contra el closet.

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Lo que pasó es que al momento de entrar en la habitación de Gold, Freddy se distrajo contemplandola que no noto cuando cerró esta y le puso pestillo, comenzó a desabotonar su camiseta negra y después se la quito.

—Ten Fazbear.— Aventó la camisa semi doblada al castaño quien la atrapó.

—Graci- ¿Gold?

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Así fue como llegaron a estar así, Gold cargandolo contra el closet, como antes lo mencione, Freddy para no caerse tenía sus brazos al rededor de su cuello, no quería caer en la tentación, pero la colonia de Gold era totalmente atractiva y todavía más esa mirada dominante, maldita sea ¿como podía escapar de esa? Decir que "no" ya no era una opción.

—G-gold...— Suspiró pesadamente, desvío ligeramente la mirada, no quería que viera como comenzaba a caer lentamente. —Esto no está bien... Golden y yo estamos saliendo desde hace un año, n-no puedo hacerle esto.

—Dime una cosa Fazbear. —Tomo con delicadeza el suave mentón del moreno haciéndolo voltear nuevamente a donde estaba. —¿Lo dices por ti o lo dices por Golden?

Esa pregunta lo había dejando pensando, era cierto, ¿lo estaba haciendo por que él no quería en serio o lo estaba haciendo por no lastimar a Golden? Una infidelidad era algo fuerte, y eso lo sabía por parte de su hermano, cuantas chicas no perdieron su dignidad solo para que ese peli negro no las dejara por otra chica o las que se iban realmente enojadas y llorando por enterarse que ya había otra. Mierda. En serio no quería provocarle ese sentimiento a Golden. Pero ahora entendía y estaba como Alexander Hamilton; ¿como podía decir que no a eso?

—Bajame, por favor. Ya te lo he dicho Gold, esto no está bien. Y lo digo por mi.

El rubio cenizo no puedo alegar nada, si Freddy lo decía por él, no podía hacer nada, lo separó del closet acomodandolo un poco mejor, pego su nariz a su cuello disfrutando de ese dulce y tierno aroma a galletas. ¿Por qué no pudo conocerlo antes que Golden?

—Gold...

—Lo siento, solo déjame unos dos minutos así contigo.

Freddy suspiro y acomodo bien su cabeza, si iba a estar así pues quería comodidad, chale. Pasaron más de dos minutos, Freddy ya se estaba quedando dormido y Gold seguía sin hacer nada; al darse cuenta de esto camino con dirección a la cama apretando un poco los muslos del castaño sin tocar su trasero, respeto señores, respeto. u.u

—¿Quieres dormir un rato?

—Sí, pero sólo, y ponte tu camisa por favor.

Gold dejó a Freddy en su cama, lo tapó con la cobija como si de un bebe tratase y simplemente se quedó admirandolo, era tan tierno, tan pequeño, tan perfecto. Si fuera por el se lo volaría ahí mismo valiendo le verga todo. Pero no, si se iba a hundir, había que hundirse como caballero.

—Descansa, Fazbear, yo le mandare la camisa negra a Golden.

Esta vez si dobló bien la camisa negra que yacía en el suelo, tomó un suéter blanco y se lo puso, algo rapidin. Miró por última vez al castaño que ya se había dormido y salió con cuidado de no despertarlo de la habitación, carajo, tenía bastante fuerza de voluntad y eso era admirable. No le gustaría lastimar a su hermano, pero, por tener a Freddy sería batman beibis.

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WEY NOOOOOOOO.
YA NO ME SALEN MIS PENDEJADAS AYUDAAAAAAA. :((((
Quédense en su casita y guarden susana distancia o conazcan a Abran. Jsjsjsjs.