Perdóname 《K I M T A E H Y U N G》

07.

Alice había separado un tercio de su dinero y lo había metido en un sobre con destino al albergue de animales del distrito.

Cada mes hacía lo mismo y le daba el sobre a su padre para que lo mandara.

Esta vez, esa le pareció una buena excusa para poder entrar en la oficina de su padre y ver a Taehyung.

El día anterior no había logrado verlo pues la resaca de haber salido a la discoteca la tenía muerta.

Pero ahora se sentía bien y había decidido tomar la iniciativa e intentar coquetear con Tae.

Alice toco la puerta de la oficina un par de veces y sin esperar respuesta, entró.

James no estaba ahí, pero maravillosamente Taehyung si.

—¿Y papá?—

—Fue a la empresa a recoger papeles—respondio él.

—Oh bueno—Alice se hizo paso en el oficina y dejó el sobre con el dinero sobre el escritorio, lo suficiente visible para que su padre lo encuentre pero lo suficiente alejado para que Taehyung no lo leyera.

Después de todo no era asunto de Tae las donaciones que Alice hacía, ella solo quería acercarse a él.

—Taehyung ¿Que edad tienes?—preguntó Alice. Se apoyó en el escritorio, justo al lado de la silla en la que se encontraba el.

—31—respondió.

Alice ya lo sabía.

—¿Te gustan las chicas mayores o menores?—agregó.

Mierda, mierda, mierda. Esa pregunta había sido demasiado obvia, pensó Alice.

Taehyung sonrió y miró fijamente a Alice. Ella estaba apunto de sufrir un colapso total por la belleza de este.

—No me importa la edad—respondio.

Alice sonrió ampliamente dejando muy en claro lo feliz que la había hecho su respuesta.

Él se puso de pie y se colocó frente a Alice.

Ella estaba nerviosa, era la primera vez que él se acercaba tanto a ella.

—Lo que no me gusta, son las chicas que salen todos los días a fiestas—dijo y como si fuera poco, volvió a sonreir de esa manera en que ponía de rodillas a cualquier mujer.

Alice quedó asombrada. ¿Había sido eso un rechazo?

Taehyung regresó a su asiento y empezó a tipear en su computador.

Ella seguía a su lado, inmovil, pensando en que responder.

—¿Que tiene de malo ir a fiestas?—Preguntó.

—No tiene nada de malo, pero ir todas las noches, no es sano—dijo él.

Había tomado ese comentario como un desafió, no un rechazo. Ahora nada la pararía y no tenía miedo de gritar a los cuatro vientos su amor.

—Entonces ya no lo haré—Soltó.

Taehyung se regocijaba por dentro, las cosas siempre salían como él quería.

—De ser así... ¿Te gustaría?—agregó Alice y rezó por lo bajo esperando la respuesta de él.

Jamás se había declarado de esa manera.

—Ya me gustas—Dijo Taehyung con la voz grave que lo caracterizaba.

Y como consecuencia el corazón de Alice casi sale de su lugar.

Las ganas de besarlo en ese momento eran infinitas, pero no era el tiempo.

Alice sabía más que nadie como los hombres jugaban con las mujeres y lo fácil que era caer en palabras bonitas y por más feliz que se encontrase en ese momento, debía mantenerse calmada y esperar a que el destino le favoreciera.

Taehyung jamás había puesto interes en ella y a pesar de la buena impresión que tenía ella y su padre, de él, no quería adelantarse a nada.

Alice sabía que estaba enamorada y muy aparte de las mariposas se sentía vulnerable y eso no le agradaba.