¿En serio? -No sabía si creerle o no- ¿Cómo?
No se cómo lo hice, no recuerdo nada, lo último que recuerdo es el grito... de mi mamá -Seguía serio, yo estaba un poco nervioso, pero tenía que seguir seguro-
¿Qué eres? -No quiero que se vaya- ¿Cuántos años tienes?
Soy un niño y tengo siete años -Oh, es casi de mi edad-
Eres más alto que yo y tengo un año más que tú -Hice un puchero- Eso no es justo, yo también quiero ser alto como tú
¿Quieres jugar conmigo? -Dijo con un tono más feliz que el que tenía anteriormente, así que asentí- Sígueme
Puedo hacer que te metas ahí y que puedas jugar conmigo -Señaló mi casa de muñecas-
Eso es imposible, no te creo -Dije incrédulo y apunto de reír-
Es en serio, te puedo enseñar -Fijó su mirada en mí, después quedé cegado por unos segundos-
¿Q-qué? -Miré mi alrededor y ya no me encontraba en mi cuarto, estaba en una casa muy extraña- ¿Soobin?
Aquí estoy, te dije que podía hacerlo -Ahora Soobin parecía un niño de verdad, se veía... mejor- ¿Qué pasa?
Ahora sí pareces un niño de verdad, como yo -Terminé de decir eso y se empezó a acercar, me estaba abrazando- Te puedo sentir, yo creo que ahora sí podemos jugarSí, juguemos a las escondidas -Lo miré un poco nervioso, pues aunque era mi casa de muñecas, daba miedo- Me da un poco de miedo tu casa, ¿Me la puedes enseñar? -Asintió y me agarró de la mano para después caminar, su mano estaba fría, pero su tacto me hacía sentir menos nervioso-
Soobin le enseñó toda la casa a Yeonjun, era una casa llena de muchas cosas y era muy tétrica, pero en cuanto terminaron de ver todas las habitaciones, fueron a la sala para elegir quién iba a contar, pues el pequeño de pelo oscuro todavía quería jugar con Yeonjun; hicieron papel, piedra y tijeras para poder decidir y perdió Soobin, ahora él tenía que contar mientras el pequeño se escondía rápidamente. Yeonjun decidió esconderse en un cuarto donde había un armario muy grande, no había mucha ropa así que cabía perfectamente, lo malo es que no tenía con qué taparse, como en la casa había echo, pudo escuchar cuando Soobin terminó de contar, la adrenalina del pequeño aumentaba cada vez que se escuchaban pasos muy cerca, pero nunca lo encontraba, hasta que Yeonjun dejó de escuchar pasos y eso lo tranquilizó, pero se abrió la puerta del armario de golpe haciendo un ruido tremendo.
¡¡¡AH!!! -Soobin empezó a reír como nunca al ver mi reacción cuando me asustó- No es gracioso...
Te encontré, perdiste -Salí del armario con lágrimas que se estaban acumulando en mis ojos- ¿Vas a llorar?
No me gusta que me asusten -Dije con los ojos llorosos, estaba intentando no llorar, no quiero llorar enfrente de él, no puedo.-
Perdón, solo estaba jugando -Me intentó abrazar, pero no me dejé- ...
Estoy enojado.
¿Me perdonas? -Al no darle una respuesta, ví como se iba de la habitación. Que divertido, después de que me asustó me deja solo llorando-
¡Soobin, no me dejes aquí solo! -Grité para que me pudiera escuchar y volviera- ¿Soobin?Escuché a alguien subir rápido las escaleras, las pisadas cada vez se acercaba más, la verdad me asusté un poco y me metí rápidamente al armario, pero sin cerrar las puertas por si era Soobin, las pisadas llegaron al cuarto donde yo me encontraba, era Soobin, ahora estaba más tranquilo, así que bajé mis pies del armario y me quedé sentado en el borde.
Tengo dulces, ¿Cuál quieres -Me extendió la mano y tenía varios caramelos- Yo quiero la paleta
Yo también quiero una -Agarré la última paleta- ¿Podemos descansar?
Sí, podemos ver la tele -Lo miré con mis ojos bien abiertos, no pensé que la tele funcionaría.-
Fuimos a la sala y Soobin encendió la tele, no había muchos canales, pero había uno de caricaturas un poco raras a mi parecer. Después de un rato de ver la tele, había terminado mi paleta, así que me fijé si Soobin también se la había acabado, por suerte sí. La verdad ya estaba un poco aburrido de ver la tele, no entendía nada de lo que decían de todas formas, así que pensé en seguir jugando con Soobin.
Soobin -Soobin volteó a mirarme fijamente- ¿Podemos seguir jugando?
De hecho, creo que es un poco tarde para que sigas aquí conmigo, te llevaré de nuevo a tu cuarto, pero, prométeme que no le dirás esto a nadie -Me estiró el meñique- Promételo
Lo prometo -Junté nuestros meñiques-
Tal vez esto lo recuerdes como un sueño, pero yo soy real, no me olvides -Dijo un poco rápido, como si el tiempo se estuviera acabando- Eres mi único amigo
Tal vez si te veo más seguido no te olvidaré -Me miró dudoso, pero, después parece que lo estaba pensando- ¿Mañana puedo venir?
Sí, pero ahora debes irte -Me miró como antes- Adiós Yeonjun.
Adiós Soobin. -Quedé cegado de nuevo.-
Desperté en mi cama, ¿Realmente todo fue un sueño?, Soobin dijo que era real y yo era su único amigo, no puedo olvidarlo.
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Dollhouse ~ Soojun/Yeonbin
FanfictionA Yeonjun le fascinaba jugar con la casa de muñecas que le regalaron por su cumpleaños, pero, lo mejor era aquél lindo muñeco, pero algo que él no sabía es que no era un juguete común e inocente.